Carabineros desactivó ayer una bomba en las escalinatas del Club de la Unión, en Santiago. Mientras el trabajo de identificación de los autores recién comienza, el ex fiscal del caso bombas, Alejandro Peña, prestaba durante la tarde declaración ante la comisión de la Cámara de Diputados que busca establecer responsabilidades políticas tras la absolución de todos los acusados llevados a juicio.
El actual jefe de la División de Estudios del Ministerio del Interior fue requerido por su participación en la investigación y para hacer frente a los cuestionamientos surgidos luego de que renunciara a su cargo para integrarse a trabajar en el gobierno.
"He sido vilipendiado (...), que soy autor de un montaje, que me coludí con el ministro del Interior y después me fui a trabajar con él. Denostando toda una trayectoria profesional y de buena fe", dijo. Agregó al respecto que "incluso la defensa (de los acusados) me ofreció como testigo (en el juicio oral). Tuvieron la oportunidad de sentarme en un tribunal frente a tres jueces bajo juramento y preguntarme: '¿Cómo es el montaje?'. No se atrevieron".
El diputado Felipe Harboe (PPD) manifestó preocupación por que en Chile aún no existan responsables a nivel penal de la colocación de bombas, y le consultó al ex fiscal si él creía que hubo "falta de acuciosidad o si tenía críticas respecto de los jueces". Peña dijo que no se puede hablar de un fracaso del caso. Recordó que, durante la preparación del juicio, el juez de garantía Luis Avilés excluyó numerosa evidencia, considerada de primera importancia por la fiscalía. Al respecto, dijo que en la investigación de delitos terroristas "la prueba indiciaria es vital, y si van desmoronando esta evidencia, por supuesto que (el caso) va a quedar incompleto".
El ex fiscal señaló que es necesario modificar la Ley Antiterrorista y agregó que "obtener prueba directa en este tipo de ilícito es realmente imposible".
En este sentido, recordó el juicio contra Luciano Pitronello, asegurando que "en un hecho público y notorio, donde se obtuvo prueba directa, el imputado está en su casa con libertad vigilada".
"Voz de alerta"
El ex fiscal negó haber pedido la detención de los sospechosos con las mismas evidencias que obtuvo el fiscal regional Oriente Xavier Armendáriz, quien estuvo a la cabeza del caso durante un año y medio, hasta que el fiscal nacional, Sabas Chahuán, decidiera nombrar a Peña en su lugar, en 2010.
El diputado DC René Saffirio le preguntó. "¿Cómo el fiscal regional de la zona sur entra en conversaciones laborales con un querellante (el Ministerio del Interior)?". Al respecto, Peña respondió que "nunca conversé de actividades laborales con el ministro del Interior". Además, aseguró que cuando esa cartera se hace parte como querellante en un caso judicial, "abandona el color político del gobierno de turno". Junto con ello, indicó que con la única autoridad con la que habló de su paso al gobierno fue con el subsecretario Rodrigo Ubilla. "No fue una negociación, sino que el ofrecimiento de un desafío profesional".
Al término de la comisión, el diputado René Alinco, presidente de la instancia, expresó que tras la declaración "quedó claro que la relación entre el señor Peña con el gobierno comenzó siendo fiscal en ejercicio del caso bombas".