Jaime De Aguirre: “Me parece bien escuchar las manifestaciones, pero trasgredir los modales lo único que hace es ralentizar las conversaciones”
En sus primeros meses en el cargo, el ministro de las culturas da cuenta con Culto de cómo ha sido su inicio en el gobierno y cómo proyecta su gestión. Además, detalla el rol de su cartera en la conmemoración de los 50 años del golpe y cómo enfrenta la paralización de los funcionarios del ministerio.
Asumió el pasado 10 de marzo. En poco más de 3 meses, Jaime de Aguirre Höffa ha tenido una intensa actividad como ministro de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, en uno de los ejes principales del programa de gobierno. De Aguirre ha puesto en marcha iniciativas esperadas, como la llamada Política Nacional de la Lectura, el Libro y las Bibliotecas, dada a conocer el pasado 6 de abril.
“Una de las principales novedades de esa política es la incorporación de las bibliotecas de forma prioritaria -comenta De Aguirre a Culto, vía telefónica-. Nosotros, al menos así lo pensamos. Y así hemos trabajado esta política del libro con las bibliotecas como espacios clave para potenciar el acceso y la participación en torno al libro y la lectura. También como lugares muy relevantes para el desarrollo social y cultural de comunidades, territorios, especialmente los niños, niñas y jóvenes. Son lugares a los que no solamente se viene a leer en silencio. Son lugares de encuentro a la comunidad”.
¿Cómo ha vivido usted estos primeros meses de su llegada al ministerio?
Me han tocado muchas cosas que no aparecen ahora, pero con harta satisfacción. A mí me gusta la diversidad y las oportunidades que se dan al trabajar en una institución como esta. Yo soy una persona ligada a la cultura de hace muchos años. A raíz de eso probablemente he tomado este encargo con mucha responsabilidad y compromiso.
¿Cuáles son sus sensaciones en esta primera etapa?
Los desafíos para el ministro de las Culturas, las Artes y el Patrimonio tienen un norte claro, según mi visión, y eso es hacer que Chile sea un país más consciente de su cultura, de su patrimonio y de las potencialidades de sus artistas. Tenemos una cantidad de artistas increíbles en Chile y es bueno que estén conscientes de sus potencialidades. La cultura, desde mi punto de vista, es el alma del país.
¿En qué ha estado trabajando?
Este es un ministerio súper amplio y de muchos sectores. Por ejemplo, ahora lanzamos los procesos participativos de una política educacional artística y una política educacional patrimonial. Esto significa darle a los niños muchos más elementos para que crezcan con una mentalidad abierta a la cultura. Otra cosa, la próxima semana tenemos el Día de los patrimonios, que se realizará el sábado 27 y el domingo 28. Estamos haciendo un llamado a organizaciones e instituciones públicas y privadas a inscribir sus actividades en el sitio diadelospatrimonios.cl. Esta es una de las fiestas culturales más importantes de Chile y desde el Ministerio estamos bien expectantes con esta nueva versión, porque a la gente le gusta el día de los Patrimonios. Obviamente en los espacios públicos, pero también los privados. El lema para este año va a ser “Recuerdos para el futuro”, esto significa mirar nuestro pasado, proyectarlo hacia adelante.
¿En qué políticas piensa poner el acento durante el 2023? Entiendo que están considerados los programas Puntos de cultura, Fomento y desarrollo de ecosistemas creativos, Promoción y fortalecimiento del trabajo cultural.
Esos son programas que ya tienen su presupuesto asignado y actualmente están siendo implementados. Algunos de ellos ya tienen sus convocatorias abiertas, etcétera. Pero para este 2023 queremos priorizar la gestión y sobre todo avanzar en nuestro proyectos legislativos para fortalecer la institucionalidad. De hecho, vamos a presentar próximamente al Congreso, el proyecto de Ley General de Archivos, la Ley General de Artesanía, el proyecto de Ley del Sistema Nacional de Financiamiento Cultural, el Estatuto del Trabajador Cultural, luego de la sistematización de los procesos participativos que hubo el 2022. Es decir, estamos priorizando el trabajo legislativo y la gestión. Nosotros pensamos que todo lo que ya se hizo durante el 2022 llegó el momento de expresarlo en este trabajo legislativo.
Menciona el Sistema Nacional de Financiamiento Cultural, ¿cómo va eso?
Lo que se planteó fue que la lógica de concursabilidad no fuera el criterio único, o el criterio principal para el financiamiento de la cultura. En eso estamos avanzando, a través de la construcción de un nuevo Sistema Nacional de Financiamiento Cultural. Ahí la idea es reorganizar, fortalecer los mecanismos y herramientas de apoyo y entrega de recursos, dándole más sostenibilidad a los proyectos, a las organizaciones e instituciones culturales y con ello contribuir a la materialización de los derechos culturales de la ciudadanía. Pero no es que estemos eliminando la concursabilidad, sino que la estamos haciendo convivir con esta nueva manera de financiar la cultura. Ahora estamos en el proceso de sistematización de los resultados de la consulta ciudadana y en la elaboración del proyecto de ley.
Se mantendrá la concursabilidad entonces...
Como te decía, la idea es avanzar para que exista una combinación de herramientas de financiamiento, incluida la concursabilidad, pero que esta no sea la principal o la única manera de acceder a estos recursos. Que no sea el principal mecanismo. Esta herramienta de apoyo ha sido bien importante en el estímulo de la creación artística y va a seguir siendo necesaria porque los recursos son finitos en el sentido de que se acaban y nos permite entregarlos de una manera justa, sin arbitrariedades ni discrecionalidad.
¿En qué se encuentra la nueva Ley de Patrimonio Cultural?
Actualmente nos encontramos diseñando los procesos participativos que consideran una consulta ciudadana y una consulta indígena. Estas no son leyes sencillas, ¿ah? Sabemos que es urgente modernizar y fortalecer nuestra institucionalidad patrimonial y este proyecto va a ser bien importante para incorporar al patrimonio cultural inmaterial, descentralizar recursos y atribuciones sobre el patrimonio local y contar con nuevas herramientas para su gestión. Esta es una ley muy esperada, por lo tanto, estamos poniéndole mucha atención y priorizando de manera muy especial este proceso.
Hace poco, usted participó en la inauguración del memorial de Sergio Tormen, en el Velódromo del Estadio Nacional y la restitución de ex centro de detención de Rocas de Santo Domingo. ¿Será su ministerio el que liderará las conmemoraciones de los 50 años del golpe?, ¿qué se tiene en mente para ello?
La palabra liderar es un poco grande, más bien, esto es un trabajo interministerial que a nosotros nos toca coordinar mediante una secretaría técnica que tenemos. Aquí todos participamos. Aquí están todos conscientes de que es una fecha importante. Ya contamos con un relato; una agenda programática con actividades de memoria; y actividades culturales, con la creación de obras y espacios conmemorativos. Como gobierno creemos que esto es una oportunidad para que la sociedad chilena que tiene un espacio de encuentro y reflexión en torno a los tres ejes que hemos estado desarrollando que son memoria, democracia y futuro.
¿Se seguirán recuperando sitios de memoria en regiones?
Bueno, en eso estamos trabajando esta semana, acabamos de aprobar en la sesión extraordinaria del Consejo de Monumentos Nacionales la declaratoria como monumentos históricos de siete sitios de memoria, que de hecho significaron cumplir el compromiso del Estado chileno de contar con al menos un sitio de memoria en cada región y que tres regiones Arica y Parinacota, Atacama y Ñuble, cuenten con sus primeros sitios de memoria protegidos por el Estado. Y a principios de semana se entregó en comodato los terrenos del sitio histórico Ex Centro de detención Balneario Popular Rocas de Santo Domingo a la Fundación por la Memoria San Antonio. Fue una cosa bien increíble, muy emotiva, porque sitios que fueron balnearios populares creados por el gobierno de Salvador Allende, fueron convertidos después en centros de detención y entrenamiento a cargo del Ejército y que hoy día se devolvieron. Además creamos en el Ministerio el programa Sitios de memoria que sirven al financiamiento, asistencia y sostenibilidad de organizaciones que trabajan sitios de memoria. Todas estas medidas forman parte de las actividades de conmemoración de los 50 años del golpe de Estado. Hay muchas actividades orientadas con la tríada memoria-democracia y futuro. Como he dicho tantas veces: un país sin memoria, no tiene futuro.
¿En qué está la situación de la secretaria ejecutiva del Consejo Nacional del Libro, Gladys González? Ella recibió acusaciones de malos tratos de los funcionarios y estuvo con meses de permiso
Ya se confirmó una nueva Secretaria Ejecutiva del Libro y la lectura. El sumario de Gladys González se cerró y se integró al Centro de Documentación del Departamento de Ciudadanía.
Usted fue a la Feria del Libro de Buenos Aires, que tuvo a Santiago como ciudad invitada. ¿Cómo evalúa la participación chilena?
Fue una participación muy exitosa, hay que decirlo. Llegamos a Buenos Aires con una comitiva de más de 100 personas ligadas al sector del libro, 60 de ellos autores y autoras nacionales que realizaron un trabajo diverso, interesante, a través de un programa de cerca de 100 actividades. El balance yo lo encuentro muy positivo. Logramos seguir posicionando a Santiago y a Chile como un polo literario. Logramos fortalecer el intercambio con Argentina de manera muy positiva. Yo tuve reuniones con el ministro de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, con el ministro Cultura de la Nación. Conseguimos una importante cantidad de venta de libros nacionales. Diría es que fue una incursión muy exitosa.
¿Qué piensa de la polémica armada a propósito de que la lista de autores invitados fue muy “oficialista”?
Todo el mundo tiene derecho a opinar. Yo creo que (esa opinión) fue un poco apresurada, dado que eso no se vio en la feria misma, en ningún aspecto. Además, la comitiva fue seleccionada por un comité editorial independiente y autónomo sobre la base de un criterio transparente y público que consideraba criterios de paridad, autores de trayectoria pero también emergentes y una diversidad de voces en el ciclo del libro. Yo creo que las personas que opinaron a través de la prensa en ese sentido, se apresuraron un poco.
En la industria editorial hay una crisis con la escasez de papel, y ha golpeado también la inflación, lo cual ha repercutido en el precio de los libros. ¿Hay considerada alguna medida al respecto?
Bueno, los temas de inflación, los temas económicos la verdad que afectan a todas las actividades. Pero uno de los objetivos de la política, la lectura, el libro y la biblioteca. Es importante decir lo que tratamos hace pocas semanas es precisamente contribuir y facilitar el acceso al libro mediante diversas estrategias. Algunas de ellas son la actualización de la Ley del Libro y el marco normativo asociado a los nuevos instrumentos de financiamiento para diferentes formatos y fortalecer las bibliotecas públicas regionales.
La semana pasada, el columnista Matías Rivas, de La Tercera, escribió: “El Ministerio de las Culturas está enfocado en conmemorar los 50 años del Golpe, no de la situación crítica en que estamos. Quizá no hay presupuesto destinado al ítem supervivencia”. Esto, en alusión a la situación precaria en que se encuentra el sector cultural en cuanto a capacidad de ingresos. ¿Qué le parece el comentario?
Bueno, celebro que la gente haga comentarios. Me gusta la expresión, fui criado en esa cultura, pero hay que decir que uno de los principales esfuerzos del primer año gestión fue la reactivación y recuperación del sector cultural, evidentemente muy golpeado por la pandemia. En una primera etapa logramos la flexibilización de los aforos para los espacio de uso cultural y eventos masivos. Implementamos medidas de apoyo económico. A saber: levantamos recursos para la ejecución de un plan de apoyo. 2.800.000.000 de pesos; se ejecutaron diferentes medidas con el Ministerio de Economía, 8.300.000.000 de pesos; entregamos el Bono para los trabajadores de la Cultura, algo inédito para el sector que benefició a más de 32.000 agentes culturales que se encontraban condiciones de vulnerabilidad. Sabemos que hay problemas estructurales que determinan la desprotección en el sector. Por eso estamos empujando nuevas políticas culturales que contribuyan a dar mayor sostenibilidad a los agentes culturales a través del nuevo Sistema Nacional de Financiamiento cultural. No comparto el comentario, aunque lo respeto.
Por estos días, usted enfrenta la primera crisis de su gestión, con la paralización de los trabajadores de la subsecretaría de las Culturas. En su comunicado, ellos acusan “desidia” de su parte por resolver el tema. Dice: “el Ministro de Aguirre ha demostrado desidia no sólo ante este estratégico proceso institucional, sino, además, ante la propia agenda de condiciones laborales de las y los trabajadores, incumpliendo a la vez, su compromiso de reestructurar el Gabinete Ministerial y disminuir su excesiva cantidad de asesores”. La pregunta es: ¿ha habido desidia de su parte?, ¿qué se está haciendo para solucionar el problema?
Palabras sacan palabras y yo trataré de evitar esa modalidad. En primer lugar, quiero decir que la movilización es una expresión legítima frente a demandas de larga data. Estas son demandas que vienen desde el año 2015 que se han ido acumulando y de alguna manera hemos recibido en esta administración. Yo celebro que las expresen. Me gusta que los gremios y asociaciones tengan una voz. Me parece bien escucharlas, pero no me parece trasgredir los modales y exagerar las declaraciones, porque eso lo único que hace es ralentizar las conversaciones. Desde el primer minuto, esta administración fijó un calendario de reuniones de trabajo y una mesa de condiciones laborales en conjunto con las asociaciones y se han logrado avances. Las puertas del Ministerio siempre están abiertas, aunque nos vengan a poner carteles y cosas. El ministerio tiene sus puertas abiertas. Yo creo que es el único camino posible para avanzar en estos desafíos que tenemos de llegar a la ciudadanía, que es que en definitiva, a quienes nosotros nos debemos y está orientado nuestro trabajo. Así que yo supongo que esto es un tema que tendremos la madurez de resolver de buena forma a la brevedad.
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