Sacerdote Cristián Precht termina condena canónica de cinco años dictada por abusos

Cristian Precht

Hoy se cumple el castigo ordenado por el Vaticano y determinado por el arzobispo de Santiago.




"Conductas abusivas con menores y mayores de edad". Esa fue una de las razones que el jueves 6 de diciembre de 2012 argumentó, a través de un comunicado y conferencia de prensa, el Arzobispado de Santiago, para justificar la condena canónica que se le aplicaba al sacerdote Cristián Precht.

Después de una investigación eclesiástica, iniciada en junio de ese año, los antecedentes fueron enviados a Roma, a la Congregación para la Doctrina de la Fe, que finalmente estableció la existencia de abusos del emblemático ex Vicario de la Solidaridad. En su dictamen, la instancia vaticana ratificó "las mencionadas conductas abusivas" y entregó su "conformidad con la petición de derogar la prescripción (ya habían transcurrido más de 20 años desde que las víctimas cumplieron 18), en atención a la gravedad de los hechos denunciados".

Tras eso, el Arzobispo de Santiago, Cardenal Ricardo Ezzati, estableció mediante un decreto la sanción: prohibición absoluta de que el religioso ejerciera de manera pública el ministerio sacerdotal por un lapso de cinco años, a contar del día en que se le comunicó la resolución, el 5 de diciembre.

"El presbítero Cristián Precht fijará la residencia de común acuerdo con la autoridad eclesiástica; deberá pedir autorización para ausentarse del país y llevará una vida de oración y penitencia", se agregó.

Hoy se cumple la sanción y el religioso, quien, entre otras cosas, no podía administrar el sacramento de la confesión y la dirección espiritual, ya está autorizado para volver a hacerlo.

Fuentes de la Iglesia de Santiago dijeron que no hay ningún trámite formal ni documento específico para dar por terminada la condena. Simplemente, se la asume cumplida. Sin embargo, también se aclaró que el presbítero, en razón de su edad (77) y estado de salud, entre otros motivos, no recibiría encargos pastorales.

En el entorno del sacerdote se comentó que este día de hoy se vivirá "en paz y con tranquilidad". Y que lentamente se evaluarán los pasos a seguir.

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