“Un misil en mi placard” es la canción que da puntapié inicial a la sesión MTV Unplugged de Soda Stereo. El trío argentino fue a los estudios donde grabaron anteriormente artistas como Nirvana, David Bowie, Los Fabulosos Cadillacs y Los Tres; como cierre de una gira que los tenía presentando Sueño Stereo por el mundo, justamente el disco que protagonizaría su sesión desenchufada.

Era 1996, los de “De Musica ligera” gozaban del éxito arrasador que tuvo Canción Animal, pero en simultáneo, vivían los conflictos propios de una banda que -inevitablemente- dejaría de ser tal. Claro que en ese entonces, con la gira Sueño Stereo, la grabación del video de “Zoom” -su segundo corte promocional- y el compromiso con MTV; el final aún era una nebulosa de incertidumbre.

La sesión MTV Unplugged de Soda Stereo está catalogada entre las 10 mejores según la revista Rolling Stone. El íntimo recital de poco más de una hora de extensión, fue lanzado como CD unos seis meses después de su grabación, y también como vinilo. Este último considerado una rareza dado que es de prensado europeo y no se crearon más de 200 copias.

El vinilo de Comfort y música para volar, era una suerte de tesoro a los que pocos tuvieron acceso, pero eso está por cambiar.

A comienzos de esta semana, el ingeniero de sonido Eduardo Bergallo -quien trabajó con Soda Stereo en todas sus giras entre 1990 y 1997-, publicó un video en su cuenta personal de Instagram que lo muestra mezclando los audios originales de aquella sesión para MTV.

“Finalmente Sony va a sacar el vinilo del MTV de Soda. Acá estamos”, escribió junto al registro de “Terapia de amor intensiva”, canción que no fue publicada en Comfort y música para volar. Según dijo el sonidista al sitio FlacoStereo, el disco tendrá el concierto completo -los 13 temas que tocaron- y será doble.

Si bien Sony no ha confirmado la fecha de lanzamiento -ni se ha referido al respecto- Bergallo publicó dos videos más en Instagram. Uno correspondiente a “Disco Eterno” con la descripción de video “Un adelantado Gus”, y otro en el que se extiende un poco más en torno a los recuerdos de aquella grabación.

“Bueno, muchos saben que Gustavo era un perfeccionista, y durante la grabación del Unplugged allá en Miami, los tiempos son bastante acotados porque hay bastante gente de distintos gremios trabajando”, comenzó el relato de Bergallo.

“Cuando se terminó de tocar todo el show, me preguntaron cómo había escuchado las grabaciones y dije que bueno, me parecía que ‘Disco Eterno’ y otra más la podían repetir. A Gustavo, como buen perfeccionista, no le gustó nada, y cuando terminó el show, cuando termina de tocarla…”, continuó el sonidista, quien a continuación reprodujo un audio en su consola.

“Eduardo, ¿Está bien para el disco?”, se escucha la voz de Cerati tras los aplausos del público.

Según detalló Bergallo, la grabación del show fue “rápida y de corrido”, y solo tuvieron que repetir dos canciones: “Disco Eterno” y “Ella usó mi cabeza como un revólver” -que según sus apuntes, podían mejorarse-.

“El mastering para esta edición en vinilo lo estoy haciendo desde las mezclas originales de 1996 en Chile, y las de 2007 en Revólver, todas aprobadas por Soda Stereo en sus respectivos momentos”, concluyó Eduardo Bergallo a través de Instagram.

La grabación de un disco impensado

Gustavo Cerati, Zeta Bosio y Charly Alberti, estaban ensayando para sus conciertos en el Gran Rex cuando Daniel Kon -quien fuera mánager de Soda Stereo- les comentó que MTV estaba interesado en que participaran de las sesiones Unplugged.

Tenían bastante en agenda: recién comenzaban la gira de Sueño Stereo, debían idear y programar el rodaje del segundo corte promocional del disco -"Zoom" y, de aceptar la oferta de MTV, debían sumar al itinerario el ensayar nuevas versiones de sus canciones y hacer un trabajo de curatoría que no tenían contemplado.

“Justo antes de ponernos a pensar en el video apareció algo que complicó (todavía más) la agitada agenda del grupo”, recuerda Héctor ‘Zeta’ Bosio, en su autobiografía Yo conozco ese lugar (2017, Planeta).

“Además de rotar sin parar el primer clip de Sueño Stereo (‘Ella usó mi cabeza como un revólver’), MTV nos propuso hacer un concierto Unplugged en el que tendríamos que rescatar canciones de todas la épocas para reversionarlas de un modo más despojado. Era un formato que estaba de moda, con el que se realizaron shows memorables como los de Nirvana, Björk y Charly García, entre muchos otro, que normalmente terminaban siendo publicados en un disco en vivo”, agrega el bajista en su relato.

Bien pudo ser un contratiempo para la vertiginosa rutina de los Soda, pero la visibilidad internacional que aquella oportunidad les daba, fue demasiado tentadora. “No pensábamos hacer este disco. Pero la zanahoria de la gira por los Estados Unidos fue más fuerte”, recoge el libro Cerati en primera persona, de Maitena Aboitiz.

“Tocar donde nunca habíamos tocado, en Nueva York, en Chicago y encima con éxito, fue muy fuerte. Primero habíamos dicho que no íbamos a hacer ningún unplugged. No sabíamos qué iba a pasar en el futuro y ninguno se lo quería preguntar. Y, por primera vez, no lo sabíamos de verdad”, dijo Cerati sobre la corriente de conciencia previa a dar el “Sí” a MTV.

Pero además de los obstáculos propios de una agenda apretada, estaba el tema de los derechos de las canciones. Mientras el MTV Unplugged sería lanzado por BMG, la mayoría de las canciones de Soda Stereo pertenecían a Sony Music. Si bien podían tocarlas en el concierto en vivo, estas no se podían incluir en el álbum resultante.

El trío tanteó la idea de tocar todo Sueño Stereo en el unplugged, pero no le veían mayor sentido. Hasta que BMG llegó a un acuerdo con Sony en el que le pagaría “una enorme suma de dinero” por cada canción que se incluyera en el disco.

“Así que apenas si pudimos incluir un par de nuestros clásicos y no nos quedó más opción que dedicarnos a hacer versiones de las canciones del nuevo disco, con la intención de hacer olvidar las versiones originales”, relata Zeta en su autobiografía.

Fue la posterior fusión entre BMG y Sony que permitió publicar el disco Comfort y música para volar.

“Frente a esa opción tenía dos posibilidades: o hacía algo estrictamente desenchufado, puro, o generaba algo distinto, redimensionado todo. Yo no me banco esos discos que se basan únicamente en versiones de temas. Y nosotros no queríamos limitarnos a meter la canción eléctrica adentro de una caja acústica. Lo que finalmente salió es una mezcla de versión, contraversión y novedades, todo envuelto -lo admito sin culpa- por cierto aire de liviandad, que sin embargo nunca llega a tocar el conformismo”, dijo el vocalista de la banda sobre el proceso creativo para el Unplugged.

Con Tweety González y los hermanos Diego y Pedro Fainguersch en viola y cello, completaron la banda con la que irían de gira por Venezuela, Colombia, Perú, Chile, Ecuador, México, y Estados Unidos, con Aterciopelados de teloneros.

“La gira se desarrolló en armonía y fue tan exitosa como las anteriores. Lo único que nos alteraba los nervios era pensar en el MTV Unplugged, básicamente porque apenas si habíamos podido bocetar los temas improvisando ensayos en los hoteles y se trataba de versiones que nunca habíamos tocado, a excepción de ‘En la ciudad de la furia’, que había formado parte de los conciertos del Gran Rex”, dijo el bajista.

Y es que no querían simplemente hacer la versión acústica de temas a guitarra eléctrica, ni modificar sus canciones sutilmente. Para Cerati, aquello se sentía como una estafa.

“No le podemos dar a la gente únicamente una versión en audio de un recital que ya vieron y van a ver miles de veces. Sería algo parecido a un fiasco, y a mí me daría vergüenza”, dijo Cerati.

“Creo que es un disco diseñado a partir de diferentes situaciones, la primera es el show en vivo. Lo que hicimos en MTV forma las tres cuartas partes del disco. A partir de ahí, fuimos para otros lados e incorporamos canciones que habían quedado rezagadas en la producción de Sueño Stereo y a las que les dimos la forma final en esta última época antes del disco”, registra Cerati en primera persona.

Y es que los siete -de trece- temas propios del MTV Unplugged, fueron complementados con versiones de estudio de “Sonoman”, “Planeador”, “Coral” y “Superstar”.

“Un par de semanas antes de la realización del programa, pedimos que nos permitieran ensayar en Miami durante una cierta cantidad de días, y nos consiguieron una sala impresionante (era enorme y hasta tenía un aro de básquet profesional). Una vez instalados en la ciudad logramos armar un show contundente, en el que incluimos muchas canciones y ganamos seguridad”, agregó Zeta sobre los preparativos.

“El concierto en los estudio MTV se realizó con la mecánica típica de un programa de televisión norteamericano, con un montón de extras mezclados con los fans que aplaudían cuando alguien les decía que lo hicieran y un orden estricto para que todo saliera perfecto”, desclasifica el músico argentino.

“Antes de salir a grabar, pasó a saludarnos por el camarín Andrea Echeverri -de Aterciopelados-. Gustavo le preguntó si se animaba a cantar ‘En la ciudad de la furia’ con él, una idea que la alucinó, y se pusieron a ensayar mientras nos maquillaban”, recuerda de la versión a dúo del hit de Doble Vida.

“Fue una jornada muy relajada, en la que se grababan dos o tres canciones, volvían a maquillarnos y salíamos nuevamente a escena; se repetía varias veces la misma secuencia. Interpretamos una de las mejores performances de la banda en toda su carrera, acabábamos de terminar con la gira y a pesar de los pocos ensayos estábamos sueltos y muy sólidos”, dijo Zeta Bosio resumiendo la experiencia en saldo positivo para la carrera de Soda Stereo.

“¡Más que acústico es un disco cool, de canciones confortables. Te instalás a escucharlo en un lugar de confort, pero pasan cosas que te sacan del terreno de aburguesamiento”, describió Gustavo Cerati según el libro de Maitena Aboitiz.