Empezaron como muchos artistas jóvenes de esta generación. En 2012, los amigos de secundaria Clemens Rehbein y Philipp Dausch grabaron algunas canciones en su casa y las subieron a Youtube. El número de vistas fue completamente inesperado para el dúo. Sobre todo su canción "Stolen Dance", que después se convertiría en su primer single y en un video que, a cinco años de haber sido estrenado, reúne más de 376 millones de vistas en la plataforma.

Hasta el día de hoy no saben cómo explicar que "Stolen Dance" fuese el tema que los llevó a ser reconocidos mundialmente. Es una canción extremadamente sencilla que mezcla folk y pop y con una melodía fácil de retener. Según Clemens Rehbein, el vocalista, lo más probable es que ese sea el motivo del éxito. La simpleza.

https://www.youtube.com/watch?v=iX-QaNzd-0Y

Tomando en cuenta la respuesta del público en internet, varias discográficas se interesaron por el dúo alemán, pero, manteniendo su sencillez y su fórmula "casera", decidieron firmar con una disquera amiga, Lichtdicht Records, la que se creó solo para lanzar el álbum que reuniría sus ya reconocidos temas.

"Sadnecessary" salió a la venta en 2013 y consolidó la carrera del dúo. Sus 14 canciones tenían las características necesarias para convertirse en hits de esta época: canciones interpretadas en inglés ( confesaron que es muy complicado hacer rimas en alemán), melodías livianas y una actitud relajada en la música y en la estética.

Pero liviano y fácil no son sinónimos. Todo eso que parece al azar en realidad existe gracias a años de preparación. Clemens Rehbein y Philipp Dausch comenzaron a componer a los 13 años. Ambos estudiaron en una escuela avanzada de música donde aprendieron sobre técnica, teoría, a tocar varios instrumentos y fueron parte de un cuarteto de jazz. Además, Dausch estudió producción, lo que les permitió grabar en un principio. Y aunque en general el proceso de hacer una canción se da de forma natural, Clemens Rehbein se demoró más de cuatro años en componer "Stolen Dance".

Milky Chance lanzó su segundo álbum, "Blossom", en 2017. Ahora convertidos en un trío (Antonio Greger se unió con una segunda guitarra y bajo), la banda navega entre el indie rock, el folk y el pop. Y aunque firmaron un contrato con otra disquera y pareciera que están en constante proceso creativo, esa simpleza bien estudiada sigue presente en su música.