Desde que se inventó el auto que se ha intentado ir cada vez más fuerte. De ahí que hoy existan autos rápidos, muy rápidos y verdaderos cohetes terrestres, que podrían ridiculizar la velocidad de cualquier deportivo, superando fácilmente la barrera de los 400 km/h. Bugatti y Koenigsegg hacen gala de ello, buscando quedarse con el título del auto de producción en serie más rápido del mundo.
Lorena Gallardo Gil
31 jul 2020 01:19 PM