El cantante de R&B multiplatino R. Kelly fue sentenciado a 30 años de prisión, tras haber sido condenado por usar su estrellato y riqueza durante décadas con el fin de atraer a mujeres y niñas menores de edad a su órbita para mantener relaciones sexuales.

La sentencia fue impuesta por la jueza de distrito Ann Donnelly en el tribunal federal de Brooklyn.

La jueza Ann Donnelly y R Kelly. Foto: REUTERS/Jane Rosenberg REUTERS/Jane Rosenberg

Kelly, de 55 años, había sido condenado en septiembre tras un juicio de cinco semanas y media que amplió acusaciones al cantante de I believe I can fly desde principios de los 2000.

El artista está entre las personas más prominentes condenadas por conducta sexual indebida desde la aparición del movimiento #MeToo contra los actos indebidos de hombres poderosos.

El miércoles, varias mujeres que testificaron contra Kelly durante el juicio hablaron de cómo les había prometido ser su mentor y ayudarlas a alcanzar el estrellato, sólo para someterlas a un trato sexual degradante y a daños físicos.

Muchas dijeron que los abusos les provocaron problemas de salud mental que persisten.

Kelly en Chicago en marzo de 2019. Foto: REUTERS/Kamil Krzaczynski/File Photo

Por su parte, la defensa del cantante había planteado que su pena no debería haber sido superior a los diez años de prisión, porque tuvo una infancia traumática “que involucró abuso sexual infantil prolongado y severo, pobreza y violencia”.

Kelly ha estado privado de libertad sin derecho a fianza desde 2019. En paralelo, para agosto está fijado el inicio de un nuevo juicio en Chicago, donde enfrenta cargos de pornografía infantil y obstrucción a la justicia.