Una figura controversial, que divide hasta el día de hoy a Chile. Un hombre que marcó la historia nacional desde que decidió participar en el Golpe de Estado de 1973 y liderar un régimen militar que se extendió por 17 años en el país. Augusto Pinochet es un nombre que genera sentimientos extremos, que no deja indiferente ni a detractores ni a seguidores.

"Es un personaje que con los años tendrá un carácter mítico, como lo ha sido La Quintrala o Diego Portales. Entonces decidimos hacer algo similar al Ciudadano Kane, de Orson Welles o Ricardo III, de Shakespeare", dice el ilustrador Félix Vega (46), quien junto al escritor Francisco Ortega (43) se propusieron hacer una novela gráfica sobre Pinochet. Se llamará Augusto y saldrá publicada por editorial Planeta en 2018.

"Con Félix queríamos hacer algo con la historia de Chile, y nos daba vuelta la figura de Pinochet y luego nos preguntamos: ¿Qué convierte a una persona en un monstruo? Y entre conversaciones salió esta historia que es muy rara, porque es una biografía literaria", señala Ortega, autor de exitosas novelas gráficas como Mocha Dick.

El ejemplar que aún está en preparación toma como referencia literatura de investigación, como también fantasía propia del mundo del cómics. "Están presentes todos los datos biográficos de Pinochet, pero está contada como un relato que a ratos es una novela de terror", agrega Ortega de un proyecto que adelantarán con Vega, en enero próximo, en el Festival francés de Angoulême, uno de los encuentros del cómics más grandes de Europa.

The Wall

Nacido en 1915, formado en el Colegio Sagrados Corazones de Valparaíso, Augusto Pinochet Ugarte ingresó a la Escuela Militar tras ser rechazado en dos ocasiones. De alférez en Concepción y teniente en San Bernardo, fue designado comandante en jefe del Ejército el 23 de agosto de 1973. Un mes después de esa fecha Pinochet marcó su destino para siempre y la de millones de chilenos. Caricaturizado como un gorila, un tirano, el demonio, un anciano decrépito en silla de ruedas, en medios como la revista gala Charlie Hebdo, esta vez la novela Augusto mostrará a un complejo ser humano enfrentado a un juicio final.

"Abordamos varios géneros sobre un personaje histórico para poder dimensionarlo. No solo nos interesa mostrar el terror político, también estar en la mente de Pinochet y desde ahí narrar", comenta Vega, quien en las próximas semanas expondrá los originales de su cómic Juan Buscamares, en Galería Plop!.

"Queremos narrar parte de su infancia, juventud y adultez y un final que es el juicio que nunca se le hizo, que es un juicio sobrenatural... Es como The trial, de la parte final de The Wall. Por ejemplo se le aparecerán fantasmas, como el espectro de Bernardo O'Higgins y Portales. También el Tío Sam, su amigo imaginario desde niño, quien termina traicionándolo", comenta Ortega sobre un libro que, dice, molestará tanto a partidarios como detractores. "Los primeros se molestarán porque hicimos de Pinochet una historieta, que ve a los comunistas como hombre con cabeza de ratón. Y los segundos dirán que estamos justificando sus obsesiones de tirano, porque efectivamente Pinochet odiaba desde niño a las ratas", agrega Ortega, quien está seleccionando episodios de la vida de Pinochet, fallecido a los 91 años, en 2006.

Hay por lo menos cuatro personajes que se encontrarán con el protagonista en Augusto. Uno es José Toribio Merino, comandante en jefe de la Armada en 1973; el animador Mario Kreutzberger, Don Francisco; el actor estadounidense Christopher Reeve, quien interpretó a Superman y la ex primera ministra bitránica Margaret Thatcher.

"Un conocido asesor de Pinochet, Federico Willoughby, me comentaba que él le tenía miedo a Merino, quien fue el verdadero artífice del golpe y era la voz de mando. Igualmente a Don Francisco, luego de liderar campañas como Chile ayuda a Chile, donde veía la capacidad de convocatoria que tenía el animador", dice Ortega, quien ficcionará una disputa a partir de la visita de Christopher Reeve, en 1987. El actor viajó al país a solidarizar con un grupo de colegas amenazados de muerte. "Desarrollaremos el enfrentamiento de Superman con Pinochet, quien se obsesionó usando capas como el superhéroe", señala.

En las primeras páginas de Augusto el general se encuentra esperando la respuesta del tribunal británico, en Virginia Water, Londres. En Inglaterra está detenido, acusado por su presunta participación en los delitos de genocidio, torturas y desaparición de personas ocurridos en Chile entre 1973 y 1990.

"Queremos construir un Pinochet mitológico. Sacarlo del Pinochet histórico. Es el Darth Vader de nuestro pasado reciente. También tiene algo del personaje de El Quijote, porque este Pinochet del cómic tiene delirios que se repiten, obsesiones con las mujeres y ambiciones literarias que no le resultan", termina Ortega.