El cáncer oral se manifiesta principalmente en la lengua y el piso de la boca, y sus cifras en Chile se han duplicado en las últimas tres décadas. Sin embargo, muy pocas personas conocen los signos tempranos de esta patología, lo que dificulta el diagnóstico en etapas iniciales.
Se estima que en un 35% a 65% de los casos, previo al establecimiento del cáncer oral, se presentan lesiones bucales de color rojo o blanquecino, y/o úlceras que no desaparecen en el tiempo. Estas lesiones pueden ser identificadas por un odontólogo, quien deriva el caso a un oncólogo. La extirpación quirúrgica de las lesiones tempranas previene considerablemente el desarrollo de cáncer oral, pero no en todos los casos.
En el último tiempo, la ciencia en Chile se ha planteado el desafío de descubrir nuevas estrategias que permitan complementar el tratamiento quirúrgico en etapas tempranas. Investigaciones nacionales han descubierto la utilidad de distintos compuestos sintéticos y naturales como ayudas terapéuticas para frenar la evolución del cáncer oral en etapas iniciales. Así también, han destacado la importancia del telediagnóstico de lesiones tempranas y permitido la identificación de moléculas alteradas en la saliva previo al establecimiento de un cáncer oral, entre otras. Estos estudios han tenido repercusiones mundiales sobre la forma de abordar el cáncer oral, orientando los esfuerzos hacia la prevención.
Mientras avanza la ciencia, es fundamental la prevención por parte de la población mediante la moderación del hábito tabáquico y alcohólico, ya que ambos factores en conjunto explican la aparición de cáncer oral en el 90% de los casos. Dado el alto estándar internacional con el que han sido reconocidas las investigaciones nacionales en esta materia, esperamos que los Ministerios de Ciencia y de Salud puedan elaborar medidas conjuntas que permitan seguir fomentando el desarrollo científico para el diagnóstico y tratamiento de cáncer oral en etapas tempranas.