Irene es una mujer española que viaja de Madrid a Chicago para continuar sus estudios en la universidad. Como parte de su labor académica, repasa trabajos de laboratorio sobre el comportamiento sexual de los ratones, que dan algunas pistas sobre la fidelidad o promiscuidad de los mamíferos dependiendo de su sexo. También, investiga cómo funcionan dichos comportamientos.

Así, Irene inicia un viaje personal en que, de alguna manera, ella misma se convierte en parte de la investigación.

Es el inicio de Cien noches, novela del escritor madrileño, Luisgé Martín, quien se adjudicó la versión 38° del premio Herralde, entre un total de 886 obras presentadas al certamen. El autor recibirá una suma de 18 mil euros —cerca de 21 mil dólares—, otorgados por el prestigioso galardón español.

Cien noches explora las distintas formas de amor y diversos comportamientos sexuales. Profundiza en la lealtad, la infidelidad, los deseos que nadie confiesa, los tabús, las medias verdades y los engaños que envuelven nuestras relaciones sexoafectivas. “Meditación hecha carne sobre el deseo y la imposible fidelidad”, declaró el jurado del certamen, Gonzalo Pontón. “Esta fábula moral con trazas detectivescas y científicas se abre paso, a través del recuento de una vida y sus placeres, hacia un final sorprendente, de innegable aliento poético”.

El jurado también estuvo compuesto por Gonzalo Queipo, Marta Sanz, Juan Pablo Villalobos y Silvia Sesé, actual directora de la editorial Anagrama.

“Es una novela sobre la infidelidad, el deseo, la promiscuidad y la forma que adopta la mentira al expresar ese deseo no siempre sentimental”, ha declarado presencialmente el autor sobre la obra galardonada. Para la novela, Martín le pidió a amigos escritores que le redactaran relatos de infidelidades reales, convirtiendo la obra en un juego metaliterario.

El autor madrileño ya ha publicado una quincena de obras, entre ellas las novelas La dulce ira (1995), La mujer de sombra (2012) y La vida equivocada (201); también libros de relatos como Los oscuros (1989) o El alma del erizo (2002)

Falco finalista

“En la ciudad se pierde la noción de las horas del día, del paso del tiempo. En el campo es imposible”, empieza el narrador de Los llanos, novela del escritor argentino, Federico Falco, quien fue elegido finalista del premio Herralde en esta edición.

El protagonista recorre su rutina en una casa con huerta donde ha decidido aislarse del mundo urbano y de toda su vida, como huyendo de sí mismo. Ahí el tiempo se arrastra hasta casi volverse tangible; él percibe todo a su alrededor: insectos,  ruidos, el olor de la tierra húmeda y todo tipo de detalles.

Federico Falco

Son varios meses los que recorre esta historia, en que el protagonista mantiene apenas algunos breves encuentros con personas del espacio rural. Recuerda su infancia, su llegada a la ciudad como estudiante, el interés por la estructura de las historias y la ruptura de su relación con Ciro, suceso que lo llevó a ese lugar.

Federico Falco ya ha publicado libros, como los relatos de La hora de los monos (2010), Flores nuevas (2014) y Un cementerio perfecto (2016); además de la novela breve Cielos de Córdoba (2011). El escritor argentino expresó su alegría por el reconocimiento recibido a través de su cuenta en Twitter.

Las ganadoras del premio Herralde en las ediciones anteriores fueron la argentina Mariana Enríquez (2019) con Nuestra parte de noche; y en 2018 la española Cristina Morales, con Lectura fácil.