Grupo Taller de Estocolmo: la historia de los escritores chilenos que llegaron a Suecia tras el golpe de Estado
Cinco fueron los integrantes de este conjunto literario que, en tierras escandinavas, apostaban por la difusión de las letras chilenas y latinoamericanas. De ellos, tres están con vida y siguen el camino literario.
Escritores de todas partes de Chile fueron exiliados —o se autoexiliaron—tras el golpe de Estado de 1973. Sus respectivas militancias políticas, sus círculos íntimos o las temáticas de sus textos los volvían blanco de la persecución de la dictadura de Augusto Pinochet.
Ese fue el caso de un conjunto de autores que llegó a Suecia. Se trató del Grupo Taller de Estocolmo, un colectivo fundado en 1977 que se encargó de mantener vivas las raíces chilenas y latinoamericanas, con el apoyo de renombrados creadores escandinavos, como la escritora sueca Sun Axelsson, quien fue un nexo crucial entre los chilenos y la escena literaria de ese país.
La llegada a Suecia
Sergio Infante tenía 20 años cuando publicó su primer poemario, titulado Abismos grises (1971). Estudiaba en la Escuela de Bellas Artes, entorno en el que desarrolló una intensa vida cultural en Santiago. Sin embargo, debido al contexto político y social de la época, pausó sus estudios y se mudó a la isla de Chiloé, al sur de Chile. Como era militante del Movimiento de Izquierda Revolucionario (MIR), se fue a Argentina y luego, en 1975, viajó junto a su esposa como refugiado político a Suecia.
“Es un golpe muy duro porque te arrancan de tu mundo y te tiran adonde tengas la suerte de caer. Se te desmoronan los referentes. Eso se hace más duro aún cuando se le suma la culpabilidad por haber sobrevivido y por haber desertado de la lucha, aunque se sepa que no había más alternativa”, dijo Infante en 2004, en el artículo Desde la otra orilla, de Virginia Vidal.
En 1977, su camino se cruzó con el de Adrián Santini— seudónimo de Héctor Areyuna—, escritor oriundo de La Serena; y con el camino de Carlos Geywitz. Este último cursaba estudios de sociología en la Universidad de Concepción cuando fue el golpe de Estado, que cerró el Instituto de Sociología. A raíz de eso, viajó a Alemania y luego llegó a Suecia.
Así nació el flamante Grupo Taller de Estocolmo, al que se sumaron después los escritores Eduardo Mardones Iribarren y Sergio Badilla Castillo.
Un segmento importante de las primeras obras de los cinco integrantes del grupo surgieron en esta etapa de creatividad conjunta, tales como: Sobre exilios de Sergio Infante, Después del centauro de Adrián Santini, El ojo de la ira de Carlos Geywitz, La morada del signo de Sergio Badilla Castillo o Caperucita esperando al lobo de Edgardo Mardones.
A finales de la década de los ochenta, el grupo se disolvió con el retorno de Badilla y Mardones a Chile y las actividades académicas y docentes de Infante y Santini.
La obra de los escritores
Dos de los integrantes del Grupo Taller de Estocolmo fallecieron.
Carlos Geywitz se suicidó a los 59 años, en 2008. Hoy, 22 de agosto, hubiera cumplido 76 años.
Durante su carrera, Geywitz participó en diferentes encuentros literarios en Chile y Suecia, entre ellos el Festival Internacional de Poesía La reconstrucción del tiempo, organizado por el poeta Sergio Badilla Castillo y la escritora Sun Axelsson en Estocolmo, y el encuentro poético Región XIV patrocinado por la organización Chile-Poesía, en Santiago de Chile, en 2005. Dentro de sus obras están El ojo privado de la ira (1982), Distancias (1990) y Años de Asedio (2004).
Ocho años más tarde falleció Andrés Santini, el 24 de agosto de 2016. Estudió literatura comparada en la Universidad de Estocolmo y se doctoró en filología española por la misma universidad. En sus posgrados, se dedicó a estudiar casi con exclusividad la obra del chileno José Donoso.
“Nunca le ha visto la cara. Sólo unas llamadas telefónicas lo han puesto en contacto con el escritor al que le ha dedicado casi todos sus años como académico de la Universidad de Estocolmo (...) Su tiempo para Donoso ha sido de jornada casi completa”, escribió Verónica San Juan en 1994 para La Nación. En ese año, el escritor volvió a La Serena, su ciudad natal, para participar en encuentros de difusión de su trabajo literario.
En cuanto a Sergio Infante, de acuerdo a Editorial Catalonia, es Doctor en Literaturas Hispánicas por la Universidad de Estocolmo y se desempeña como profesor titular del Departamento de Español, Portugués y Estudios Latinoamericanos de esa universidad. Ha publicado los siguientes libros: Abismos Grises (Santiago de Chile, 1967), Sobre Exilios/ Om Exilen (Estocolmo, 1979), Retrato de época (Estocolmo, 1982), El amor de los parias (Santiago de Chile, 1990) y La del alba sería (Santiago de Chile, 2002).
Es hermano mayor del editor Arturo Infante, quien en 2003 fundó Catalonia. Además, es tío de la escritora chilena Catalina Infante.
Sergio Badilla Castillo estudió periodismo en la Universidad de Chile de Valparaíso, entre los años 1968 y 1972, y posteriormente Antropología Social en la Universidad de Estocolmo. En Suecia, además de formar parte del Grupo Taller de Estocolmo, fundó las revistas Polo Norte y Pasión y organizó el primer Festival Latinoamericano de Poesía: La reconstrucción del tiempo, que se desarrolló en la Universidad de Estocolmo y en el Moderna Museet (Museo de Arte Moderno).
En cuanto a Edgardo Mardones Iribarren, es Director Editorial en Editorial Signo.
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