Argentina recauda US$ 5.300 millones en blanqueo de capitales

Un éxito "extraordinario" e "indiscutible". Con esos adjetivos el saliente ministro de Hacienda de Argentina, Alfonso Prat-Gay, describió el proceso de registro de capitales que se anunció en mayo y que cumple su primera etapa el sábado.

En su última conferencia de prensa como jefe de las finanzas públicas, tras su destitución anunciada el lunes por el gobierno de Mauricio Macri, el funcionario detalló que el gobierno ha recibido 235 mil declaraciones juradas con activos por US$ 90 mil millones (17% del PIB), lo que se traduce en una recaudación de 82 mil millones de pesos argentinos (US$ 5.300 millones).

La cifra equivale a 1 punto del PIB transandino, lo que se compara con la proporción de 0,9% lograda recientemente en Brasil y la tasa de 0,6% registrada en Chile por el mismo concepto, dijo.

"Está en el ranking de las amnistías fiscales más importantes del mundo", destacó Prat-Gay, quien confidenció que el blanqueo -cuyo objetivo es la reparación histórica de los jubilados- superó "largamente" las expectativas de los más optimistas. La autoridad precisó que el dinero informado a la fecha, que paga una tasa de impuesto variable de 0% a 12% según monto y tipo de activos, supera en 35 veces el monto declarado en un proceso realizado bajo la administración de Cristina Fernández.

A su juicio, este sinceramiento "es una señal de que efectivamente las cosas están cambiando en Argentina", país que, en su opinión, "históricamente estaba acostumbrado a esconder sus ahorros".

Evaluación de su gestión

De acuerdo al ministro, la repatriación de fondos es "el último hito de esta etapa de ordenamiento de la desordenada economía que recibimos" a fines de 2015. Los otros dos grandes eventos fueron el levantamiento del cepo cambiario y la resolución del conflicto de la deuda con los "fondos buitres".

"La convicción es de misión cumplida en todos estos frentes en un año muy duro de transición", manifestó al hacer un balance de su gestión, que finaliza el lunes.

Frente a las críticas recibidas por la lenta consolidación fiscal, el también ex presidente del banco central aseguró que, durante este año, la política fiscal estuvo al servicio de la gobernabilidad.

Prat-Gay subrayó la desaceleración en la inflación y se mostró confiado en que se logrará la meta de una déficit de 4,8% en 2016 y que habrá "señales muy claras" de crecimiento el próximo año.

El economista agradeció al presidente Macri por la oportunidad y reconoció que su salida se debió a que "había diferencias muy concretas en el funcionamiento del equipo".

Si bien sigue "muy comprometido" con el proyecto de Cambiemos, Prat-Gay se tomará un tiempo para definir cuál será su aporte futuro dentro del oficialismo.