El asesinato de Francisco Figueroa Muñoz, el domingo en Rancagua, sacudió a todo el entorno de la Garra Barra, en especial, porque el episodio vino a engrosar la amplia lista de problemas originados durante el último año por la barra brava del "Cacique", los que incluyen desde las amenazas contra Carlos Muñoz y el apuñalamiento del malogrado hincha en la Sexta Región.
Hasta ahora la línea investigativa del ataque contra el barrista asesinado da cuenta de la existencia de varias facciones disidentes al liderazgo de Francisco José Muñoz Carrasco (32 años), alias "Pancho Malo", cuya figura se asocia a los problemas generados por los fanáticos.
En paralelo a los hechos acaecidos en Rancagua, el cabecilla de la "Garra Blanca" ha debido sortear duros momentos, los que han alterado sus actividades cotidianas.
"El 'Pancho' tiene temor de salir a la calle por todo lo que se dice de él en la prensa. Su vida hoy no es tranquila, debido a que hace cinco meses se convirtió en un personaje de interés nacional", confiesa un cercano a Muñoz, quien en los últimos días ha disminuido las visitas a la casa de sus padres, en la comuna de Providencia.
El departamento familiar del barrista está ubicado en el "Barrio de los Obispos". Ahí, "Pancho Malo" concurrió durante la última semana.
Vecinos aseguran que el martes, 48 horas después del asesinato de Francisco Figueroa, "Pancho Malo" se reunió con una decena de amigos en la plaza del sector. "Antes del fallecimiento del hincha se veía más seguido por acá, ahora apenas se deja ver", relata un cuidador de autos del lugar.
La imagen de conflictivo que proyecta el líder de la "Garra Blanca" contrasta con la versión que entregan algunos cercanos al barrio que habitan sus progenitores. "Es un tipo tranquilo que nunca ha dado un problema por acá, salvo en la ocasión en que lo intentaron balear (2007). Las cosas malas que dicen de él sólo las conocemos por la prensa".
Lo anterior refrenda el perfil de Muñoz, quien en 1992 tuvo sus primeros acercamientos con la hinchada del "Cacique", la que encabeza desde 2005.
Antes de ello, debió lidiar con el cartel de "cuico" que le endosaban sus detractores, debido a que vivía en Providencia y no hablaba como la mayoría de los garreros, características que se sumaron a su admiración por la figura de Augusto Pinochet. Una ideología que lo llevó a participar activamente en la Fundación, en medio de la detención del ex gobernante en 1998. Por esos días, "Pancho Malo" compartía su color político con varios cabecillas de la hinchada de Universidad de Chile, entre ellos, Manuel Varela,"Mono Ale", y Gonzalo García, el "Beto", situación que también le trajo varios problemas al interior de la barra colocolina.
La vida de Muñoz incluye desde un paso por las aulas universitarias, en donde cursó cinco semestres de Ingeniería Mecánica, hasta su presunta participación en un confuso homicidio en el año 2000, hecho que no generó cargos en su contra.
El miércoles 18 de julio, mientras las redes sociales daban cuenta de un ataque contra "Pancho Malo", el barrista tomaba once junto a sus padres en Providencia.
Los últimos sucesos de violencia protagonizados por la parcialidad colocolina alteraron la rutina de Muñoz, quien pese a comunicar públicamente su alejamiento de la barra hace algunas semanas, sigue realizando gestiones que ratifican su liderazgo.
Una de ellas sucedió en Rancagua, la semana previa al partido entre O'Higgins y Colo Colo. Ahí, Muñoz reunió a varios hinchas albos para incentivar la captación de socios en su anhelo de aumentar la oposición al directorio de Blanco y Negro.
La comunicación con los hinchas colocolinos de regiones ha sido habitual durante los últimos meses. En dichos encuentros, el barrista ha manifestado sus aprensiones frente al hostigamiento que siente en su contra.
"El (Pancho Malo) sabe que debe cuidarse. Nos advirtió que nos seguirá llamando de diversos teléfonos, ya que teme que su celular sea intervenido, como en la investigación por las amenazas contra Carlos Muñoz", cuentan cercanos.
Su entorno tampoco descarta la posibilidad de que se aleje algunos días de Santiago en busca de tranquilidad. La casa familiar de Valparaíso asoma como una opción importante.
"Hasta ahora no ha recibido ninguna notificación de la fiscalía o el Ministerio Público. 'Pancho' tiene muy claro que no tuvo nada que ver en el asesinato del hincha en Rancagua. Cualquier vinculación responde a la especulación de la prensa, la intendencia y Estadio Seguro. Es cierto que ha pensado en querellarse por todas las cosas que se le achacan, pero no lo va a hacer, porque sabe que no obtendría resultados", destaca un allegado a Muñoz.
"Pancho Malo", al igual que 2.281 integrantes de la "Garra Blanca", no podrá ingresar mañana al Estadio Monumental para el duelo entre Colo Colo y Cobresal.
El barrista, sin embargo, hace meses que tiene el acceso restringido en Macul, recinto que visitó por última vez en el clásico entre los albos y Universidad Católica jugado en abril.
Lo anterior se sumó al desalojo del container que poseía la barra al interior del estadio, hecho que terminó con los habituales paseos del auto deportivo negro de "Pancho Malo" en Pedreros.
El cuestionado fanático se desplaza hoy para todos lados junto a tres amigos: Hernán Osses (alias "El Nani"), Reinaldo Contreras ("Tío Toño") y Osvaldo Rojas, más conocido como "El Chino Osvaldo", quienes representan el "círculo de hierro" de Muñoz.
Así transcurren los días del barrista más conocido de Colo Colo. El mismo que sigue sumando detractores que buscan arrebatarle el poder dentro de la "Garra Blanca" y que cada día está más lejos de sus costumbres.