La noticia sorprendió a todos pero sus protagonistas venían masticando la idea hace dos años. Según cercanos al proyecto, fue en 2017, ante el éxito continental del espectáculo Séptimo día, que unió la música de Soda Stereo con el Cirque du Soleil, que Charly Alberti y Zeta Bosio se convencieron que la obra del trío seguía siendo capaz de despertar el fervor de las masas, incluso sin la presencia física del líder Gustavo Cerati.
Fue por esos mismos días que los dos sobrevivientes de la banda más exitosa del rock sudamericano comenzaron a pensar en serio la idea de volver a subirse juntos a un escenario y salir de gira para revivir las canciones del grupo, algo que no habían hecho en una década.
"Decíamos que íbamos a volver cada diez años y cuando pasó lo de Gustavo pensamos que iba a ser imposible, pero de alguna forma Soda vino para demostrar que está vivo", decía Bosio en abril de 2017, entusiasmado por la recepción del espectáculo con la compañía canadiense.
La idea fue tomando forma a punta de ensayos a puertas cerradas, a los que se fueron sumando aliados históricos y cercanos al frontman fallecido en 2014, además de la productora trasandina Popart, la misma que montó la última gira de Soda y el show circense. Eso hasta esta semana, en que todo se reveló: primero, el martes, en una reunión con periodistas argentinos, a los que se les pidió firmar un contrato de silencio de 48 horas. Y ayer al mediodía para el resto del mundo.
El regreso de Soda Stereo ocurrirá finalmente en febrero, cuando el baterista y el bajista inicien una gira por estadios de Latinoamérica acompañados de diversas figuras. El recorrido comenzará en Colombia y el 7 de marzo pasará por el Estadio Nacional, para rematar con otras dos fechas en México y Argentina.
Para suplir la ausencia de Cerati, una docena de estrellas invitadas subirá al escenario, desde Adrián Dárgelos (Babasónicos) y Benito Cerati a Chris Martin (Coldplay) y Mon Laferte. Según detallan los encargados del tour, algunos artistas estarán presentes en el escenario y otros a través de pantallas, dependiendo de su agenda. En los próximos días darán a conocer qué invitados estarán en cada fecha.
Si bien aún no se especifica si Chris Martin estará presente en los shows o sólo en imágenes, es conocido el fanatismo de éste por Soda Stereo, grupo que habría conocido a través de su amigo Nacho Figueras, polista argentino. De hecho, en el último show de Coldplay en La Plata, interpretaron De música ligera.
Desde la producción comentan que más nombres se sumarán a la lista de invitados, y aunque en la prensa trasandina deslizan la opción de Beto Cuevas, cercanos al chileno dicen que hasta ahora no ha recibido ninguna invitación formal para el proyecto.
La ausencia presente
Los sobrevivientes de Soda Stereo dicen que la gira es una celebración para agradecer "tantos años de fidelidad de sus fanáticos" y homenajear a Cerati, a seis años de su partida. Pero la ausencia del vocalista fue lo que los hizo dudar e incluso en ocasiones echar marcha atrás la operación retorno, por temor a las aprensiones que ésta podía provocar en sus fans y cercanos.
De hecho, cuando el año pasado comenzaron a circular versiones sobre una posible reunión, el hijo de Cerati, Benito, criticó el plan. "¿No pensaron en quizás no hacer nada?", tuiteó el músico, quien ayer fue finalmente confirmado para el tour.
Para convencerse, fue clave la llegada al proyecto de algunos nombres esenciales de la historia del grupo, como Adrián Taverna, amigos cercano de Cerati y sonidista del trío desde los inicios, y también Richard Coleman -"el cuarto Soda"- y Fabián Quintiero, quienes serán parte de la banda estable de la nueva gira.
Con todo, el espectáculo sí contempla la aparición virtual de Cerati, a través de las pantallas en ciertos segmentos del show. "Gustavo es una ausencia presente. Él decía que por más que lo intentemos nunca dejaremos de ser Soda. Y así parece ser. Lo somos, ustedes y nosotros. No somos el uno sin el otro. No somos Soda sin él. Podemos evocarlo, invocarlo", escribieron Bosio y Alberti ayer en un comunicado.
Las reacciones fueron inmediatas y diversas. Mientras algunos cercanos a Cerati critican la iniciativa (ver nota secundaria), otros la celebran. "Me parece que tienen todo el derecho a hacerlo y la gente va a hacer una fiesta", dice a Culto Óscar Sayavedra, mánager de Soda Stereo entre 1985 y 1989. "Hay tanta banda tributo dando vuelta que tener a dos tercios de Soda más todos esos invitados da la impresión que va a ser una fiesta para una última vez".
Joaquín Vismara, uno de los periodistas argentinos que estuvo en la reunión del martes, complementa: "Que esto sea algo acotado y no se prolongue me da la pauta que no está pensado necesariamente para convertirse en una máquina de lucrar".
Y es que los sobrevivientes de Soda Stereo aseguran que esta "nueva última vez" del grupo, pase lo que pase, no se extenderá más allá de abril de 2020.