3 libros para leer en medio de una crisis vocacional

El guardián entre el centeno, de Jerome David Salinger

Publicada originalmente en 1951, la novela sumerge al lector en el mundo de una existencia extremadamente solitaria, decepcionada de todas las cosas que le suceden. Se trata de Holden Caulfield, un joven neoyorquino de 16 años que acaba de ser expulsado de su colegio. El guardián entre el centeno, que está narrada en la voz de Holden, quien se ha caracterizado por tener malos resultados en sus estudios (ya había sido expulsado de otros lados) y quien cree que la mayoría de la gente es "falsa", habla con demasiada claridad sobre la codicia, los vicios y la sexualidad, dando forma a una novela de formación que ha inspirado a miles de lectores.

Hacia rutas salvajes, de Jon Krakauer

En agosto de 1992, un grupo de cazadores encontró a un joven muerto y en descomposición en una zona agreste de Alaska. Dos años antes, Christopher Johnson McCandless, hijo de una familia adinerada y protagonista del relato, todavía estaba vivo cuando se graduó de la Universidad Emory de Atlanta. Entonces se borró del mapa: cambió su nombre por Alexander Supertramp, donó sus ahorros a una organización comunitaria y abandonó sus pertenencias y a su familia para vagar por Norteamérica en busca de experiencias nuevas y trascendentes. Literalmente con lo puesto. El periodista Jon Krakauer se interesó en la historia y decidió investigar qué había detrás de la firme convicción de un joven lector de León Tolstoi, el novelista ruso que había renunciado a una vida de riqueza y privilegios para vagar entre indigentes.

Los detectives salvajes, de Roberto Bolaño

La instalación definitiva de Bolaño en la literatura chilena aconteció en 1998, con la publicación de Los detectives salvajes. Protagonizada por Arturo Belano y sus amigos, la novela hizo de los jóvenes poetas desaforados y ansiosos unos personajes deseables y fáciles de imaginar. Son muchachos que recurren año a año, como un peregrinaje, a los libros de Baudelaire, Salinger, Kerouac y Artaud para iniciarse en otras sintonías con la realidad. Es una lectura de iniciación por antonomasia, que trata de temas relacionados con los irreverentes. Lo suyo es la aventura de la poesía, la visión romántica de que la literatura es una forma de vida.