Reseñas de libros: De Oliver Sacks a Arelis Uribe
El libro de ensayos póstumos del neurólogo británico, la primera novela de la autora de Quiltras, un relato en torno al jazz y la orfandad en el Chile de los 80, y el diario de embarazo de una madre feminista, en los libros recomendados de la semana.
Todo en su Sitio, de Oliver Sacks (Anagrama)
Oliver Sacks logró cautivar a miles de lectores con sus libros en torno a la investigación en neurología. Fallecido en 2015 debido a un cáncer, los ensayos reunidos en este libro póstumo mantienen vivo su magnetismo. En el volumen Sacks revisa sus grandes amores, desde la ciencia a los libros y la natación; relata casos clínicos sobre misterios del cerebro, el sueño y las experiencias religiosas, y reflexiona también en torno a la vida y su propia muerte. Ante la crisis climática y social que afecta al mundo, confirma su confianza en la ciencia, y sus palabras parece que resuenan especialmente hoy: “Aunque venero la buena literatura, el arte y la música, me parece que solo la ciencia, ayudada por la decencia humana, el sentido común, la amplitud de miras y la preocupación por los desfavorecidos y los pobres, supone una esperanza para un mundo sumido en el marasmo moral”. Y agrega, aferrado a su fe en la especie humana: “Al enfrentar mi inminente salida del mundo, tengo que creer en esto: que la humanidad y nuestro planeta sobrevivirán, que la vida continuará y que esta no será nuestra hora final”.
Las Heridas, de Arelis Uribe (Planeta)
La historia comienza el 14 de febrero, el Día del Amor, y termina 20 días después, luego de un funeral. En ella hay amor, por cierto, pero también pérdidas: la del padre y la de la relación amorosa más importante de la narradora. Heridas y rupturas que estremecen la vida de Arelis, la protagonista, y activan la memoria. La primera novela de la autora de Quiltras nace de las heridas, y se mueve entre el presente y un pasado sembrado de dolores: la pobreza, la enfermedad, el fracaso familiar, la violencia de las desigualdades sociales y de género. Un pasado donde leemos también el despertar de la rebeldía, el hallazgo de la identidad y de una visión sobre el mundo. “La muerte es la herida que absorbe todas las heridas”, dice la narradora de esta novela breve, honesta, muy bien escrita y armada de poderosas emociones. Novela familiar y de formación, relato generacional, Las heridas amplía el sobresaliente proyecto narrativo de Arelis Uribe.
Chino, de Antonio Ostornol (Ed. de la Lumbre)
Rebelde, en conflicto con su entorno, expulsado de su familia, el protagonista de esta novela encuentra su razón de ser en la música. Ambientada a fines de los años 80, la novela abre en Nueva York, en un café cerca de Washington Square, y se traslada luego a un Chile ensombrecido por la dictadura. En ese ambiente gris y áspero crece el Chino, un chico vivaz y enamorado del saxo y del jazz, preguntándose por su hermano mayor, que escapó de la crueldad de su familia. Internado en un colegio fuera de Santiago, el Chino se enamora de una chica inalcanzable, descubre el sexo y organiza su propia fuga en busca de libertad. A ratos esquemática y con algunos personajes de pocos matices, la novela busca iluminar una época y plantea el arte como una vía de salvación y transformación.
La Mujer Borrador, de Amandine Dhée (Hoja de Lata)
Cuando la escritora feminista francesa Amandine Dhée recibió la noticia, se sintió asaltada por las dudas. “Debería estar inmunizada contra la maternidad”, escribió ante su primer embarazo. “Ante mis compañeras feministas experimento un vago sentimiento de culpabilidad. ¿No habré traicionado el bando de las mujeres libres?”, se pregunta. Suerte de diario de maternidad, en esta autoficción la narradora se enfrenta a los temores, emociones y contradicciones que siente respecto a su embarazo, mientras su cuerpo se transforma y comienza a ser habitado por otro, así como sus esfuerzos por mantener su identidad. “¿Madre yo? Cómo me las voy a arreglar?”, se plantea. Escrito con agilidad y buenas dosis de humor, el libro ofrece una reflexión sobre la maternidad y los estereotipos que persisten en torno a la mujer.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.