El mejor número del Mago
Valdivia fue la figura de Colo Colo ante Delfín. Intervino en ambos goles, regaló una jugada que tiene su sello y batió un récord. "Es un tapabocas", dijo.
Minuto 30 del retrasado partido que Colo Colo termina ganándole a Delfín, en Manta. Fernando Meza efectúa un cambio de frente para Jorge Valdivia, quien en el acto regala un poco de su inagotable repertorio. No espera que el balón caiga para dominarlo. Lo recibe en el aire con el pie derecho. Y le da un valor añadido a la jugada: con el control dirigido deja en el camino a Geovanny Nazareno. Sólo la falta de Bruno Piñatares más adelante logra frenarlo.
La jugada forma parte de su sello. La había realizado también en agosto de 2011, en un amistoso de la Selección frente a Francia, desde donde proviene su principal cultor: Zinedine Zidane. Esa vez, la prensa francesa enloqueció.
"Son habilidades motoras que no todos tienen. Son gestos técnicos que son propios de él. Por mucho que un tipo las quiera trabajar, lo más probable es que no las pueda obtener. Es un gesto técnico muy complejo", explica el preparador físico Manuel Astorga para dimensionar la acción. De paso, descarta riesgos. "Cuando la musculatura está acostumbrada, el requerimiento lo va a soportar. Quizás cuando tenga mayor edad, existirá un riesgo de lesiones musculares, pero mientras él sienta que es capaz, no tendrá problemas. Son gestos técnicos habituados. Lo llamaría habilidad más que gesto técnico", dice.
La acción forma parte de un partido casi perfecto del exvolante de Palmeiras en Ecuador. Lo grafica su participación en la elaboración de ambos goles del Cacique. En el primero, inició una combinación con Esteban Paredes que terminó en el puntazo de Jaime Valdés. En el segundo, fue derribado en el área por el arquero Pedro Ortiz. La falta la capitalizó el Tanque.
Las estadísticas también confirman el trascendental aporte del Mago. Según información proporcionada por Opta, Valdivia batió un récord en el torneo continental: con un 91 por ciento de efectividad en duelos (30 de 33) rompió el registro vigente desde 2013 en el torneo continental. Lo tenía el también chileno Pedro Pablo Hernández quien, jugando por O'Higgins ante Lanús, en febrero de 2014, ganó 20 de 32 disputas.
El sistema establece con claridad el concepto de duelo. "Todas aquellas disputas entre dos jugadores dentro de un partido: Balones aéreos, infracciones, regates y quites", describe. El desglose del partido de Valdivia considera siete disputas aéreas (seis de ellas ganadas); 11 infracciones recibidas (no cometió ninguna); cuatro regates exitosos (cuando, de frente a un rival, logra eludirlo y seguir con el control del balón), nueve quites y apenas dos pelotas perdidas.
El propio Valdivia, quien se transformó en tendencia en las redes sociales por un singular reclamo después de una falta recibida, destaca su actuación. "Es un tapaboca a todos los que hablan de la edad y la intensidad. Me trataron de viejo", se descarga después de la victoria, clave para el Cacique.
Incluso, revela una infidencia. "Mi hijo, después del partido con Delfín, en Santiago. no me saludó y le dije que iba a ganar el clásico y en Ecuador. Pedí trabajar aparte en la semana. Me preparé porque había que dejarlo todo. Para mí fue un partido extraordinario, más allá del resultado. Estoy en Colo Colo para aportar lo que más pueda mientras pueda. Me vengo sintiendo tranquilo, consciente de la responsabilidad que significa estar en este club. No estoy viejo", sentencia.
Ese trabajo, según Astorga, sólo le reporta beneficios. "La preparación física adicional que ha desarrollado, sin dudas. le da soporte", dice el especialista.
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