Los ejes de Agatha: En Todas Partes, la apuesta de Marvel por las brujas

Emitidos cuatro capítulos (en Disney+), hay unas cuantas conclusiones que se pueden extraer de Agatha: En todas partes. Apoyada en una estructura televisiva de la vieja usanza –es episódica, no una historia estirada por varias horas–, descansa en la química de su elenco, no tiene miedo de poner a sus personajes en situaciones peligrosas, y conjuga la comedia, el horror y la fantasía con desparpajo.

Su principal responsable es Jac Schaeffer. Tras crear WandaVision, la serie estrenada en 2021 con Elizabeth Olsen y Paul Bettany en los roles principales, la guionista decidió proponerle a los jefes de Marvel Studios hacer un spin-off centrado en la vecina interpretada por Kathryn Hahn, la bruja Agatha Harkness.

Si la anterior producción transcurrió en torno a las distintas épocas de las sitcoms familiares, Agatha: En todas partes propone un homenaje a las brujas en la cultura popular, a partir del viaje que la protagonista emprende junto a un joven llamado Teen (Joe Locke) y un grupo de hechiceras por el legendario Sendero de las Brujas, un mundo jamás explorada en el llamado MCU.

“Cuando empecé a pensar en la serie de Agatha, la idea era que ella tendría que asociarse con alguien o ser parte de algún tipo de equipo. Las primeras ideas no eran que sería un aquelarre, sino quiénes serían los integrantes (del grupo). Eso pasó por un par de iteraciones diferentes, y luego decidimos crear un aquelarre completamente nuevo con estos personajes”, explica Schaeffer a Culto.

Y agrega: “Este es el viaje de Agatha, pero está dentro del universo de WandaVision, por lo que sabíamos que queríamos volver a Westview. Allí es donde la dejaron. Entonces, eso significa que vamos a ver a algunos de los residentes de esa ciudad”.

La forma que adoptó el primer episodio jugó con las expectativas de los espectadores. Titulado Seekest thou the road (Buscas el sendero), mostró a Agatha como Agnes O’Connor, una detective a cargo del caso de homicidio de una mujer cuya identidad se desconoce. Estética y narrativamente la guionista pensó esa introducción como un tributo a Mare of Easttown y otras elogiadas series policiales con protagonistas femeninas.

En vez de extender esa lógica durante una porción mayoritaria de la historia –como hizo WandaVision con las sitcoms–, al final del capítulo se reveló que esa realidad experimentada por la protagonista tenía su origen en el hechizo al que la había sido sometida por Wanda. Y es en la segunda entrega que se revela la verdadera trama de la ficción. La realizadora admite que sintió nervios por la respuesta que podía generar esa decisión.

“Lo que fue desafiante fue: ¿cómo hacemos ese tipo de cosas como en WandaVision, pero de una manera nueva? Creo que creativamente lo que sentí como la mayor apuesta fue el episodio piloto, que en sí mismo es un drama procesual. Luego tomé la decisión de que al final lo abandonaríamos, que lo destrozaríamos, que nos escaparíamos de él, y que en verdad el segundo episodio sería el piloto real de la serie”, detalla.

“Bajar el telón en el segundo episodio y decir: aquí es donde estamos. Eso fue un riesgo. Pero sabía que con esta serie teníamos que ser diferentes”, agrega.

Cualquier espectador familiarizado con la presencia de brujas en la cultura popencontrará referencias a títulos como El mago de Oz (1939) y Las brujas de Eastwick (1987). También, en una capa más inquietante, hay alusiones a El exorcista (1973), Suspiria (1977) y Poltergeist (1982). Y no faltan las conexiones con éxitos ochenteros tipo Los Goonies (1985) y La princesa prometida (1987). “Son un montón de cosas dispares que queríamos reunir para la aventura de la serie”, señala.

Aunque esos recursos y otras sorpresas pueden divertir al público, lo central para Schaeffer era descubrir quién era la persona que estaba detrás de la protagonista, un personaje que parece esconder mucho más de lo que ha estado dispuesta a compartir con el mundo hasta ahora.

“Ella es una mentirosa, es una intérprete, siempre usa máscaras, por lo que para mí el principal misterio de la serie, más allá de quiénes son estos otros personajes y ese tipo de misterio del MCU, era: ¿quién es ella debajo de todo? ¿Cuál es su verdad? Ese fue el trabajo durante el desarrollo y luego eso es lo que intentamos desplegar dentro de la serie”.

Los sucesos de WandaVision condujeron a las películas Doctor Strange en el multiverso de la locura (2022) y The Marvels (2023). ¿Qué impacto tendrán los acontecimientos de Agatha: En todas partes en el futuro de la saga? Schaeffer se niega a responder esa pregunta directamente, porque escapa su poder de decisión.

“Bueno, no lo sé”, indica. “Tengo la suerte de poder llamar a esta mi serie. Y más allá de eso, espero volver a verla (a Agatha)”.