NO TODOS LOS proveedores de arte piensan que el físico masculino recibe la atención que se merece. Exposiciones como la muestra de Sascha Schneider, en el Museo de Arte Gay y Lésbico Leslie Lohman, han destacado la importancia del desnudo masculino y su relación con la historia; pero otras, incluyendo la reciente retrospectiva Masculino/Masculino, en el Museo d' Orsay, han provocado la pregunta: "¿Por qué nunca antes hubo una exposición dedicada al desnudo masculino hasta ahora?". La respuesta: a diferencia de los cuerpos femeninos, que supuestamente son misteriosos y llenos de secretos, los cuerpos masculinos son aburridos, o al menos se lOs presenta de esa forma. Un nuevo libro, Universal Hunks: A Pictoral History of Muscular Men Around the World, 1895-1975 (Galanes Universales: una historia pictórica de hombres musculosos en el mundo, 1895-1975), ofrece una perspectiva más amplia.

En Hunks, los autores David L. Chapman y Douglas Brown rastrean los orígenes de la figura masculina, esculpida, casi o completamente desnuda, a lo largo del mundo. Su viaje se inicia en Europa, con el "físico culturista" anglo-alemán Eugen Sandow, y termina en Sudamérica con una fotografía de Cementos Hércules, no porque Occidente sea la fuente de toda identidad o idealización masculina, sino porque en su momento fue un gran exportador de esos conceptos. El "cuerpo masculino fue un factor destacado en la construcción de las identidades nacionales modernas", escriben Chapman y Brown, y a medida que las potencias imperiales de la época difundían sus propios estándares religiosos y sociopolíticos, también se esforzaron por dar forma a los cuerpos reales de las personas con las que se encontraban.

Sin embargo, el intercambio (o reemplazo) no fue tan sencillo.

En la India, el evangelio sobre la fuerza personal de Sandow se mezcló con el nacionalismo y la independencia. En Senegal, en donde la lucha libre tiene su propia tradición, que precede a la influencia europea, las fotos de guerreros lo que hacen es resaltar los intereses coloniales de los fotógrafos. Y en Estados Unidos, y otros lugares, los modelos que posaban en revistas para hombres celebraban la salud y bienestar físicos, pero también eran pin-ups para los consumidores de la subcultura gay. Todas estas fotos generan una visión sincrética sobre los entusiastas del cuerpo que revela las formas por las cuales los hombres musculosos son algo más que el típico aficionado a los gimnasios, sino que también pueden ser embajadores culturales.

Las siguientes fotos y pasajes son extractos del libro.

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Foto 1: A principios del siglo XX, Eugen Sandow era conocido por ser el más perfecto ejemplo de la figura humana masculina, como se evidencia por haber sido presentado en el Baillière's Popular Atlas of the Anatomy and Physiology of the Male Human Body (Londres, 1908). Se trata de la cara y la piel exterior del hombre fuerte, pero varias páginas desplegables también revelan las estructuras dentro de su cuerpo musculoso.

Foto 2: Los atletas generalmente usan linimentos para darse masajes en los músculos doloridos, y esta tarjeta publicitaria troquelada es uno de lOs mejores. Muestra a un boxeador negro levantando una pesa con un brazo, pero como el tema es acompañado por un remache en el centro, la figura puede moverse hacia atrás y adelante. Linimentos Dr. Will promete convertir a cualquier persona en un ser olímpico si los utiliza a diario. Este anuncio articulado fue realizado a principios del siglo XX, cuando muchos boxeadores afroamericanos eran populares en París.

Foto 3: Desde 1946 a 1969, Garsou Henri (1914-1969) dirigió la revista Muscles, desde su casa en la soñolienta aldea belga de Andrimont. En esta portada de la edición de octubre/noviembre de 1959 figuran dos modelos que demuestran uno de los lemas favoritos de Garsou: "El hombre feliz no usa camisa". La revista pretendía fomentar el físico-culturismo, pero indudablemente su verdadero público objetivo era la subcultura gay de la posguerra, que se sentía atraída por las fotos.

Foto 4: En esta vista estereoscópica de 1904, dos luchadores de Dahomey (hoy Benín) supuestamente combaten por una novia. El interés de Occidente por ese país africano hasta entonces poco conocido aumentó en 1903, debido a una exitosa obra de Broadway llamada En Dahomey, lo que provocó que muchos corrieran a sus mapas para encontrarlo.

Foto 5: Un africano que comerció con sus atractivos físicos fue Benga Feral (1906-1957), quien aparece aquí en una revista francesa de 1934. Se decía que él era hijo ilegítimo de un hombre rico de Dakar, Senegal. Fue bailarín y modelo en París desde los años 20 hasta los 40 y fue fotografiado y lisonjeado por casi todos los artistas gay en Francia y en Nueva York (allí había un montón de ellos). George Platt Lynes y Carl Van Vechten lo retrataron, James Richmond Barthé hizo una escultura de él, fue pintado por Pavel Tchelitchev y apareció en la película de Jean Cocteau Le Sang d'un Poète (La sangre de un poeta, 1930).

Foto 6: Shanghái siempre ha sido una ciudad muy cosmopolita, y en el verano de 1946, cuando un grupo de hombres del Instituto de Cultura Física Stembera posó para esta foto, no se consideraba inusual que chinos y occidentales se unieran en una organización social y deportiva. Hacia 1949, sin embargo, todo esto sería un recuerdo, cuando las fuerzas comunistas marcharon por el Bund, persiguieron a los extranjeros y eliminaron todos esos clubes.

Foto 7: La revista británica Superman fue publicada por primera vez en octubre de 1930. Siempre contaba con una portada de colores, que mostraba la imagen de un hombre poderosamente musculoso. En marzo de 1939, el retrato de Ramesh S. Balsekar (1917-2009) apareció en la portada. Balsekar fue una figura extraordinaria: asistió a la London School of Economics, se convirtió en el presidente del Bank of India y saltó a la fama como gurú de la filosofía hindú del Advaita.

Foto 8: Sería muy difícil inventar un personaje más colorido que Rafael Halpern (1924-2011), un conocido emprendedor israelí, rabino ortodoxo y, en ocasiones, político. También fue un excelente culturista y luchador profesional, que peleó mucho en América del Norte y Europa. Después de retirarse del ring, Halpern abrió varios negocios en Israel e incluso inventó una tarjeta de crédito que no funcionaba en el Sabbath judío. El fotógrafo francés Arax tomó esta foto de Halpern en 1948, tenía 24 años e Israel acababa de nacer.

Foto 9: Karoll Studios, en La Habana, fue uno de los pioneros en la fotografía de físico culturismo en América Latina. Karoll era Luis Cuento ( 1925? -79), quien operaba un estudio fotográfico en las décadas del 40 y 50, especializado en retratos de hombres de negocios. La otra cara de su arte era la fotografía de jóvenes musculosos. Las fuentes dicen que fue detenido poco después de la revolución de 1959, debido a la naturaleza homo-erótica de algunas de sus fotografías. Pero de acuerdo con los familiares de Cuento, murió en 1979, después de una larga lucha con la enfermedad de Alzheimer. El trabajo de Karoll recién se ha hecho conocido fuera de Cuba. Las fotos de arriba muestran que fue un maestro del claroscuro. Aunque no se sabe quiénes estaban en la foto grupal, probablemente representa a un club de pesas, de la etapa prerrevolucionaria.

Foto 10: Fósforo Ferrero era un suplemento dietético de fósforo que se suponía hacía más inteligentes, más vivas y más agradables a las personas. Esta postal, enviada desde Argentina en 1955, insta a los niños a beber su Fósforo Ferrero, para que puedan convertirse en grandes atletas. La empresa que producía este compuesto era española, pero anunciaba en todo el mundo de habla hispana.