Cámara reduce en $2 millones asignaciones para financiar nuevos diputados
Montos destinados a solventar gastos en personal, asesorías externas, traslados y arriendo de oficinas, entre otros, suman en la actualidad unos $ 14 millones.
Durante todo febrero, mientras los parlamentarios se encuentran de vacaciones en el marco del receso legislativo, funcionarios de la Cámara de Diputados han trabajado intensamente en la remodelación del Congreso en Valparaíso.
El aumento desde 120 a 155 diputados a contar del 11 de marzo -producto de los cambios al sistema binominal-, ha obligado a una serie de arreglos, que van desde la instalación de escaños adicionales en el hemiciclo hasta la construcción de nuevas oficinas.
Pero el incremento en el número de diputados no solo significará cambios de infraestructura para los futuros legisladores.
Los diputados que asuman en marzo verán también una modificación en sus asignaciones parlamentarias, las que serán rebajadas en dos millones de pesos para poder financiar los gastos que acarrea el aumento de legisladores.
La asignación actual de los diputados suma unos 14 millones de pesos mensuales y está destinada a financiar la contratación de personal, asesorías externas y gastos operacionales como traslados, telefonía y arriendo de las oficinas distritales.
El recorte en las asignaciones ya ha comenzado a ser comunicado a los legisladores por parte del secretario general de la Cámara, Miguel Landeros, quien -según algunos parlamentarios contactados- ha explicado que parte del ajuste se concentrará en los montos destinados a contratar asesorías.
Según fuentes de la corporación, de acuerdo a la planificación diseñada al alero de la actual mesa que preside el diputado Fidel Espinoza (PS), con el descuento de $ 2 millones en las asignaciones, más el ahorro que se ha venido generando en áreas como viáticos, pasajes aéreos y recortes en gastos de alimentación, además de recursos internos, se lograría el financiamiento de las nuevas autoridades.
En tanto, parte de la dieta de los diputados, que equivale al sueldo de un ministro, es decir, unos $9.121.000 millones brutos aproximadamente, será solventada con recursos del presupuesto que antes recaían en el Senado, cámara que también incrementará su número de legisladores, pasando de 38 a 43 integrantes en marzo, para llegar a 50 en 2022.
La Cámara de Diputados ha debido realizar ajustes presupuestarios y lo que algunos denominan un plan de austeridad, considerando que el proyecto del gobierno de Michelle Bachelet para modificar el sistema electoral determinó que el Estado no dispondría de recursos adicionales para financiar el aumento de los legisladores.
De acuerdo a las mismas fuentes, el plan está pensando a largo plazo, si embargo, podría ser modificado por la mesa de la Cámara que reemplace a la de Espinoza.
En ese caso, sin embargo, cualquier cambio a lo que ya está establecido podrá ejecutarse a partir de 2019, ya que respondería a una discusión del presupuesto de ese año que se realiza a fines de 2018.
Las remodelaciones
Los trabajos de remodelación del hemiciclo para recibir a los 155 diputados se iniciaron el 25 de enero, con el retiro de los computadores y la habilitación de nuevos escaños.
Según quienes han monitoreado los trabajos, se incorporó una fila delantera y asientos a los costados de los actuales escaños para acondicionar de mejor manera la sala.
La pantalla en que se visualiza el voto de los diputados, en tanto, había sido adecuada meses antes para ajustarla a las votaciones de los 155 legisladores.
Los trabajos, dicen en la Cámara, han avanzado con más prontitud de la esperada y, según informaron en la corporación, las primeras semanas de marzo los diputados podrán sesionar en Valparaíso. Inicialmente, de hecho, se temía que las primeras sesiones de marzo se tendrían que desarrollar de manera inusual en la sede de Santiago. Por lo mismo, en las sesiones previas a que asuman los nuevos legisladores el 11 de marzo la sala tendrá 35 asientos vacíos.
Según han comentado algunos legisladores, la conformación de la sala dejará en un lado de ella a los parlamentarios de la futura oposición al Presidente Sebastián Piñera y en otro a los del oficialismo. Un criterio, de hecho, que anunció el propio Espinoza en enero.
Además de los arreglos en el hemiciclo y la construcción de oficinas, la configuración del próximo Parlamento ha derivado también en modificaciones en las dependencias de los comités, algunos de los cuales fueron cambiados de lugar.
Sobre las oficinas parlamentarias y comedores de las bancadas aún hay decisiones que tomar, se comenta en la corporación. Históricamente, la norma indica que las bancadas más grandes eligen dependencias.
En ese caso, por ejemplo, la UDI -que eligió 30 diputados-, debiera dejar su tradicional comedor en el primer piso de la Cámara para cederlo a Renovación Nacional, que se transformará en el partido con más representantes: 36 diputados.
Con todo, y pese a que ese ha sido el criterio hasta ahora, será tarea de los comités en marzo repartir el uso de los espacios. Según fuentes de la Cámara, los arreglos de infraestructura fueron costeados con ahorros de la Corporación, por lo cual esos gastos no están considerados en los recursos que se obtendrán de la baja en las asignaciones.
Al igual que la Cámara, durante febrero el Senado también ha trabajado en reparaciones para recibir a los nuevos legisladores (ver fotos).
Con todo, en la Cámara Alta recuerdan que hasta 2006 el hemiciclo estaba preparado par la presencia de más legisladores, considerado que recién ese año se terminó con la figura de los senadores designados.
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