Son calles importantes para la gestión vial de sus ciudades, pero están en mal estado y por diversas razones su utilidad estratégica no ha ido de la mano con la preocupación de las autoridades para repararlas.

En un recorrido por las principales ciudades del país, La Tercera detectó arterias con graves daños, con hoyos peligrosos y por donde transitan vehículos a alta velocidad. Calles repletas de baches en medio de zonas turísticas o comerciales.

En Viña del Mar, por ejemplo, por más de 30 años, los habitantes de los sectores de Gómez Carreño, Santa Julia y Santa Inés han solicitado la reparación de la Avenida Alessandri, la calle que conecta el centro de la Ciudad Jardín con los cerros más poblados de la urbe y que actualmente está desnivelada y sembrada de baches y pavimento quebradizo.

Pero vienen buenas noticias: la reparación de 4,5 kilómetros, entre 15 Norte y Rotonda Santa Julia, comienza el primer trimestre de 2012. El arreglo, que se estima en $ 9 mil millones, será financiado por el Ministerio de Transportes con los fondos de compensación del Transantiago. Las mejoras incluyen cambio de carpeta de rodado y diseño con doble calzada, dos pistas por sentido, bandejón central y aspectos urbano-paisajísticos. El Serviu adjudicará estas obras en noviembre.

En la misma ciudad, la avenida Agua Santa, que conforma el principal acceso a Viña del Mar desde Santiago, está en iguales condiciones: baches, desniveles y roturas caracterizan su trazado, por donde circulan vehículos a más de 100 km/h. La alcaldesa Virginia Reginato dijo que la reparación de la vía, que tendrá un costo de $ 250 millones fue postulada al Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) para el 2012.

Pero la vía que más preocupa a los habitantes de la zona es la Avenida España, que conecta a Valparaíso y Viña del Mar. Por la arteria transitan más de 80.000 vehículos diariamente y lo hacen sobre una carpeta asfáltica y de hormigón con evidentes deterioros, que no han sido abordados por las autoridades regionales.

Hoy, el Serviu de Valparaíso sólo tiene en trámite un estudio de mejoramiento de la vía y de la intersección de Caleta Portales. "Propone hundir la Av. España en 12 metros (...). La idea es disminuir la congestión vial y peatonal", sostuvo la directora del servicio, María Cruz.

Luego del estudio, la Municipalidad de Valparaíso debe postular el proyecto completo a financiamiento regional, por un costo de $ 15.000 millones.

En Santiago, pese a las inversiones realizadas en los últimos años con fondos del Transantiago, resta por intervenir algunas calles. Una de ellas es Coventry, en Ñuñoa. Según explica el director del Serviu Metropolitano, Daniel Johnson, la vía de 1.392 metros será reparada el próximo año, con una inversión de $ 21.000 millones, entre Irarrázaval y Estrella Solitaria. "La conservación y mantención de las vías, no sólo por las que pasa el Transantiago, sino que de todo tipo de ellas, nos permite mejorar la calidad de vida de los capitalinos", dijo el directivo.

Vías terremoteadas

En Constitución, VII Región, los estragos causados en las veredas y calzada de la céntrica calle Freire, por el terremoto y las demoliciones, son un peligro para automovilistas y peatones. Enormes hoyos en la calle generan incomodidad y daño de vehículos. Según la directora regional del Serviu, Clarisa Ayala, se dispone de un presupuesto de $ 252 millones para reparar la calzada y vereda de calle Freire.

En Concepción, el terremoto también dejó su huella en las calles. Los hoyos de la arteria Juan Bosco se transformaron en verdaderas trampas para los automovilistas con la lluvia. La semana pasada se iniciaron las obras de reparación, que tendrán un costo de $ 410 millones.

Otra vía dañada es la céntrica Maipú de Concepción. Por ella los conductores deben pasar a muy baja velocidad, para no toparse con un desnivel. La vía será reparada en 2012 y el costo de las obras superaría los $ 1.632 millones.