Según los datos recopilados por Ruidosa, la red feminista impulsada por Francisca Valenzuela, entre 2016 y 2017 sólo un 10,6% de los números que participaron en festivales latinoamericanos fueron exclusivamente femeninos. Por otro lado, un 78,1% correspondió a músicos hombres o grupos exclusivamente masculinos. Es en base a estas y otras estadísticas que el año pasado nació La Matria, un colectivo local de mujeres que trabajan en la música y que busca visibilizar las problemáticas que éstas enfrentan en la industria. Entre ellas, precisamente, su baja presencia en festivales masivos.
"Nos gustaría un carrete más diverso", dice, a modo de síntesis, Mariel Villagra, cantante y gestora de la iniciativa que se dio a conocer en septiembre pasado con una fonda en Providencia. Ahora, la solista, conocida como Mariel Mariel, apunta más alto y estrena La Matria Fest, evento que la reunirá mañana en el escenario del Club Chocolate con la cantautora Evelyn Cornejo, el grupo de fusión latinoamericana Mákina Kandela, y también Roja y Negro, el proyecto de folclore y boleros que lidera Ana Tijoux.
"Planteamos la Matria como un cambio de enfoque total. La condición para presentarse es que haya mujeres en los roles protagónicos de cada proyecto, pero como le estamos haciendo frente a la exclusión apelamos a la diversidad de géneros y todas son bandas mixtas, aunque impulsadas por mujeres", explica la cantante, que volvió a Chile en 2017 luego de casi una década radicada en México.
Según su diagnóstico, en base a su experiencia en escenarios de la región, " hay una exclusión hacia las mujeres músicas en cuanto a las oportunidades". Y si bien en su caso -al igual que Tijoux- ha podido ser parte del cartel de eventos como Lollapalooza, "por lo general en los festivales una es la única mujer en un camarín lleno de pololas", ejemplifica.
Gina de la Hoz, colombiana radicada en Chile y percusionista de Mákina Kandela, cuenta que en más de una oportunidad se ha sentido discriminada en su ámbito. Por lo mismo, considera importante "dar a conocer proyectos femeninos y sobre todo visibilizar a la mujer chilena".
En ese sentido, Villagra explica que lo suyo se complementa con otras iniciativas de objetivo similar, como Red Muchacha y Ruidosa. Y adelanta que está en conversaciones para hacer ediciones de La Matria en México y Colombia.