La carrera por uno de los aspectos más relevantes y esperados de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos que se desarrollarán en Santiago en 2023 ya ha comenzado. Y esta vez no se trata de algo deportivo.
El pasado 6 de noviembre se abrió el proceso de licitación para la realización de las ceremonias de obertura y clausura de ambas citas, en una instancia que cruza espectáculo, tecnología, puesta en escena, capacidad organizacional y atractivo artístico, y que siempre forma parte medular del despegue y del adiós de todo megaevento deportivo. Es la declaración de identidad de la fiesta ante el mundo. Sucedió sin ir más lejos en la inauguración del actual Mundial de Qatar: una de las imágenes más recordadas fue, por ejemplo, la aparición del actor Morgan Freeman en pleno escenario.
En el caso chileno, los organizadores persiguen objetivos claros. “Buscamos adjudicar a un proveedor que asegure el correcto desarrollo y ejecución de las cuatro ceremonias correspondientes a los Juegos Santiago 2023, el megaevento deportivo más importante que ha relizado Chile en su historia”, precisa Gianna Cunazza, directora ejecutiva de la Corporación Santiago 2023, ante precisamente el despliegue de encuentros que tendrá el hito.
La inauguración de los Panamericanos será el 20 de octubre de 2023, mientras que su clausura está agendada para el 5 de noviembre. En tanto, los Parapanamericanos partirán el 17 de noviembre, para terminar el 26 del mismo mes. Ambas ceremonias de obertura se harán en el coliseo central del Estadio Nacional, mientras que existe una alta posibilidad de que las clausuras se lleven a cabo en la elipse del Parque O’Higgins. Todo se emitirá por TV abierta.
Cunazza sigue: “En ese sentido, se evaluará desde los aspectos administrativos de los oferentes, la experiencia, la propuesta económica y la propuesta creativa que debe ser coherente con los lineamientos planteados en relación con la imagen país, la identidad de los Juegos y los pilares comunicacionales definidos por Santiago 2023, que son el alto rendimiento, la sostenibilidad, las comunidades y la inclusión”.
Hasta ahora, hay dos productoras chilenas que encabezan la disputa por quedarse con la instancia. Por un lado está DG Medios, la compañía de mayor trayectoria del rubro en el país y que desde los 90 se ha encargado de las visitas de nombres como Paul McCartney, The Rolling Stones, U2, Roger Waters o Coldplay. Para presentar su oferta se asociaron con FiveCurrents, destacada firma inglesa que se ha especializado en esta clase de ceremonias y que ha tenido roles diversos en 63 citas globales, tales como los Juegos Olímpicos de Londres 2012 o la Copa América Centenario que se hizo en Estados Unidos en 2016.
También sumaron una aliada nacional: la directora de cine Maite Alberdi, destacada por trabajos como El salvavidas, La once y, sobre todo, El agente topo, el que fue nominado al Oscar por Mejor largometraje documental en 2021. Su rol es presentado como clave. Será la encargada de materializar todo el imaginario audiovisual que se despliegue em las ceremonias, el que se debe nutrir de aspectos locales, pero también con una mirada global. Es, finalmente, el “relato” que quiere exhibir los Panamericanos 2023.
Carlos Geniso, gerente general de DG Medios, comenta: “Para las oberturas y las clausuras, tienes que hacer algo potente y nosotros estamos armando un grupo para poder llevar eso a cabo, para poder demostrar lo importante que es la cultura nacional. Nuestra idea es entregar un mensaje integral en el concepto de lo deportivo y cultural: desde No al racismo hasta Sí a la diversidad de géneros, pasando por incluir a los niños de Chile, desde los nacionales hasta los inmigrantes”.
Después sigue: “Maite Alberdi está trabajando en darle un carácter súper propio a la ceremonia. Es una persona con un currículum muy importante y con buen sentido de la actualidad, por lo que puede adaptar y hacer una my buena apuesta. Por otro lado, nosotros llevamos 30 años trabajando en el Estadio Nacional, lo conocemos, por tanto tenemos toda la experiencia de trabajar ahí. En resumen, sería bueno tener un fair play y que todos quienes hayan postulado a la licitación estén en igualdad de condiciones para desarrollar este proyecto”.
DG Medios también es el socio en Chile de Live Nation, el gigante de la industria de conciertos en Estados Unidos, lo que podría significar que una estrella de renombre internacional pueda pasar por Santiago, sumado a los artistas chilenos que deben incluir los espectáculos.
Otra compañía también en carrera es Lotus Producciones, históricos organizadores desde 2011 del festival Lollapalooza Chile -el más relevante del país en su nicho- y quienes también han estado a cargo de eventos como la Fórmula E desarrollada hace unos años en la capital. Y también se vincularon con un actor foráneo: se trata de Balich Wonder Studio, empresa italiana con abundante recorrido en diversas experiencias en vivo y que presenta en su portafolio participación en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, en los Juegos Olímpicos de Invierno Beijing 2022 y en el actual Mundial en curso en Qatar.
Jorge Merino, director de proyectos de Lotus, complementa: “La ceremonia de los Panamericanos 2023 se nos presenta como un evento muy especial e icónico, excepcional dentro de Chile, porque sólo sucede una vez, no se da todos los años, y eso debe ir de la mano con un encuentro artístico a la altura que será emitido para todo el mundo y para la misma gente del estadio. Es un despliegue tremendo con contenidos súper vinculados a la cultura y a las raíces de los países sede, por tanto es un desafío que nos llama la atención, nos parece muy especial lograr esa experiencia, tener la flexibilidad de no sólo ser una productora de shows y festivales”.
Merino también cuenta que, para integrar a la ceremonia, elaboraron un listado de algunas de las personalidades más reconocidas de la cultura chilena, integrando música, cine, danza, teatro y artes visuales. Todos ellos podrían estar en el show. “Estamos tratando de rescatar cosas de nuestra identidad, porque esta instancia llega en un momento súper sensible, donde queremos que se nos describa de la forma más atractiva y linda posible como país, que se contribuya a la gente a hacer una pausa y decir ‘qué lindo es Chile, qué rico son las cosas que tenemos’, conectarse con el momento que vivimos. Vamos a trabajar con los mejores artistas nacionales de todas las ramas y rescataremos a estándares históricos”.
Los contactos de Lotus con firmas como C3 Presents -responsables del Lollaplooza en Chicago- también aseguran la presencia de estrellas foráneas.
Pero también existe una promotora extranjera interesada en involucrarse con Santiago 2023. Según pudo averiguar La Tercera, se trata de la brasileña SRCOM, situada en Río de Janeiro y con un currículum en la organización y producción de sobre todo eventos locales, como los Juegos Olímpicos de Río 2016 o los Paralímpicos que se hicieron ese año en la misma ciudad.
Según las bases creativas y técnicas de la licitación, las ceremonias de inauguración deben ser pensadas para un escenario en 360°, una puesta en escena masiva, números artísticos, hitos protocolares, efectos especiales y el espectáculo principal debe estar a cargo de un artista internacional, el que debe tener protagonismo en los ránkings del continente según lo certifiquen revistas, radios u otros medios especializados. La propuesta de dichos artistas o agrupaciones será visada por la Corporación Santiago 2023, reservándose el derecho de aceptar o rechazar las propuestas. Las citas de cierre deben contar con características similares, también con figuras invitadas y algunas venidas del extranjero.
El documento también establece los contenidos base que tendrán que transmitir las cuatro ceremonias, las que deberán tener como hilo conductor la identidad y la imagen de Chile.
Todo a través de varios conceptos: Punto de encuentro, o sea, destacar a los Juegos como un eje donde el país se podra encontrar en torno a un hito que quedará para siempre en la memoria; Geografía, destacar la diversidad de territorios, orígenes y culturas que hay en Chile; Cuidado por el medio ambiente, resaltar la postura activa de Chile frente al cambio climático, la sostenibilidad social y el cuidado de la flora y fauna; Pueblos originarios, el vínculo ancestral de la ciudadanía chilena con sus raíces; Feminismo, el rol histórico de la mujer en concretar una sociedad equitativa y paritaria, y cómo el deporte puede acortar las brechas de género; y la inclusión, la diversidad y la discapacidad, entre otros puntos.
El relato, es decir, lo que irá contando la puesta en escena también cuenta con algunos requisitos: deberá tener referentes identitarios de las comunas sede de la cita, entre ellas, Ñuñoa, Peñalolén, La Florida, La Pintana, San Bernardo, Valparaíso, Quillota, Pichilemu y San Pedro de la Paz; deberá incluir adultos mayores, niños y personas con discapacidad en diferentes disciplinas artísticas; deberá tener artistas nacionales de diversas disciplinas cuya intervención ayude a narrar el relato propuesto por la productora; y deberá considerar paridad de género al momento de escoger a los artistas invitados.
El evento y la puesta en escena debe considerar que será transmitido por TV en vivo, con un despliegue histórico de cámaras y tecnología 4K.
Según las propias bases, el presupuesto asignado a quienes se adjudiquen la licitación es de US$ 10 millones. “Esta cantidad está ajustada y muy reducida, en comparación a la realización de espectáculos similares en versiones anteriores de los Juegos. Se recortó este presupuesto atendiendo a la realidad económica del país”, asegura Gianna Cunazza.
La adjudicación de la oferta se resolverá este lunes 19, pero el nombre de la productora que se encargará de tal misión recién se informará de forma pública y oficial el próximo año. “El proceso de adjudicación implica también el acuerdo de los términos contractuales y cerrar aspectos desde la propuesta creativa, por lo que esperamos que dentro del primer semestre 2023 podamos anunciar el nombre de la productora a cargo de realizar estos cuatro momentos históricos en nuestro país, llenos de nuestra identidad, inclusivos e inspirados en nuestra riqueza histórica, la cultura tradicional y contemporánea”, cierra la ejecutiva.