A menos de un mes de que el 2022 llegue a su fin, la época de recuentos y listas está oficialmente instalada, y más allá de si Los anillos de poder y La casa del dragón merecen o no un lugar entre lo mejor del año, sin duda tienen asegurado su puesto entre las series más exitosas y comentadas, cada una con su versión de la misma fórmula: llevar al espectador de regreso a un universo conocido, con grandes producciones, batallas y elementos de fantasía.

Ese el mismo recetario que Disney+ ahora saca para, quizás, obtener su último hit del año, con una base menos espectacular y adorada que las entregadas por Tolkien y Martin, pero sin duda logrando el primer check de apelar a la nostalgia.

Willow retoma una historia estrenada en el cine en 1988. La película original narraba la aventura de un aspirante a hechicero que debe proteger a una niña que está destinada a ser clave para la Humanidad. Y si bien la cinta no logró convertirse en un mega éxito, sí obtuvo cierto renombre y quedó en un espacio entre el culto y los libros de historia de la cultura popular.

34 años después de ese estreno, Willow vuelve a la acción retomando la misma historia: tras lo ocurrido en la película, la vida en este mundo de fantasía medieval ha estado tranquila. La magia está prácticamente olvidada, las amenazas de las fuerzas oscuras se han mantenido alejadas y nadie parece saber o estar demasiado interesado en qué fue de Elora Danan, la niña que había que proteger en la historia original.

Eso hasta que un ataque inesperado termina con el príncipe secuestrado y con su hermana liderando el grupo que parte en su búsqueda, y su primera parada es el pueblo de los Nelwyn, gente pequeña, donde vuelven a pedir la ayuda del hechicero Willow (Warwick Davis, el mismo actor de la cinta original).

Con dos episodios ya estrenados, la serie da para entusiasmarse. Presentando un grupo de nuevos personajes y actores, entrega la hoja de ruta de una historia que estará cargada de aventuras y amenazas, pero también mucho humor. Para esto es fundamental el fiato del grupo de aventureros que el espectador debe querer y alentar, y esto se logra, mientras que la apuesta por hacer de esta una serie más liviana y cómica que las últimas sagas épicas que se han visto, también funciona, dándole un puesto entre las producciones para relajarse, al mismo tiempo que para mantenerse al borde de la silla con los momentos de acción.

Está por verse cómo sigue desarrollándose la aventura en los ocho capítulos aún por debutar, pero al menos el inicio habla de un buen regreso y una serie que puede enganchar no sólo desde la nostalgia, sino que también se sostiene como una entretenida nueva historia para ver.