El mayor premio de la industria del cómic lleva su nombre: Will Eisner (Nueva York 1917 - Florida, 2005), uno de los más destacados exponentes del género, ayer habría cumplido 100 años. Pintor, ilustrador, guionista y editor. A Eisner muchos lo señalan como el autor que popularizó el género de la novela gráfica gracias a su libro más celebrado, Contrato con Dios (1978).

En aquel volumen, el autor de The Spirit (1940) abordaría en ilustraciones y viñetas algo que se había propuesto años antes: escribir un cómic para adultos, que tratara temas con más profundidad y ocupara el mismo lugar que las obras literarias en los estantes de las librerías, y no en la sección adolescente dedicada a las historietas de superhéroes, género que él mismo desarrolló en la revista neoyorquina WOW What a Magazine!

Nacido en Brooklyn en una familia de origen judío, Eisner tenía por entonces 60 años. Ya había publicado con éxito la saga The Spirit, el detective enmascarado, inspirado en la novela negra. Llevaba décadas alejado del cómic, pero cumplió airoso su objetivo. En Contrato con Dios, que será llevada al cine por el director de Luz de Luna, Barry Jenkins, aborda la historia de un padre que debe sepultar a su hija, en una Nueva York abatida por la Gran Depresión de 1929. La novela será reeditada en España por el sello Norma, en tanto el Museo del Cómic de Anguelma en Francia y el Museo de la Ilustración en Nueva York exhibirán la Exposición del Centenario dedicada al autor.