Ana Tijoux remece Lollaplooza con explosivo show cargado de baile, crítica social y Pablo Chill-E en escena

“Anita, Anita!”, gritaba el público que repletó el Alternative Stage, en los minutos previos a la presentación de la cantante Ana Tijoux en Lollapalooza. La recibieron con un sonoro aplauso, pese a los casi 30 grados que se sentían con fuerza en el Parque Cerrillos. La nueva estructura techada que se le incorporó al escenario esta temporada, una buena innovación, contribuyó a hacer algo más llevadero el calor.

Tras un video introductorio, con mensajes de Nina Simone, Angela Davis, Víctor Jara y Violeta Parra, el arranque del show estuvo cargado al material de Vida, su nuevo álbum publicado esta temporada, tras una década sin lanzar material. Un trabajo que contó con la producción musical de Andrés Celis e invitados como Talib Kweli, Plug 1 de De La Soul, iLe, Pablo Chill-E, entre otros. Así pasaron temas como El caudal y Millonaria.

También interpretó otros cortes de ese disco como Bailando sola, un tema de rítmica cercana a la cumbia, en que lució su arreglo de teclado, que le da una textura diferente a la obra de Tijoux. La afrolatina y jazzera Óyeme, una entretenida canción fusión, también sonó e hizo bailar a la gente. Y la ovación sonó fuerte cuando entró Pablo Chill-E, una de las estrellas del trap chileno, con quien cantó Dime qué, otra de las nuevas.

Por supuesto, Tijoux incluyó temas más clásicos como la ineludible Vengo, del álbum homónimo de 2014. Pasó Shock, del álbum La bala (2011), canción de ritmica reggae inspirada en el libro La doctrina del shock (2007) de Naomi Klein, que dedicó a las luchas estudiantiles. Y sacó aplausos la autobiográfica 1977, canción del álbum del mismo nombre publicado en 2009 y que alguna vez sonó en la afamada serie Breaking Bad. En esta ocasión suena con un arreglo algo distinto de la original, que enfatiza texturas.

Luciendo pañoleta amarrada a la cabeza, Tijoux se hace acompañar por una eficiente banda de tres músicos: baterista, tecladista y un bajista que también apoya con teclado. Desde las maquinas, colgaban sendas banderas de Palestina y la Weñufle mapuche. Se trata de un combo de sonido apretado, en que destaca la fusión de ritmos latinoamericanos, sincopados, samplers, sonidos de sintetizadores y su habitual fraseo rapero, bien sincronizado con la percusión, como manda el manual. También intervenía a ratos un cuerpo de baile.

La ocasión permitió apreciar en directo el nuevo material de Tijoux, de carácter decididamente optimista y bailable, el que fue bien recibido por el respetable. La misma cantante explica que este nació de la pérdida de personas cercanas y por ello quiso imprimir un tono de celebración. Quizás eso explica que invitó a escena al rapero Hordatoj, con quien interpretó su colaboración A veces.

En el final sonó la clásica Somos sur, uno de los temas más políticos de su repertorio en que se desplegaron en las visuales los mensajes en apoyo al pueblo de Palestina, además del puño en alto y la weñufle mapuche. “Libertad a los presos por luchar”, dijo Tijoux. Así cerró un show contundente, al que solo le penó algunas de sus canciones más clásicas como Sacar la voz o Antipatriarca. Y por cierto, un mejor marco; su show, su trayectoria y su repertorio ameritaban sin duda alguno de los escenarios principales del Parque Cerrillos, a la misma hora en que se presentaba la estrella urbana Jere Klein.

En 2023, la artista publicó su autobiografía, Sacar la voz (Lumen). Un relato confesional, en que muestra una pluma tan descarnada como el filo de sus letras, donde repasa su niñez, exilio en Francia, maternidad, música, desapego de la fama y amores. En ese mismo año, la afamada e influyente Rolling Stone, la destacó como una de las mejores 50 exponentes del rap latino, en sus habituales listados.

A tono con su habitual interés social, Tijoux ha estado con presentaciones no solo en clubes y festivales como el Vive Latino, sino que también en eventos como el Festival Chile canta Palestina contra toda violencia y la ceremonia inaugural de los Juegos Parapanamericanos, junto a Flor de Rap y Pablo Chill-E. También fue invitada a participar en el show en el país de la cantante estadounidense Alicia Keys, ocasión en que interpretó parte de 1977.

La presentación de Tijoux en la edición local de Lollapalooza fue un hiato en medio de una gira por Estados Unidos. Solo hace unos días se presentó en clubes de San Francisco y Los Angeles, y tras esta presentación, seguirá con presentaciones hasta comienzos de abril en clubes de Seattle, Chicago, Minneapolis, Nueva York, entre otros puntos del gigante del norte.