Son casi 513.621 profesores, educadores de párvulos, asistentes de la educación, directores, administrativos y manipuladores de alimentos de la Junaeb -según las proyecciones del Ministerio de Educación- el tamaño del grupo objetivo beneficiado para recibir la vacuna contra el Covid-19 como parte del proceso general de inoculación del país.
Sin embargo, y a 10 días de iniciado este proceso para los profesionales de la educación, las cifras de avance que muestra el Departamento de Estadísticas e Información en Salud (DEIS) aún son bajas -a juicio de personeros de Salud- respecto del universo de referencia: apenas 115.516 profesionales ligados a la educación han asistido a inocularse con la primera dosis.
Quienes conocen del registro hacen la advertencia de que los profesionales paradocentes pueden estar siendo registrados en el subgrupo de población sana y que la cifra podría ser un poco más elevada. Acorde a cifras que maneja el Mineduc, el número de profesionales vinculados al magisterio ya alcanzaría 176 mil trabajadores en total y que la velocidad diaria en este grupo de vacunación se ha ido elevando con el pasar de los días y considerando que avanza por rango etario.
Con todo, el líder del Colegio de Profesores, Carlos Díaz, reconoce que la convocatoria “efectivamente ha sido un poco lenta, pero también ha sido (un proceso) bastante desordenado. Ha habido situaciones al inicio, que se decía que estábamos en una prioridad, luego en otra: no se sabía en qué prioridad estábamos; también se habló de una fecha, luego se adelantó, incluso algunas comunas se adelantaron. También ha generado conflicto cómo se comprueba que se es profesor o no: en algunas comunas pedían carné de identidad, en otras liquidación de sueldo, el documento del Colegio de Profesores. También lo de la edad, que se vacunaba un colega de 60 y otro de 40, después no″.
En ese contexto, Díaz espera que la adhesión a la vacunación mejore en los próximos días, cuando ya se comience a inocular a los profesores más jóvenes que corresponden al grueso del grupo objetivo.
“Se supone que en este rango debiera generarse más rapidez. También hay otra situación, que si bien es cierto que cada profesor podía vacunarse en la comuna que estuviera, independiente si es residente o no, también hemos sabido que algunos están prefiriendo hacerlo en la comuna donde habitan, seguramente están esperando volver de vacaciones. Nosotros esperamos que esto se vaya normalizando en los próximos días. Por sobre todo, reitero que hay un desorden inicial que afectó bastante (al ritmo de vacunación)”, remata.
En el Gobierno y en la cartera sanitaria existe cierta incomodidad y preocupación por la lentitud del proceso, pues en privado comentan que “fue un costo que se asumió priorizar a los profesores porque se retrasó la vacunación de los crónicos al 8 de marzo, que inicialmente estaba estipulada para el 22 de febrero”.
Con ese antecedente y con el bajo ritmo de inoculaciones diarias -92 mil se registró el martes-, ayer Salud determinó incluir a dos grupos de enfermos crónicos que ya habían manifestado su molestia por estar rezagados en el calendario -trasplantados y dializados-, aunque no precisamente por los profesores, sino que por los funcionarios críticos del Estado que ha determinado cada repartición.
“Hoy recibimos más de 189 mil dosis de Pfizer que nos permitirá seguir adelante con el calendario de vacunación. Hoy informamos que se ha priorizado dentro de los grupos de vacunación a contar de mañana (jueves) a las personas que están en tratamiento con diálisis. También vamos a incorporar desde mañana, con la vacuna Pfizer a aquellas personas que se encuentran trasplantadas de órganos sólidos. Ellos también son personas de alto riesgo y en la medida en que vayamos recibiendo dosis, incorporaremos nuevos grupos de riesgo”, confirmó por la mañana de este miércoles la subsecretaria Paula Daza.
Así, ya se evalúa que desde la próxima semana los grupos con comorbilidades tengan un rango más amplio de edades por día, con el fin de ir avanzando más rápido, considerando al menos tres factores: que las dosis están disponibles, que hay una urgencia particular por utilizar las dosis de Pfizer debido a sus condiciones de almacenamiento, sobre todo en los lugares lejos de los centros urbanos, y que ya se ha comprobado que existe la capacidad de vacunar a más de 200 mil personas diarias.
Enfermedades mentales son incluidas en grupo de vacunación
La última actualización de los grupos objetivos para la vacunación contra el Covid-19 establece que las enfermedades graves de salud mental (esquizofrenia y trastorno bipolar) fueron incluidas en el grupo 1e que corresponde a enfermedades crónicas. En ese sentido, quienes padezcan alguna de esas dos patologías podrán inocularse contra el coronavirus una vez que se inicie el proceso para los pacientes con comorbilidades.
La información la corroboró el ministro de Salud, Enrique Paris. “Se agregó antes de ayer, a solicitud del Departamento de Salud Mental. Los argumentos eran válidos y los aceptamos. Lo que ocurre es que una persona con trastornos mentales graves tiene más dificultades para mantener el aislamiento, el uso de la mascarilla o las medidas para evitar la contaminación viral, por eso los incluimos en dicho grupo”, precisa.
En esa misma línea, Daza anunció este miércoles que para 2021 “el aumento de presupuesto para salud mental respecto de la expansión del año anterior corresponde a un 310%, que equivale a 18.300 millones de pesos, los cuales serán invertidos en el fortalecimiento del recurso humano de la atención de salud mental de la población infanto adolescente con vulnerabilidad psicosocial y en niños, niñas, adolescentes y jóvenes del Sename, lo que beneficiará a cerca de 50.869 niños, niñas y adolescentes”.