El cambio-cábala que no le falla a Francia

¿Coincidencia o cábala? Como sea, lo concreto es que al técnico de Francia, Didier Deschamps, una decisión nunca le ha fallado. La tomó en los cinco partidos que el cuadro galo ha disputado en el Mundial de Rusia y nunca ha perdido.

Antoine Griezmann debe haber asumido que cada vez que Nabil Fekir estaba al borde del campo de juego, el que salía era él. Esto porque, seguramente en el afán de cuidar a su mejor figura, Deschamps siempre lo sacó antes de tiempo. Lo hizo ante Australia (69'), frente a Perú (79'), contra Dinamarca (68') y en la victoria sobre Argentina (72'). Quizás para no perder la costumbre (o tentar la suerte), la paleta electrónica volvió a indicar la misma modificación en el segundo minuto de adición del partido frente a Uruguay.

A Francia le quedan duelos más por jugar. Y a Deschamps, los mismos encuentros para poner en práctica su tradición.