Nadie podría negar que David Nesta Marley es, por derecho propio, una estrella de la música y una voz propia dentro del reggae. Pese a que, en el papel, es el heredero natural de Bob Marley y de alguna forma el príncipe de la dinastía real del género, "Ziggy", el hijo mayor del gran ícono que ha tenido la música jamaiquina en su historia, ha sabido forjar su propio camino en la música, sin nunca dormirse en los laureles. Así lo avalan sus ocho premios Grammy y una influyente discografía, tanto con el grupo The Melody Makers -que creó junto a tres de sus diez hermanos- como en solitario.
Pero, al mismo tiempo, el músico de 49 años no ha descuidado el valioso legado de conciencia social de su familia, y en cada paso que dado ha seguido las huellas que dejó su padre, el mismo que a los seis años lo apodó "Ziggy", según cuenta, en referencia al slang jamaiquino para referirse a la colilla de un cigarro de marihuana (y no como indica el mito popular, que dice que el alias nació por su fanatismo por David Bowie y su disco de Ziggy Stardust). Así, por ejemplo, ha asumido una voz de líder político -alguna vez fue embajador para la juventud de Naciones Unidas- y ha ampliado la labor que éste hizo con su sello discográfico, renombrándolo como Tuff Gong Worldwide.
"Más que una influencia directa en mí, creo que mi padre influyó en todo el mundo con su música, con una energía especial que proyectó, y cada uno, incluyéndome, ha ido descubriendo cómo canalizarla", explica el cantautor, que este 2018 se ha enfocado en dos proyectos que sintetizan las dos aguas por las que se ha movido toda su vida: por un lado, la búsqueda de la voz propia, con un nuevo álbum de estudio, el octavo de su discografía en solitario, Rebellion rises. Y por otro, la preparación de una película biográfica sobre su padre, proyecto del que se supo recién en las últimas semanas en la prensa especializada del Hemisferio Norte, y que asoma como la más ambiciosa adaptación en la pantalla de la vida de la leyenda de Kingston.
"El proyecto todavía está en una fase bastante preliminar, entonces no es mucho lo que por ahora se puede adelantar, pero estamos en conversaciones con diferentes personas y cuando llegue el momento anunciaremos al mundo los detalles de este proyecto", comenta el artista, productor del filme que desarrolla junto a Paramount Pictures, y aún sin director ni elenco confirmado.
¿Hay algún aspecto de la vida de Bob Marley que cree que aún no ha sido bien retratado en una película o en los documentales que se han hecho sobre su vida?
Eso es justamente lo que estamos explorando en este momento, es lo que estamos evaluando entre todos los involucrados en el proyecto, para ver qué más se puede contar y cómo contarlo. Con suerte, y así lo creemos, será una buena historia, porque así fue la historia de vida de mi padre, pero por ahora en eso estamos.
Marley, el documental que Kevin Macdonald estrenó en 2012, es bastante completo, revelador incluso. ¿Cree que le faltó algo?
Es un documental muy bueno, porque creo que le permitió a la gente conocer mejor y más profundamente la historia de vida de mi padre, sobre todo a aquellos que quizás no estaban demasiado familiarizados con ella.
En paralelo al filme, el mes pasado Ziggy Marley publicó su octavo álbum como solista, Rebellion rises, cuyo mensaje, desde su título, parece ser más urgente y contingente que nunca.
Años atrás su mensaje se centraba en la revolución personal como eje de los cambios, pero su nuevo álbum plantea otro camino, el de la rebelión. ¿Cómo se conecta este mensaje con el mundo de hoy, con situaciones como la que viven los inmigrantes en Estados Unidos, donde usted reside?
Hay un momento en que la humanidad necesita alzarse en nombre de la misma humanidad, y esa es la rebelión. En eso la música claramente puede jugar un papel importante, ya que el reggae lo que nos dice es que tenemos que levantarnos contra la injusticia por el bien de todos.
El disco comienza con "See dem fake leaders". ¿Estaba pensando en algunos "falsos líderes" en particular cuando compuso ese tema?
En realidad me refiero a todos los líderes del mundo, a todos aquellos que sientan que lideran a la gente, Naciones Unidas, lo que sea. Si estos líderes no son capaces de unir a la humanidad, entonces no mereces ser llamados como tal. Es tiempo que la humanidad reclame por mejores liderazgos, que sean capaces de mostrarnos un camino armonioso, de unificar, porque la violencia tiene al mundo dividido.
¿Cómo ha sido la recepción de este mensaje hasta ahora en el mundo? ¿Tiene planes de venir a presentar el disco a Chile?
He encontrado una recepción bastante positiva. Hay mucha gente que necesita aliento, un estímulo para saber que hay que levantarse por lo que es correcto, por lo que es lo mejor para todos nosotros. Y mi idea es llevar esta gira a a Sudamérica en 2019, y a Chile, que lo adoro. Han pasado ya algunos años desde que fui por última vez y tengo muchas ganas de volver, es un lugar muy lindo, la gente es muy amable.