El obituario es parte del protocolo funerario mediante el cual la familia y amigos rinden un último homenaje al fallecido. Son textos breves en los que se expresa el aprecio y cariño de sus seres queridos. Según la costumbre tradicional, los obituarios se publican en la sección necrológica de los periódicos, con el objetivo de hacer público este homenaje.
A partir de esta noción surge la instalación “Obituario” del artista Rodrigo Bruna, académico de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile quien impulsa esta novedosa muestra, que se presentará en el marco del 10° Foro de las Artes, el encuentro de creación artística más importnte de la Casa de Bello. Según su autor, esta intervención “busca proponer una reflexión en torno a la muerte y los rituales funerarios, a partir de los cuerpos de personas fallecidas no identificadas”.
“Estos son cuerpos de hombres y mujeres a los que la sociedad despoja de sus historias de vida, privándolos de un ritual funerario que los dignifique e identifique. Reflexionar sobre estos cuerpos borrados se transforma en un ejercicio indagatorio que potencia el diálogo en torno a los temas abordados con esta instalación”, comentó Bruna.
De esta manera, “Obituario” se emplazará en el Pabellón de Anatomía Norte del Instituto de Anatomía y Medicina Legal de la Universidad de Chile. El Dr. Julio Cárdenas, director del Departamento de Anatomía y Medicina Legal de la Universidad de Chile, comentó:
“Abrir este espacio a la expresión cultural y artística, y extenderlo a otras disciplinas, es algo que hemos estado potenciando porque nos abre otras miradas respecto a la anatomía. El desarrollo de estas actividades nos aporta, a quienes trabajamos con personas, a no caer en una suerte de deshumanización debido a la inercia, y relevar la reflexión en torno a la importancia de mantener el respeto por el cuerpo, a través de una visión multidimensional”.
Por su parte, la curadora del proyecto artístico, historiadora del arte y museóloga, Carla Miranda Vasconcello expresó que “traer el cuerpo y la muerte a la sociedad actual es algo muy complejo, y creemos que a través del arte se abre la posibilidad de reflexionar sobre este tema que es un tabú en la sociedad actual, profundamente superficial, donde el presente pareciera nunca acabar”.
“El arte permite hacer esa reflexión, por ejemplo haciendo el contrapunto con el Barroco que fue un momento de la historia donde la muerte estaba muy presente, en el arte, en la pintura, en los muebles, etcétera. Era una sociedad que tenía muy presente la muerte, a diferencia de la actual, entonces el arte es fundamental para esta reflexión”, sostuvo.
La anatomía a través de la fotografía, la música y el urbanismo
Esta instalación de carácter efímero está compuesta por fotografías extraídas de un álbum funerario personal, las cuales son modificadas en su encuadre, contraste y enfoque. Junto a estas se exhibirán imágenes que imitan a los textos presentes en los obituarios. Las fotografías son enmarcadas en cajas de madera negra y dispuestas alternadamente sobre las camillas del pabellón, emulando la estructura de una lápida.
De igual forma la instalación considera una pieza sonora creada a partir de un segmento del Réquiem de Mozart, específicamente la sección titulada Lacrimosa. La sonoridad de esta pieza es aislada de las voces y modificada en su interpretación. Como una forma de completar la pieza, se exhibirá un video realizado a partir de la letra de esta sección del réquiem, que será emitido por los monitores presentes en el pabellón.
Parte fundamental del trabajo son las dos jornadas de mediación que serán realizadas durante los días de exhibición. A través de esta instancia se busca contextualizar la pieza a partir de un diálogo abierto que sitúe las preguntas formuladas con la instalación. Esta labor será coordinada por la curadora del proyecto, Carla Miranda Vasconcello.
Las visitas guiadas permitirán, por ejemplo, ampliar la concepción que los y las asistentes puedan tener acerca de los espacios físicos que tiene la muerte en la ciudad de Santiago. “Es importante resaltar la ubicación donde están el Instituto Médico Legal, el Cementerio General y el Instituto de Anatomía. Esta organización del espacio, diseñada por Benjamín Vicuña Mackenna, tiene que ver también con un modelo de ciudad que deja ad portas a la muerte. La ciudad en su ordenación, instala el ritual mortuorio en esta zona de Independencia, que está en las afueras de la ciudad”, comentó Miranda.
La pieza será exhibida el viernes 25 de octubre entre las 18:00 y las 20:00 horas y el sábado 26 de octubre entre las 11:00 y las 13:00 horas, en el Pabellón de Anatomía del Departamento de Anatomía y Medicina Legal, Facultad de Medicina, Profesor Zañartu 1130, Independencia. Para inscribirse a las jornadas de mediación se sugiere inscribirse en el formulario.
El proyecto “Pulvis et Umbra”
A través de “Obituario” se da continuidad a las reflexiones iniciadas con el proyecto “Pulvis et Umbra: Sepelio”, una serie de trabajos del mismo artista que reflexionan sobre la muerte, sus rituales y espacios. La primera parte de este proyecto se realizó gracias al apoyo de la Dirección de Creación Artística de la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo de la Universidad de Chile a través del Fondo U-CreArt, convocatoria 2022.
Actualmente se realiza la segunda parte gracias a la adjudicación de un Fondart Nacional de Creación Artística, convocatoria 2024. Esta nueva etapa considera la realización de tres instalaciones site specific en el Cementerio General durante el primer semestre del año 2025. De igual forma se publicará un libro que incorporará material de archivo, textos y los registros de las obras realizadas.
Rodrigo Bruna es artista visual, académico e investigador. Doctor en Artes Visuales, Pontificia Universidad Católica de Chile. Doctor en Historia del Arte, Universidad Autónoma de Barcelona. Magíster en Artes Visuales, Universidad de Chile. Actualmente es académico asociado de la Facultad de Artes, Departamento de Teatro, Universidad de Chile.