En medio de acusaciones que lo vinculan a una supuesta secta dedicada al tráfico sexual en Argentina, y tras otras de acoso en años anteriores, fue cancelado el concierto que Plácido Domingo ofrecería en el país, el próximo 16 de octubre en el Movistar Arena.
De acuerdo a la organización, la cancelación se debe a otras razones que guardan relación con “dificultades en la logística de la gira” y agregan que es “una situación que escapa a nuestras manos como productora y lamentamos las complicaciones que esto pueda provocar”.
El tenor atraviesa desde hace años una situación compleja, luego de que más de 10 mujeres realizaron acusaciones de abuso sexual y comportamiento indebido en su contra, lo que incluso llevó a la Ópera de Los Ángeles (donde fue director hasta que dimitió por las denuncias) a realizar una investigación interna. ¿El resultado? En EE.UU. prácticamente se le han cerrado las puertas del circuito.
Días atrás, otras acusaciones lo vincularon a una supuesta red de tráfico sexual recientemente desmantelada y a una investigación con escuchas que reconstruye un presunto encuentro sexual del tenor con una mujer que formaba parte de la “secta”.
Según los fiscales, en la serie de audios obtenidos mediante escuchas telefónicas se concluye un presunto encuentro sexual del intérprete con una mujer que forma parte de la agrupación -a la que se menciona como “Mendy”-, en los que interactúa con el tenor y también con el “Maestro” de la organización, Juan Percowicz.
En los tres audios difundidos se puede escuchar a “Mendy” charlar con tres hombres diferentes: uno es el cantante; el otro es Percowicz, líder de la secta y el tercero no se identifica.
De acuerdo al diario argentino La Nación, a este hombre sin identificar “Mendy” le dice: “Plácido dijo que podía venir a visitarnos, es decir, que va a venir a visitarme. Porque él va a casa en New York y lo recordó ayer”.
En otro de los audios, la mujer habla con el tenor para coordinar un encuentro. Allí, La Nación señala que Domingo le indica cómo debe hacer para evitar ser vista cuando lo vaya a visitar a su habitación de hotel: “Cuando salgamos de la cena venimos separados, lo hacemos así porque mis agentes se van a subir a la habitación cuando yo suba y se van a quedar en el mismo piso”.
Durante su reciente visita a México, el español de 81 años se refirió a estas acusaciones: “Han visto que está todo comprobado que no hay nada, lo que siento mucho es que era un grupo que yo… de amigos, que consideraba músicos, estuvimos en una ocasión, los invité a trabajar, y desgraciadamente no ha sido así, pero bueno, en fin, desde luego que yo no tengo nada que ver en eso”.
“Hombre, me da tristeza cuando has tenido amigos por muchos años y te das cuenta de que te han usado, entonces es así”, remató con relación al tema.