Una polera despertó la curiosidad del siempre inquieto Claudio Iturra. Durante un viaje a Tokio, notó a un japonés que vestía la prenda con el estampado de Patagonia, una conocida marca de ropa outdoor. Fiel a su estilo, se le acercó. “Yo vengo de ahí”, le dijo. El japonés, atónito, no podía creerlo. “¿Cómo?, si esta es una marca de ropa”, le respondió.
“No”, le dijo Iturra. “Patagonia es un lugar que queda en mi país”.
Cuando el japonés le preguntó cuál era su país, Iturra le mencionó a Chile. Y seguido, tomó su teléfono, buscó fotos de los imponentes paisajes australes y se las mostró. “Esta es la Patagonia”, señaló. El nipón, seguía sorprendido. “No lo sabía, yo pensaba que era una marca de ropa”.
Aquel fue el momento clave que definió el último y póstumo proyecto televisivo de Claudio Iturra, La ruta de la Patagonia. “Ahí encontró la motivación de decir: Yo necesito potenciar este espacio, necesito decir que es de Chile, sacar el máximo provecho. Y así surge el tema. Él nos dijo: ‘Yo he recorrido todo el mundo, me he dado la vuelta, pero tengo que hacer algo específicamente dedicado a Chile’. Y así es como surge el programa”, detalla a Culto Felipe Morales, productor ejecutivo del área de cultura de Canal 13.
Fue así que Iturra trazó el que sería su proyecto final, el ultimo que alcanzó a grabar y editar completo antes de su repentina muerte a los 43 años, a fines de mayo. Los 12 episodios de una hora comenzarán a emitirse desde este sábado 29 de junio, posterior al noticiario Teletrece Central. “Él era un generador de contenido muy creativo y por tanto, siempre estaba buscando nuevos contenidos”, detalla Morales.
La premisa del programa es simple y se hace notar de entrada; recorrer los 1.200 kilómetros de la carretera austral, desde su arranque en Puerto Montt, hasta Villa O’Higgins, en la región de Aysén. Un poco como lo que había desarrollado en su programa Ruta 5, pero concentrado solo en la Patagonia. “El quería hacer una guía turística televisiva -apunta Felipe Morales-. Para que la gente, y no solo los chilenos, pueda conocer los 1.200 kilómetros de la ruta, los lugares, los personajes y eso es un poco lo que hace Claudio”.
A Claudio, la Patagonia le llamó desde su adolescencia. Su hermana, Macarena Iturra, recuerda que hubo un viaje que lo marcó. “Nosotros somos tres hermanos, Claudio era el más chico, e hizo un viaje con mi hermano mayor, Nicolás. Él tenía 15 años, mi otro hermano tenía 18 -le dice a Culto-. No llegaron tan lejos, pero sí fueron a Puerto Montt, llegaron hasta Chiloé, un poquito más allá, con dos lucas en el bolsillo y una mochila. Entonces, ahí yo creo que parte el amor, el inicio de esta relación tan especial que tiene con el sur de Chile. Creo que eso también fue una motivación súper importante para elegir esta ruta ya después de haber hecho otro tipo de programa. Él siempre decía que nos teníamos que sentir orgullosos de lo lindo que es Chile”.
Culto accedió al visionado del primer episodio, titulado El edén verde de la Patagonia, que muestra el inicio de la travesía. Tras la presentación, una apabullante secuencia de paisajes de la Patagonia austral, con sus verdes selvas, los volcanes, lagos y fiordos, el viaje arranca en Puerto Montt. Ahí Iturra conversa con turistas (incluyendo a un YouTuber japonés) y luego llega hasta el punto que marca el kilómetro 0 de la carretera austral. Al periodista le llama la atención lo sobrio del hito; apenas una señalización similar a las comunes de tránsito. “Deberían poner un arco, para que los gringos se saquen fotos”, sugiere. “La carretera austral es de las más lindas del mundo”.
Luego, se sube al auto y comienza el recorrido. Tras pasar por el seno de Reloncaví (el mismo al que llegó Pedro de Valdivia en 1552), arriba al apacible poblado de Cochamó, en la provincia de Llanquihue. Ahí visita el mirador, la costanera Arturo Prat, y la antigua iglesia local, María Inmaculada, construida con tejas de alerce. Sucede un momento especial, pues una familia de turistas lo reconoce y le piden una foto. Iturra, accede sin problemas y se toma, probablemente, de las últimas fotografías con fans en vida.
“Eso ya es algo que venía de un tiempo a esta parte -explica Macarena Iturra, sobre el reconocimiento de la gente a su hermano-. En general se estaba haciendo medianamente conocido con este programa, con la Ruta 5, que fue el programa anterior, que también recorrieron Chile hacia el otro lado. Y la gente es muy cariñosa, porque yo creo que también reconocen en él una autenticidad y una naturalidad en relacionarse con la gente, que no es una celebridad ni mucho menos, sino que es una persona cualquiera, muy común y corriente, que está haciendo un programa de turismo para nuestro país”.
El último viaje de Claudio Iturra
En este último viaje, Iturra partió en diciembre de 2023 y todo el proceso se extendió alrededor de cuatro meses, de hecho, cada episodio tiene marcado el momento en que está sucediendo. “Este programa lo hizo con dos camarógrafos, una directora que es Paola Acevedo, que es parte de (la productora) Masai Media. Él tiene una planificación, pero el viaje también lo va moviendo. Yo te podría decir, este programa se grabó en cinco días, cuatro días, tres días, diez días, iba según como lo va sintiendo, eso nos contaba mucho. Se movía con lo que iba logrando o le faltaba. Por ejemplo, nos decía ‘nos falta el atardecer’, entonces se quedaba un día más para poder hacer el atardecer. Por eso tiene la visualidad que tiene. Este es un programa de alto estándar en términos técnicos, en términos de look, la fotografía”, dice Felipe Morales.
Eso sí, no era de enviar reportes. Solo le comunicó al canal la idea y la ruta inicial. “Al inicio nos fijó al inicio, nos fijó una ruta, cuando se presenta el proyecto y cuál era los contenidos que va haciendo. No teníamos un reporte diario, tenía libertad porque Claudio hizo más de 500 capítulos acá en el canal, por tanto tenía una cierta autonomía de trabajo”.
De hecho, lo que se verá en televisión, es el producto final que el mismo Claudio Iturra elaboraba con su equipo en su productora. “Nosotros solo le agregamos algunos GC, pero está tal cual él lo dejó”, añade Felipe Morales.
Mientras estaba en la ruta, Claudio Iturra se comunicaba con sus familiares. No era de enviar fotos, sino que lo hacía de otra forma. “Él era más de videollamada, siempre me hacía videollamada cuando estaba ya terminando el día para contarnos cómo había sido la grabación, cuántos días llevaba a veces sin bañarse, ese tipo de cosas, porque era duro el recorrido -apunta Macarena Iturra-. Con el camarógrafo a veces tenían que dormir en el auto porque no alcanzaban a llegar a los lugares. Pero sí, él siempre comentaba y cuando estuvo acá, precisamente el año pasado, a fines del año pasado, que estaba muy contento del lugar”.
Aunque dar con Iturra no siempre era fácil. “Él tenía cuatro o cinco celulares y normalmente uno tenía que grabar el celular según el mes y el año, si es que justo estaba en Tailandia o en África o algo así. En el directorio de mi teléfono tengo Claudio 2020, qué sé yo”, detalla Macarena.
En el primer capítulo, Iturra marca el espíritu del programa; no solo llega a localidades, sino que muestra diversos emprendimientos locales. Así lo hace en Coiuhue de Los Columpios, un recinto familiar dedicado al descanso y al turismo, donde cuenta con 8 columpios para adultos y 5 para niños. Animado, el conductor se sube a un columpio. “No hay nada más rico que columpiarse, es volver a ser niño”, asegura.
También conoce unas cabañas locales, Volcán y Mar, donde charla con su dueña. Al rato arriba a las Termas del Sol, en Puelo, plena selva de la Patagonia, donde se sumerge en las aguas termales y conoce a los dueños, un joven matrimonio que se vino desde Santiago. Asimismo, durante el recorrido conversa con los lugareños y remarca el intenso contacto que existe en la zona entre el lado chileno y el argentino, aprovechando que la frontera es cercana y más transitable que en otros puntos del país.
Durante el viaje, a Iturra le llaman la atención los fiordos, los estuarios y los canales locales, los que compara con otros puntos del mundo. A su hermana Macarena, le resonó esa comparación. “Él siempre ha dicho que la Patagonia y el sur de Chile, tiene muchos parecidos con partes de Europa, con Suiza, con Noruega, con la naturaleza en su estado más puro, sin intervención humana. Por eso hace esa comparación”.
El capítulo tiene un momento emotivo al final, cuando aparece una secuencia de Iturra avanzando entre una ventisca, en un paisaje rodeado de naturaleza. “Se siente como en el cielo”, dice. Una imagen que da un cierto tono místico y sobrenatural, que conmueve a la luz de lo que le ocurrió solo meses más tarde. “Gracias Claudio”, se lee en parte de un emotivo texto que acompaña la imagen. Un tributo al profesional que trabajó con Canal 13 desde 2015.
“Esa fue una decisión de la familia, con la productora y obviamente con nosotros. Es solo al final que vamos a mencionar como una especie de homenaje, que va a tener cada uno de los capítulos”, dice Felipe Morales. Iturra incluso había alcanzado a plantear su siguiente proyecto, un programa sobre historias de viajes. “Él hizo una exploración hace algunos años, un programa que se llamaba El viaje de mi vida y estábamos ya conversando, incluso nos mandó un teaser como para que fuese el siguiente proyecto, después de La ruta de la Patagonia”, añade el profesional.
Para Macarena Iturra, el volver a ver a su fallecido hermano en la pantalla resulta una experiencia emotiva. “Son muchas emociones, diría yo. Ha sido un periodo difícil como familia, pero este programa fue su último viaje. Entonces, queremos darle la importancia que tiene y que tuvo para él, queremos darle visibilidad a este trabajo, que como se ve, lo hace con tanto entusiasmo. Eso es lo que veo ahora, la mirada distinta que uno tiene hoy día, que él ya no está, es ver cómo le puso un entusiasmo, una energía, una fuerza a hacer las cosas únicas. Y yo creo que eso es lo que va a distinguir a La ruta de la Patagonia, no solamente porque es el último programa que él hizo, sino que en el fondo, es cómo vibra con lo que está haciendo. Y en ese sentido, a nosotros como familia nos interesa mostrarle a los demás su último trabajo”.