En la Frontera: preparan primer thriller policial enfocado en el conflicto mapuche

Apuntando a la política, el Ejército y el empresariado, la serie Bala loca se estableció como un ejercicio de género que dio una mirada al Chile actual y sus últimos 40 años. Llegada a Netflix y nominaciones a premios como los Platino y los Peabody sellaron el éxito internacional de una de las ficciones de la televisión más elogiadas del país. A tres años de su debut en Chilevisión, sus creadores proyectan un nuevo título que juega con reglas similares, pero se aleja de Santiago.

En la frontera, como se titula, es una thriller policial que buscará indagar en el conflicto mapuche desde la actualidad, para expandirse con las libertades de la ficción a través de ocho capítulos. Su protagonista es Manuela Valencia (interpretada en el teaser por Manuela Oyarzún), una detective enviada desde Santiago a La Araucanía tras la consternación que produce en el país el crimen de una pareja de ancianos agricultores. A poco llegar, y unida a un detective local más viejo (Daniel Candia), entiende que la tarea es mucho más ardua que lo que imaginaba.

"Es un thriller policial ambientado ahora o en un año más en La Araucanía. Como en Bala loca, un crimen nos permite echar un vistazo temáticamente al conflicto chileno mapuche y las tensiones de los últimos años, en torno al choque cultural, económico y territorial que se está viviendo", explica David Miranda Hardy, el creador de la ficción de 2016 y principal realizador de En la frontera, que vuelve a tener a la cabeza a Filmo Estudios.

A partir de una idea original de Simón Soto –guionista junto a Pablo Toro y Miranda–, la serie se instala como un título de apetito global que antepone los elementos del policial. "Es un proyecto que pretende ser internacional, que se basa en elementos del género fuertes y una conexión emotiva con los personajes, para poder dar luces y complejidad a este tema. En ese sentido, no es una serie de denuncia. Creemos que nuestro rol es más bien ofrecer una mirada más compleja al conflicto entre la nación chilena y la nación mapuche", señala el realizador, que codirigirá la producción junto a Gabriel Díaz (El presidente).

En este primer ciclo pretende incorporar en su mundo desde una coordinadora mapuche (llamada Weichafe, con Gastón Salgado y Daniel Antivilo entre los actores que interpretan en el teaser a sus miembros) a una compañía maderera y un grupo paramilitar de ultraderecha, al que pertenece el hermano mayor de la pareja asesinada (Luis Gnecco). También hay dos jóvenes de origen mapuche que se ven implicados en el caso central: Pedro Maripillán, definido como un genio de la computación, y Sandra Calfumán, activista e hija del detective principal. E imagina una siguiente elección presencial en que por primera vez hay un candidato mapuche, con reales posibilidades de ganar. "Esa es la ventaja de la ficción, nos permite agarrar todas estas aristas de una manera integrada", comenta Miranda.

Aunque el showrunner detalla que han revisado casos como la Operación Huracán, el crimen del matrimonio Luchsinger-Mackay y el asesinato de Matías Catrileo, descarta que se inspire en alguno episodio en particular. "Más bien es una aproximación temática, tratamos de representar las dinámicas de poder entre el mundo mapuche, el mundo político, el mundo policial, la prensa, de una manera que es honesta y realista con lo que está pasando en Chile, pero que no necesariamente se basa en casos específicos que son muy recientes para tener una distancia crítica suficiente", indica.

Miranda, que la próxima semana estará en Pamplona –España– para presentar el proyecto en el encuentro Conecta Fiction, detalla los referentes que tendría En la frontera. "Nos encantan las series del nordic noir, todos estos thrillers policiales que han venido de los países nórdicos que dan miradas a mundos que son desconocidos, pero usan el género como caballo de Troya para engancharnos con los personajes y realidades que son fácilmente comunicables", dice, mencionando también a la serie israelí de Netflix Fauda, que "expande el género policial por la vía de inscribirlo en un conflicto geopolítico más grande. Lo interesante es que el conflicto chileno mapuche nos conecta con el resto del continente, es un conflicto que sucede en todas partes".