Una nueva infraestructura de 4.331 metros cuadrados tendrá la tradicional feria Yumbel de Castro, la capital de Chiloé. Este es un típico lugar de encuentro para chilotes y turistas y se caracteriza por la llegada de mujeres desde las distintas islas del archipiélago a vender productos como papas, milcaos, chicha, mariscos y todo tipo de verduras cada fin de semana.

Para concretar esta obra, que considera la construcción de 350 puestos para pescaderías, chacarerías, verdulerías, feria libre campesina y de vestuario; el gobierno regional de Los Lagos destinó $ 3.250 millones.

El objetivo no sólo es generar un mejor espacio para la comercialización de productos típicos, sino también entregar una obra emblemática con una arquitectura que rescate la identidad cultural de Chiloé.

Visitar esta tradicional feria es parte del paseo de turistas, principalmente en verano. Allí se pueden encontrar todos los días tejidos, lanas y todo tipo de confecciones chilotas. Pero en mayor medida es posible comprar mariscos, quesos y comidas típicas.

El actual recinto será demolido y se reemplazará por un nuevo edificio, cuya construcción debería comenzar después del verano, una vez que finalicen los trámites administrativos para que los fondos sean traspasados a la Municipalidad de Castro, según explicó el alcalde Nelson Aguila.

El jefe comunal destacó que las nuevas instalaciones tendrán dos pisos, cocinerías, más locales, mejor iluminación y plazas interiores.

Para los locatarios es un proyecto "importante, que trabajamos en conjunto con el municipio", acotó Héctor Barría, director del sindicato de pescaderías de la feria Yumbel. El dirigente señaló que los cuatro sindicatos que hay en el recinto están trabajando para buscar un lugar donde instalarse mientras se ejecuten las obras, que tendrán una duración aproximada de un año.