Natalia Piergentili
Ex presidenta del Partido por la Democracia
Para la frustración y desesperanza vendrían bien más dosis de valentía, sinceridad y consecuencia, sacando del foco, como se ha dicho, las soluciones mágicas o inmediatas, las vocerías disruptivas y altisonantes que, no son más que una ilusión pasajera, pero que deja fracturas.
Ser de izquierda tiene un nuevo significado: la búsqueda del equilibrio virtuoso y orientador entre la libertad y la solidaridad como pilar de la sociedad.
No es explicable que, sectores políticos, cuyos simpatizantes y militantes fueron asesinados o torturados por una dictadura, en la actualidad ya sea por ceguera ideológica o por doctrina, no defiendan aquello por lo que algunos de los suyos dieron su vida. Estas paradojas no son aceptables.
Con una competencia centrada más en alianzas electorales que en acuerdos programáticos y con discursos pobres de contenido, seguiremos condenando a la ciudadanía a la falsa creencia que el futuro solo depende de sus esfuerzos, sin reparar en que lo que hagamos en colectivo también impacta y determina la forma en la que vamos a vivir
Esperemos que el Presidente traiga buenas noticias de su gira a Europa mientras, a los que acá tienen megáfonos, los invito a demandar y a construir un política de infraestructura para los desastres en Chile. Les prometo que es mucho más útil que la consigna de “devuélvase Presidente”.
Al parecer, la clase política en Chile no solo está con una anemia aguda, sino que hace todo lo posible para que esto no mejore, llevando la situación a un límite que, en clave política, hace que no sea descabellado pensar en un populista de izquierda o de derecha que termine cantando en el Movistar Arena o gobernando desde otro país vía programas de streaming.