"Vicente Huidobro es un poeta insólito, completo y genial", decía hace unos años Andrés Calamaro. Entrevistado por Culto, el músico argentino añadió que: "entre Nicanor Parra y Vicente Huidobro se encuentra la poesía chilena. Y el mundo entero".
https://culto.latercera.com/2017/12/02/la-ruta-vicente-huidobro-en-paris/
"Su biografía es interesante en sí misma y es un gran punto de partida para conocerlo, aunque para mí sin duda lo más importante es su poesía", añade la ilustradora chilena Luisa Rivera, autora responsable del homenaje del gigante Google al poeta Vicente Huidobro en el aniversario número 127 de tu natalicio.
"Él inició el Creacionismo —continúa—, un movimiento literario que 'hace real lo que no existe', tal como señala en el manifiesto. Es por eso que sus poemas están llenos de imágenes, y conocerlo desde esa parte creativa e interna me parece muy estimulante".
Nacido el 10 de enero de 1893 en Santiago, y figura central del panteón de la poesía chilena, donde por cierto es una de sus cumbres, Vicente Huidobro recibió durante todo 2019 un promedio de 250 búsquedas diarias relacionadas con su nombre o el título de Altazor, su obra cumbre publicada en 1931, según datos de Google Trends.
[caption id="attachment_113509" align="alignnone" width="1007"]
Vicente Huidobro.[/caption]
Rivera, que ilustró las nuevas ediciones de Cien años de soledad y El amor en los tiempos del cólera, de Gabriel García Márquez, cuenta que Huidobro es una gran fuente de inspiración para su trabajo porque "sus poemas son muy visuales".
Cuenta que crear el doodle, que pintó con la técnica de acuarela sobre papel, "fue un bello desafío, porque la idea que desarrollamos con Google fue mostrar el universo de Huidobro, más que quedarnos en su biografía". Por eso la pieza muestra elementos "que para mí son valiosos en su poesía, tratando de acercar a las personas a ese mundo creativo".
[caption id="attachment_113510" align="alignnone" width="5000"]
El doodle de Vicente Huidibro.[/caption]
"Que el verso sea como una llave", escribe Huidobro en su poema "Arte poética", de El espejo de agua (1916), notorio en el doodle. "Aparece la llave haciendo referencia a ese verso —dice Luisa Rivera—. Quise traer los otros elementos porque se repiten en distintos poemas. Son como pilares en distintas épocas o a lo largo de toda su poesía (como lo sideral)".
Según la ilustradora, "en el caso del pájaro rescato una parte del manifiesto El Creacionismo, cuando señala lo siguiente: 'Cuando escribo: 'El pájaro anida en el arco iris', os presento un hecho nuevo, algo que jamás habéis visto, que jamás veréis, y que sin embargo os gustaría mucho ver'. Por eso la idea del pájaro y la forma del arcoiris en el fondo. Sin embargo, el pájaro aparece de múltiples maneras en su poesía, como este verso en Altazor: 'Y al fondo de ti misma recuerdas que eras tú / El pájaro de antaño en la clave del poeta'. Lo mismo con el ojo, es un elemento que repite, por ejemplo: 'Monumento al mar': 'He ahí el mar quebrado de repente/ Para que el ojo vea el comienzo del mundo'. 'Altazor, Canto I': 'En tanto me siento al borde de mis ojos/ Para asistir a la entrada de las imágenes'. La luna, el cielo, la noche y todo lo sideral son un pilar que se repite a lo largo de los años, pero dentro de sus últimos poemas está 'El pasajero de su destino': 'Invade el terreno sideral sin vacilar/ Invade los países del loco que te desprecia y te mira/ con la parte inferior de su alma/ Proclama tu importancia a la tribu sometida que empieza a aparecer en el fondo del cielo'. La ventana es una forma de abrir ese universo sideral, más que algo de un poema específico".
https://culto.latercera.com/2018/12/11/cien-anos-poemas-articos-la-obra-huidobro-se-reinvento/
Huidobro elemental
Desde la Fundación del escritor señalan que el homenaje de Google es un merecido reconocimiento. "Hoy, Huidobro tiene un lugar en la narración del arte moderno en París, Europa y en Latinoamérica, y muchos lo consideran el representante más significativo de la modernidad en el arte y en la vida", explica el presidente Vicente García-Huidobro. "La reedición en más de 40 países de sus obras Poemas árticos, Horizon carré, Ecuatorial, Tour Eiffel y Hallali, muestran su enorme y sostenida vigencia", añade.
Editor de Alquimia y poeta, Guido Arroyo explica que la obra de Vicente Huidobro "es un hito crucial dentro de la poesía chilena. Sus primeros giros experimentales, parecen salidos de un mundo referencial venido de otra época. La tragedia histórica como materia del paracaídas Altazor (1931); la modernidad y sus tensiones en los memorables Poemas Árticos, resultan un shock para el lector anclado en la tardía modernidad de la época", puntualiza.
[caption id="attachment_113514" align="alignnone" width="300"]
Poemas árticos.[/caption]
"Sin embargo —aclara— me gusta pensar que en el anverso del joven aristócrata liberal, del avant-garde aspirante a presidente, se halla la mejor entrada a su obra. Porque es en el fin de su vitalidad, fuera de los focos hollywoodenses que conoció y en una escena literaria chilena donde casi nadie lo tomaba en cuenta -salvo algunos miembros de La Mandrágora-, es cuando escribe sus libros más cruciales: El ciudadano del olvido (1941) y sus Últimos poemas (1948). Yo partiría a leerlo desde allí. Desde sus contradicciones. Tal como él sugería: 'Soy inconsecuente a cada uno de mis actos, porque soy consecuente a cada uno de ellos'", sugiere.
Valeria de los Ríos, escritora y académica de la Universidad Católica, piensa que "como buen vanguardista, a Huidobro le gustaba estar siempre en la primera línea. Por eso experimentó con la poesía y con otros medios como la pintura y el cine. Fue candidato presidencial y tuvo romances escandalosos que le aseguraron las portadas de los medios".
"Pienso que su mayor aporte a la poesía fue justamente su apertura hacia otros medios —asegura—, que le permitieron expandir la noción misma de poesía. Pienso en los poemas pintados, en los Caligramas y en su relación con el cine en Cagliostro, por nombrar solo algunos ejemplos".
"Para comenzar a leerlo —recomienda la académica—, sugiero su 'Arte poética' de Espejo de agua (1916), porque es un poema que encierra todo su pensamiento sobre la poesía, que desarrollará después en sus manifiestos. Para los lectores más jóvenes recomiendo también Mío Cid campeador, una novela de aventuras llena de humor que actualiza el poema del Cid. Huidobro pensó que la historia podría haber sido llevada al cine e incluso visualizó que su protagonista podría haber sido el famosísimo actor de cine mudo, sir Douglas Fairbanks", agrega.
[caption id="attachment_113515" align="alignnone" width="300"]
Últimos poemas.[/caption]
Diego Zúñiga, escritor y editor del sello Montacerdos, dice: "Más allá de la monumentalidad de Altazor (1931), creo que Últimos poemas es un libro que el paso del tiempo le ha hecho muy bien. Hay algo en ese Huidobro más confesional que lo vuelve urgente, cercano. Quizás ya despojado de todo artificio, lo único que queda es la belleza y la muerte, 'la muerte que no puede vivir sin nosotros', como anota en el poema que cierra el libro", recomienda.
Macarena Urzúa, poeta y académica de la Universidad Finis Terrae, añade que Huidobro "es quizás el primer poeta cosmopolita hispanoamericano que está a la par de las vanguardias francesas y europeas, después de Darío. Huidobro rompe con ese modernismo. También contribuyó enormemente a renovar la poesía chilena cuando vuelve por primera vez a Chile desde Europa en 1925, trayendo libros y revistas de vanguardia que gracias a él circulan entre poetas y artistas jóvenes. Acá colabora con revistas locales de jóvenes y luego publica las propias Vital y Total".
[caption id="attachment_113516" align="alignnone" width="300"]
Altazor.[/caption]
"Es fundamental Altazor, donde adquiere madurez poética y es una cumbre de poesía de vanguardia y conceptual. Algo que ya se vislumbra en El espejo de agua de 1916, Horizon carré (1917) y Ecuatorial (1918)", agrega.
Para el crítico literario y periodista de La Tercera, Javier García, "Huidobro es sinónimo de juventud: su poesía es juventud, sus versos son reflejo de juventud. Su obra es lúdica, por eso Nicanor Parra enganchó tanto con él. Recuerda el discurso que le escribió, es puro juego y genialidad. Sus libros más potentes son El espejo de agua, Temblor de cielo, el emblemático Altazor, y ya textos más reflexivos como Últimos poemas. Pero uno lee sus entrevistas y es de una lucidez feroz, tremenda, y sus manifiestos también. Son pura creación y jovialidad".
https://culto.latercera.com/2018/09/05/los-nuevos-horizontes-vicente-huidobro/