"Devastada" y "molesta". Así dijo sentirse la duquesa de York, Sarah Ferguson, luego de que un periódico dominical británico la grabó en video cuando ofrecía facilitar el acceso a su ex esposo y enviado comercial de Gran Bretaña, el príncipe Andrés de Inglaterra, a cambio de 500.000 libras (US$ 724.000).

El periódico sensacionalista News of the World publicó en su sitio de internet un video en el que muestra a Ferguson -seriamente endeudada- negociando un arreglo. Se escucha que dice: "500.000 libras cuando puedas, para mí... puertas abiertas". Cuando se le pregunta si está hablando del príncipe, responde: "Sí".

Ferguson, de 50 años, hablaba con un periodista que se hizo pasar por empresario. La mujer parece pedir 40.000 libras en efectivo, antes de la transferencia de medio millón de libras para hacer las gestiones para que el falso hombre de negocios pueda reunirse con el segundo hijo de la Reina Isabel II y cuarto en la línea de sucesión al trono de Inglaterra.

Una portavoz de la duquesa dijo más tarde que "Fergie" estaba muy alterada por el reporte. "Ella estaba devastada por la historia y lamenta profundamente la situación y cualquier vergüenza que haya causado", afirmó Kate Waddington. El Palacio de Buckingham no había hecho comentarios al respecto. News of the World dijo que el príncipe no tenía conocimiento de los movimientos de su ex mujer. En la cinta, Ferguson deja claro que el príncipe "nunca acepta ni un penique a cambio de nada".

Problemas económicos

"No tengo un centavo", justificó Sarah Ferguson, quien explicó que su acuerdo de divorcio la dejó con un ingreso de 15 mil libras al año. "Soy una contribuyente británica, dejé la familia real por la libertad y estoy por el suelo. No tengo esperanzas", dijo Ferguson. "Somos la pareja divorciada más feliz del mundo", le confió Sarah a su interlocutor.

Según News of the World la grabación, donde se ve a Ferguson estrechar la mano del falso empresario, fue realizada el martes en un departamento de Londres.

Andrés y Sarah Ferguson, que tienen dos hijas, las princesas Beatrice y Eugenie, se divorciaron amistosamente en 1996 después de 10 años de matrimonio. A pesar de que Ferguson no consiguió lograr la fama mundial de la princesa Diana, se hizo muy popular en EE.UU. después de varias apariciones en televisión, de escribir varios manuales para perder peso y libros infantiles, además de realizar trabajos benéficos.

Pero también es sabido que ha tenido problemas financieros. Hace poco, Hartmoor LLC, la compañía que creó para manejar su carrera de conferencias, apariciones mediáticas y publicaciones en Estados Unidos, se derrumbó ante sus deudas de casi un millón de dólares.