Señor director:
Estamos ad portas de una nueva reforma mal planteada y diseñada, que el gobierno busca sacar adelante contra el tiempo.
La elección de intendentes debiera evaluarse una vez que se cuente con una institucionalidad regional madura y bien implementada. El gobierno no ha avanzado al respecto y ahora contra el tiempo busca sacar adelante esta reforma constitucional. Si el gobierno responsablemente hubiese en estos años avanzado en reformas que realmente doten a las regiones de autonomía respecto del gobierno central en materia de recursos y competencias, sería responsable discutir la conveniencia de contar con autoridades regionales electas. De aprobarse la reforma constitucional, terminaremos con autoridades regionales electas, y en lo inmediato sin recursos, competencias ni atribuciones.
Ello aumentará la conflictividad entre el nivel regional y el central, situación que en nada ayuda a emprender una reforma realmente descentralizadora. Primero se requiere diseñar e implementar una reforma institucional que permita contar con gobiernos regionales fuertes y autónomos respecto del central. Sólo después de eso es prudente hablar de elecciones regionales.
Bettina Horst
Libertad y Desarrollo