"Si este personaje me hubiese llegado a los 25 años, estaría arriba de la pelota", reconoce Pablo Macaya. Pero tiene 44 años, una larga carrera y lo que ha pasado con rol de Alvaro en la exitosa Soltera otra vez lo mira con distancia. Con la tranquilidad que da la experiencia. "Obvio que me doy cuenta que es un éxito, he tenido otros momentos en otras pegas exitosas, pero esto pareciera ser más. Pero la televisión es súper inmediata y pasa rápido: termina la teleserie y a las tres semanas la gente se olvida", asegura.

En los últimos días, el nombre de Macaya ha estado en los Trending Topics (temas más comentados) en Twitter, tras el capítulo del martes pasado, cuando su personaje besó por primera vez a Cristina (Paz Bascuñán). Desde entonces, las mujeres le declaran su amor por la red social y en Facebook se han creado grupos como "Me pasan cosas con Pablo Macaya". El se ríe. Porque ni se había enterado. "No estoy en ninguna red social, con suerte reviso mi correo, de vez en cuando". Pero agrega: "Obviamente me lo tomo con humor y me sorprende. Uno sabe que le va a ir bien a algo y cuando funciona mucho y uno es un éxito, entre comillas, es sorpresivo. Pero hay que cachar que si a uno le va bien es porque está metido en una historia bien hecha", señala.

Y esa postura de bajo perfil concuerda con su vida fuera de los set: tiene una parcela en Curacaví, donde convive con sus mascotas y plantas, porque jardinear es su mayor relajo. "Es agradable vivir fuera de Santiago, la naturaleza es lo mejor para uno, para el espíritu. Me gustan los arbolitos, las plantas, los perros, la lluvia, porque ahí estás en otra". En ese contexto, reconoce que su estilo va en sentido contrario al de muchos de sus colegas. Casi no asiste a eventos y se mantiene al margen de la exposición mediática. El explica: "Uno trabaja con muchas personas, para donde vas conoces gente y cuando terminas lo único que quiere es irte tranquilo a la casa y no seguir en lo mismo. Es para variar un poco, porque no puede estar todo el día en función de la misma cosa".

En el rol de vecino de Cristina -la protagonista de Soltera otra vez-, y como un antigalán que vive solo hasta que decide partir a trabajar al sur, Macaya tiene quizás el punto más alto de una carrera que partió en telenovelas en 1994, con Top secret y que tuvo un coqueteo en la conducción en Grado 28, del desaparecido Canal Rock & Pop. Tras participar en varias nocturnas de TVN, en 2008 llega a Chilevisión y estando ahí encarna a "El Chaka" en Mujeres de lujo, un personaje que también tuvo cierta popularidad. Pero el año pasado regresó a Canal 13. "Veo bien al canal, pero lo que a mí me importa es cómo está la gente que trabaja conmigo, a la que conozco hace años y le tengo cariño", afirma.

Por estos días, el actor graba la próxima teleserie nocturna: Las Vegas, en la que interpreta al barman de un cabaret y que dirige Herval Abreu, responsable también de Soltera otra vez. "Los actores en esta teleserie fueron elegidos muy al callo: necesitábamos un galán más moderno, que le gusta mucho más a las mujeres, porque Alvaro es más incorrecto, no el niño bonito ni bueno, si no que un macho que se ve muy seguro y fuerte, pero al mismo tiempo despierta un instinto en las mujeres de rescatarlo", resume Abreu sobre la elección de Macaya para interpretar a Alvaro.

El beso

Este miércoles Soltera otra vez logró el rating más alto desde que partió: 30,9 puntos y un peak de 35,1 unidades. El día anterior había dado que hablar, con el beso entre Cristina y Alvaro, lo que allanó el camino. La escena que encendió el people meter y Twitter con él abrazando a su vecina de la cintura, tras una fuerte discusión, tiene su historia tras las grabaciones. "En general, cuando marcamos esas escenas se hace muy técnicamente, pero en el caso de esta escena, se hizo al revés. No se hicieron marcaciones técnicas, sino una mucho más emocional, porque la misión era que mientras ellos estaban gritándose cosas, nadie sospechara que venía un beso", relata el director de la apuesta, Herval Abreu. "El único gesto técnico que le marqué a Pablo fue que tomara a Paz por la cintura rápido y la llevara hacía él, la mirara unos segundos, que se sintiera desvalido y después de eso la besara. Creo que de ahí en adelante está la generosidad de los actores que se entregaron bien a la escena", agrega el realizador, quien afirma que la relación sentimental que tuvieron en la vida real -hace muchos años- Macaya y Bascuñán "la puso más nerviosa a ella. Cuando las escenas son intensas, uno intenta distender un poco el ambiente, porque aunque no lo crean, los actores se ponen nerviosos en esas escenas y este era el primer beso entre los personajes".

El futuro cercano

Macaya está grabando la próxima nocturna de Canal 13 y adelanta que, por lo menos hasta fin de año, no tiene planes de hacer nada más en términos profesionales, fiel a su estilo de no recargar sus horarios. "Es por una actitud mental. Prefiero dedicarme 100% a esto y sé que lo termino en diciembre", dice, junto con comentar que "no vale la pena pensar en proyectos, porque todo cambia y uno empieza a hablar de lo que puede llegar a hacer y después esos proyectos se mueren. Yo prefiero hablar de cosas concretas".

Mientras que del futuro de la teleserie nocturna (que con sus 25,9 puntos promedio es la telenovela más vista en lo que va del año), que finaliza en las próximas semanas, Abreu adelanta que "la producción se pega una subida de tono fuerte, porque se empieza a desarrollar todo, no le quedan tantos capítulos". Y adelanta: "Viene el matrimonio de Samir (Nicolás Poblete) con Fabiola (Lorena Bosch),donde existe la promesa de Cristina de ir con Rodrigo (Cristián Arriagada). Además, la pareja entre Rodrigo y Nicole está en colapso, todo ese mundo ideal que vivían les está pasando la cuenta".