Cinco momentos clave del show de Daddy Yankee en Chile

Lo más probable es que Daddy Yankee repita el inicio con que ha dado el puntapié a sus shows de la gira La última vuelta tour, con que se está despidiendo de los escenarios. Al centro del escenario hay una enorme pantalla, la que muestra una aeronave en tono dorado que aterriza en plena tarima. Desde ahí, vestido de dorado y lentes oscuros aparece el “Big Boss”. “Daba la impresión de que caminaba sobre una de las alas del avión. Y como todo un ‘Campeón’ encendió la mecha de lo que sería una velada de grandes emociones”, reseñó el LA Times respecto del show que ofreció en esa ciudad en julio pasado, en el Kia Forum. De hecho, inicia los shows con Campeón, tema de su último disco, Legendaddy.

“Cada vez que canto esta canción en cualquier parte que voy a dar un concierto, la gente la canta conmigo”, dijo el “Big Boss” en Los Ángeles antes de empezar a cantar su mega éxito Lo que pasó, pasó. En la ciudad de la costa oeste de los Estados Unidos fue entonada por 16 mil almas frenéticas. De hecho, en la primera parada del tramo sudamericano de la gira, el pasado 24 de septiembre en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, fue la sexta canción del setlist en aparecer. Hoy se espera que la cante en el Estadio Nacional, lugar donde inicia sus tres presentaciones, en lo que constituye la segunda estación en Sudamérica.

“Maestro, ponme a esta gente a bailar’, le dijo al DJ en medio de su show de Los Ángeles. En ese momento, en las pantallas gigantes comenzaron a aparecer una serie de músicos invitados -de manera digital- que se unieron al boricua en el show. En el caso de lo ocurrido en Santa Cruz de la Sierra, el antecedente más inmediato, aparecieron Zion y Lennox, con quienes cantó Tu Príncipe y Yo voy. También aparece Ozuna, con quien interpreta Baila, baila, baila, además de Anuel AA, con el que comparte en China, y por supuesto, Bad Bunny, y La Santa. Definitivamente, el show de Daddy Yankee tiene un matiz bastante revisionista y de una mirada retrospectiva.

Ya en el bis, que en rigor, es más la segunda parte del recital que una coda (16 canciones, de 36 totales), un momento estelar es cuando Daddy Yankee se une digitalmente a otro artista, Luis Fonsi, con que el cantan Despacito, el tema que acumula 1.450 millones de reproducciones en Spotify y 7 billones en YouTube.

En ese momento, el Big Boss aprovecha de entonar un discurso pro latino, resaltando el orgullo por haber hecho global un sonido que nació gracias a él, y que en estos tiempos tiene tomadas las playlists de todo el mundo. en ese momento, y en línea con la mirada retrospectiva del show, el Big Boss señala: “Así como ustedes escucharon ese medley de canciones que salieron de los 90, de la raíz, de los dos miles, la canción que viene a continuación fue un fenómeno en el mundo y yo dije pues ‘mi misión está cumplida, estuve en la creación, en la fundación desde cero, cuando no existía nada, creando un movimiento para todos ustedes, para los nuevos talentos, DJ, bailarines, para todo el mundo. En los 2000 salió una canción que prendió el mundo y puso este movimiento mundial. Y luego del 2010 al 2020 esta canción, que es la ‘Canción de la Decada’, yo dije ‘ya mi misión está cumplida, estuve en la creación, en la conquista y en el ciclo final de la música latina’. Y para los que no creyeran en los latinos, tuvieran que creer como quiera. Así que cánten conmigo este tema a nivel mundial... nos fuimos”. Y ese es el pie para que el respetable se venga abajo cantando el hit.

“¡Óyeme!, ahora sí que sí graba esto”; y sacando su propio teléfono celular, Daddy Yankee se puso a registrar el momento. Fue lo que dijo en Santa Cruz de la Sierra minutos antes de entonar, según dice, “la canción que cambió la historia para siempre”. Ahí se lanza con Gasolina, el incombustible single de 2004 y donde hace un juego de pregunta/respuesta con el público.

El puertorriqueño dice: “A ella le gusta la gasolina”, y el respetable contesta fervoroso: “¡Dame más gasolina!”, mientras él avanza por el escenario rodeado por sus 16 bailarines entre hombres y mujeres. Esta es la canción con que cierra su presentación, como lo ha hecho en toda la gira, que ya lo ha llevado a España, México, Estados Unidos y Canadá. No podía ser de otra manera, incluso, le añade fuegos artificiales después de que el tema finaliza con el icónico mantra “Da-ddy-Yan-Kee”. Ahí, brevemente el cantante le recuerda a la gente que se está despidiendo, y se marcha. Para siempre.