Fue una semana intensa para el ministro de Hacienda, quien tuvo que adelantar su regreso a Teatinos 120 tras las vacaciones para enfrentar la arremetida política de la oposición por el millonario traspaso de recursos desde la Corfo para paliar el déficit presupuestario de 2023. También lo fue para La Moneda, desde donde se diseñó el plan para responder a los cuestionamientos. Si bien los economistas coinciden en que fue una operación técnicamente correcta, apuntan al problema fiscal de fondo que subyace en este episodio y a la debilidad que, en ese sentido, exhibe Mario Marcel debido al incumplimiento de las metas. Asociado con lo mismo, analistas políticos estiman que el objetivo opositor es “rayar la pintura” al manejo del secretario de Estado y de su directora de Presupuestos.