Si se trata de desilusiones, Daniel Espinosa (1977) conoce el terreno. El director de cine nacido en Santiago apenas estuvo un par de meses en Chile, luego que sus padres salieran exiliados durante el gobierno de Pinochet. Escasamente conoció su lugar de origen por lo que la imagen de su tierra natal adopta antes que nada ribetes políticos. Hoy, radicado en Suecia, tiene la intención de filmar en el país una cinta sobre el derrocamiento de Salvador Allende y otra sobre el asesinato de Orlando Letelier. Quiere revisar ese período oscuro que tan pequeño lo hizo emigrar.

Con una rápida y fulminante trayectoria cinematográfica en Suecia, Espinosa estrenó este año su primera película en Hollywood, Protegiendo al enemigo (Safe House), un thriller de acción protagonizado por Denzel Washington, que llega el próximo jueves a salas nacionales.

El actor norteamericano, quien ganó un Oscar por encarnar a un corrupto agente antinarcóticos en Día de entrenamiento, también oficia como productor de la cinta. "Para mí era importante sentir que no estaba con mi jefe, de lo contrario no podía dirigir la película. El conocía mi trabajo y le gustaba, pero igual tenía cierta incertidumbre. Después de dos meses de sentarnos a escribir el guion nos hicimos compadres. En ese período peleamos, discutimos ideas, pero siempre cuidando separar los roles de director y actor", cuenta Espinosa a La Tercera.

La cinta es una historia de corrupción y traición al interior de la CIA. Sigue al joven agente CIA Matt Weston (Ryan Reynolds), quien está a cargo (y aburrido) de una "casa segura" (piso franco) en Ciudad del Cabo, Sudáfrica. La crisis y el desencanto por su profesión aparecen con la llegada de Tobin Frost (Washington), un renegado ex funcionario de inteligencia que, en el último tiempo, vende información. Una espiral de violencia y muertes revelarán al novato la verdadera cara detrás del mundo corporativo.

"Me gustó la idea de la corrupción en la CIA. Mi padre es chileno refugiado, entonces las críticas hacia esa institución las podía sentir cercanas. Quería hacer una película comercial, pero al mismo tiempo que tratara de hablar de los actos terribles que esa gente hace. Y cómo tu ética, por medio de estos actos, se va destruyendo", explica.

Hollywood, casa segura

Su particular acento español deriva de 15 años de infancia en Mozambique, sumados a una difícil adolescencia en Suecia. Solía armar pleitos en las calles, por lo que fue trasladado a un internado en Estocolmo, donde desarrolló el gusto por las artes. En la escuela compartió dormitorio con el hijo del cineasta sueco Lasse Hallström (Las reglas de la vida, 1999), director que gatilló en Espinosa la fascinación por hacer cine.

Una vez graduado del colegio, partió a estudiar a la National Film School de Dinamarca, cuna de Lars von Trier y el cine experimental danés. Sus primeros trabajos, el cortometraje The fighter (2003) y las cintas Babylon desease (2004) y Outside love (2007), de corte más experimental, lo insertaron dentro del circuito festivalero europeo. El giro y el salto internacional vino con Dinero fácil (Snabba Cash, 2010).

Adaptación del bestseller de Jens Lapidus, la cinta sondeaba tres lados de la vida criminal sueca, valiéndose de un montaje frenético. La producción destronó a Avatar de la taquilla en ese país y puso a Espinosa en la mira de los productores estadounidenses. "Trabajé Dinero fácil con un ritmo más rápido que mi cintas anteriores. Esa tensión yankee de la película llamó la atención. Entonces cuando llegué a EE.UU. me mandaron como cinco guiones de acción para que escogiera", afirma Espinosa. Este filme se estrenará este año en Estados Unidos y ya se planea un remake, que protagonizaría Zac Efron.

Protegiendo al enemigo, que arribó a salas estadounidenses el 10 de febrero, debió sortear la principal barrera impuesta en Hollywood para un principiante: la incierta taquilla. Y logró traspasarla con creces: el primer largometraje en inglés de Espinosa recaudó 125 millones de dólares en EE.UU. y US$ 197 millones en el resto del mundo, superando ampliamente los US$ 85 millones de su presupuesto.

Gracias a su exitoso debut, Espinosa ya tiene en carpeta un nuevo proyecto, The outsider, otro thriller de acción, situado durante la Segunda Guerra Mundial. El filme cuenta la historia de un prisionero de guerra norteamericano retenido en Osaka, obligado a trabajar para la Yakuza. Warner Bros., el estudio detrás del filme, habría fichado al inglés Michael Fassbender (Shame) protagónico.