Hasta el Palacio de La Moneda llegaron ayer los presidentes de los partidos de la Nueva Mayoría para participar de la reunión habitual junto a los ministros del comité político. Uno de los temas que acaparó gran parte del encuentro -dicen quienes estuvieron presentes- fue el proyecto del gobierno que busca establecer la elección democrática de los intendentes, iniciativa que se encuentra en su primer trámite constitucional y que deberá ser votada mañana en la sala del Senado.
Para aprobar el texto, que fue parte de las promesas de campaña de la Presidenta Michelle Bachelet, el Ejecutivo deberá contar con el respaldo de al menos 22 parlamentarios, apoyos que, a un día de la votación, todavía no están asegurados.
Ante esto, en la cita de ayer los dirigentes de la Nueva Mayoría emplazaron al Ejecutivo a modificar la estrategia para lograr la aprobación del proyecto. Según los asistentes a la reunión, el llamado apuntó a que la iniciativa sí contempla un traspaso real de competencias y atribuciones para las nuevas autoridades regionales, pero que ha sido el gobierno -dijeron los dirigentes en el encuentro- el que no ha socializado de buena manera ese aspecto de la iniciativa.
Justamente, la supuesta falta de competencias que tendrían los nuevos intendentes ha motivado los cuestionamientos al proyecto desde sectores de la oposición y del propio oficialismo, cuyos rechazos podrían provocar que fracase la iniciativa.
Así, pese a contar con mayoría de representantes de su sector en el Senado, el gobierno apostará a conseguir votos de la oposición e independientes para salvar el proyecto. Y si bien gran parte de los legisladores de Chile Vamos tiene contemplado abstenerse o votar en contra -acusando que La Moneda no ha realizado un ofrecimiento concreto para mejorar algunos aspectos-, un sector de RN está dispuesto a respaldar la iniciativa.
En total, son dos los senadores de ese partido que votarán favorablemente: Francisco Chahuán y José García Ruminot. Junto a estos están también los senadores Manuel José Ossandón (ex RN) y Lily Pérez (Amplitud). Y a ellos se podría sumar Baldo Prokurica (RN).
"Chile será descentralizado o no será desarrollado", comentó Chahuán. Y agregó: "Quiero pedir coherencia en las bancadas de Chile Vamos y emplazarlos a que voten favorablemente este proyecto, independiente que después tendremos que dar una lucha por el traspaso de competencias".
Chahúan, de hecho, es uno de los legisladores de oposición que ha sido contactado por el ministro de la Segpres, Nicolás Eyzaguirre, y por el subsecretario de Desarrollo Regional, Ricardo Cifuentes, en el marco de las gestiones del Ejecutivo para lograr los apoyos necesarios.
Por su lado, Ossandón, quien aspira a representar a la centroderecha en las próximas elecciones presidenciales, dijo que "en principio estoy de acuerdo; el proyecto es insuficiente, pero por algo se empieza". Y sostuvo que "si yo llego a ser gobierno, vamos a dar las atribuciones que corresponden".
El senador conversó este tema con Eyzaguirre en una reunión que sostuvieron el jueves pasado en La Moneda.
Desde la UDI, en tanto, la senadora Ena von Baer se inclina por una abstención, repitiendo la postura que tomó durante la votación del proyecto en la Comisión de Gobierno de la Cámara Alta. "Si el Ejecutivo cambia el proyecto y pone sobre la mesa la elección con las facultades, estaríamos de acuerdo, pero como no es así, no es una reforma que vaya en la dirección correcta", dijo.
Rechazo interno
Sumadas a las críticas de un sector mayoritario de la oposición, el proyecto del gobierno también ha encontrado un duro rechazo en la Nueva Mayoría.
Los cálculos que sacaban hasta ayer en La Moneda era que no contarían con el apoyo de al menos tres senadores del PPD: Felipe Harboe, Ricardo Lagos Weber y Adriana Muñoz, misma postura que tomarían Carlos Montes (PS) y Pedro Araya (Ind.-DC).
Frente a las críticas de los legisladores de su partido a la iniciativa, el presidente del PPD, Gonzalo Navarrete, dijo ayer que "tenemos que hacer el esfuerzo para que lo senadores del PPD, que tienen reticencias con respecto al tema del quórum o de las competencias, entiendan que si no hay reforma constitucional, ni las competencias ni las formas de elección tienen sentido". Y agregó: "Lo que vamos a hacer entre partido y gobierno es tratar de que nuestros senadores se allanen a que esta reforma constitucional se apruebe esta semana".
Descontando a quienes se inclinan por rechazar, el Ejecutivo contaría con los votos favorables de seis senadores DC, cuatro del PS y dos del PPD. A esos se sumarían los independientes Alejandro Guillier (pro PR) y Carlos Bianchi, quienes hace algunas semanas propusieron la fórmula para que los intendentes sean electos con al menos un 40% de la votación.
Otros que de igual manera estarían en línea con el proyecto son los senadores Alejandro Navarro y, eventualmente, Antonio Horvath.
Entre los indecisos, en tanto, están Alfonso de Urresti (PS) y Eugenio Tuma (PPD), quien, eso sí, se muestra abierto a dar su respaldo. "Si el gobierno da una señal de descentralización de verdad, yo votaría favorablemente", comentó.
Asegurando a estos últimos, el Ejecutivo contaría con 18 votos a favor, que vendrían a sumarse a los cuatro apoyos ya pactados con la oposición, alcanzando el quórum mínimo de 22 votos favorables.
Así, la jornada de hoy será la última instancia para que el gobierno, y en especial el ministro Eyzaguirre -quien ha liderado las tratativas- logre asegurar los respaldos en la oposición y entre los oficialistas que muestran apertura.
De no alcanzar los apoyos, resultando en el rechazo del proyecto en sala, el gobierno tendrá que esperar un mínimo de un año para poder ingresar una nueva iniciativa.