Los cimientos del cine francés se tambalean a escasos días de la ceremonia de los César. La dirección de la Academia del Cine que los otorga ha anunciado su "dimisión colectiva", apenas unos días después de que cientos de actores y escritores criticaran duramente a la institución del cine francés por una "opacidad" y falta de paridad en sus filas.
"Para honrar a aquellas y aquellos que han hecho el cine en 2019, para recuperar la serenidad y hacer que la fiesta del cine siga siendo una fiesta, el Consejo de Administración para la Promoción del Cine (la Academia de las Artes y Técnicas del Cine) ha tomado la decisión unánime de dimitir", ha señalado la Academia en un escueto comunicado. Esta decisión debería "permitir proceder a la renovación completa de la dirección", agrega la nota oficial.
El anuncio se produce a solo 15 días de la celebración de la gala de los César, los Oscar del cine francés, el próximo 28 de febrero, una ceremonia que ya estaba amenazada por las protestas de grupos feministas que han criticado duramente la decisión de la Academia de presentar 12 nominaciones para El oficial y el espía, la última película de Roman Polanski, pese a nuevas acusaciones de violación contra el director franco-polaco. A estas amenazas se unieron las duras críticas en una tribuna publicada por Le Monde donde 200 actores y realizadores reclaman una "reforma en profundidad" de la gobernanza de la Academia, a la que acusan de falta de claridad en sus cuentas y procederes y de una falta absoluta de paridad en todos sus niveles. La gota que colmó el vaso fue la decisión de la Academia de vetar a dos prominentes mujeres, la escritora y realizadora Virginie Despentes y la directora Claire Denis, como "madrinas" de la tradicional Cena de las Revelaciones que celebra antes de la ceremonia anual del cine francés a los jóvenes actores y actrices revelación que aspiran a uno de los ansiados galardones de los Oscar galos.
Visto que el llamamiento a la "calma" emitido por la Academia tras la tribuna y que las promesas de incrementar progresiva pero sustancialmente la presencia de mujeres en su seno no han dado resultado, la dirección de la institución francesa ha tomado ahora la decisión más drástica de dimitir al completo.
La duda es si servirá para calmar las protestas que se prevén durante la 45 edición de los Premios César. De hecho, en su comunicado, la Academia deja claro que la Asamblea General que deberá "elegir una nueva dirección" tendrá lugar después de ceremonia de los César y que solo entonces, podrán empezar a implementarse los cambios prometidos.
El presidente de la Academia, Alain Terzian, ha asegurado que ya se ha puesto a trabajar para lograr "una revolución cultural para conseguir la paridad" en la institución. Actualmente, solo ocho de los 47 miembros de la Asamblea General de la institución son mujeres. La falta de mujeres es generalizada en la Academia, cuyos miembros -encargados de nominar y votar las mejores películas del año- son abrumadoramente (65%) hombres.