Una suma de US$222 millones presentó el consorcio liderado por la empresa china Aisino Corporation en la oferta económica para la “Licitación del nuevo modelo de sistema de identificación, documentos de identidad y de viaje” de Chile, cuyos resultados dio a conocer este lunes el Registro Civil.

El monto, fue el menor de los cinco oferentes en competencia, tema no menor, si se considera que esta vez el factor económico influye en un 65% en la decisión final, mientras que la evaluación técnica pesa un 30%. El otro 5% corresponde a temas más administrativos.

Idemia, quien tiene hoy la concesión de los documentos de identificación nacionales, quedó en segundo lugar con su oferta de US$245 millones. Luego está la alianza entre Sonda y Thales (US$261 millones), Telefónica Chile (US$303 millones) y por último, Veridos, que ofertó US$379 millones.

A pesar de no ser muy conocida en Chile, Aisino es una de las cinco compañías tecnológicas más grandes de China, junto a Huawei, Alibaba, Xiaomi y Tencent. Su principal negocio es la seguridad informática con foco en el sector financiero, Internet de las Cosas (IoT) y la informatización fiscal. Actualmente tiene varios proyectos andando o como propuestas para el sector público, principalmente en países de África, Asia oriental y Medio Oriente. En Europa solo tiene proyectos “en preparación” en Rusia y Bielorrusia, y no está en América, con excepción de la licitación en nuestro país.

Aisino cotiza en la bolsa de Shangai y es parte de un grupo de empresas agrupadas y controladas por CASIC (China Aerospace Science and Industry Corporation Limited), de propiedad del Estado de dicho país. Este consorcio es una de las 500 empresas más importantes del mundo, según su sitio web corporativo, y está entre las 100 empresas de defensa más relevantes del planeta. “Es la columna vertebral de la industria espacial de China y un líder en el desarrollo de la informatización industrial de China. CASIC posee 19 laboratorios nacionales clave o centros de tecnología de ingeniería y 28 plataformas de innovación de ciencia y tecnología”, señala su sitio web.

Con respecto a Aisino, posee cerca de 20.000 empleados. El primer trimestre de 2021 su capitalización fue de US$23.300 millones, bastante menor a la del mismo periodo de 2020 (US$35.600 millones).

En la licitación del Registro Civil, Aisino participa en conjunto con cuatro empresas más. Por un lado están las chinas Hising Technology, Iristar y Yitu, especialistas en temas como inteligencia artificial o ciertos desarrollos tecnológicos. Además, conforman este consorcio la alemana Muhlbauer, que es la que maneja los datos e imprime las cédula de identidad y pasaportes. Dicha firma germana participó junto a Idemia (ex Morpho) en la licitación anterior, pero más tarde se retiraría de la operación.

La ventajosa posición de Aisino podría generar suspicacias en un proceso que no ha estado exento de polémicas en otras ocasiones. De hecho, ya han aparecido algunas preocupaciones de que una oferta más barata baje la calidad técnica de los carné y pasaportes. Mientras en los puntajes técnicos de la licitación todos los otros oferentes obtuvieron una calificación de 30 puntos, Aisino tuvo la peor con 28,1 puntos.

Otro aspecto relevante a considerar es la seguridad en el manejo de los datos, dado que la empresa ganadora se hará cargo de los documentos en los próxima década. Aunque las licitación dice que la empresa que opere el contrato del registro civil no manejará ningún dato, ni ninguna información personal.

En el último tiempo ha habido cuestionamientos a nivel mundial hacia las empresas chinas en este último aspecto, sobre todo de EE.UU. Hace cerca de un año, cuando el conflicto comercial entre Washington y Beijing estaban en un punto muy alto, el FBI emitió una alerta a las empresas estadounidenses debido a un supuesto malware (código que daña los sistemas informáticos) instalado de forma secreta en las redes de empresas extranjeras que operan en China, lo que sería una exigencia del gobierno asiático. Estos software -según el FBI-podían infiltrarse en redes informáticas y robar datos de compañías estadounidenses que operan en China. La agencia norteamericana agregó que había detectado este malware en Aisino, pero esta última desmintió posteriormente la información.

PULSO consultó a Ma Zhenshou, vicepresidente de Aisino, quien desde China aseguró que la protección de datos es el “elemento vital” en su propuesta. “Creemos que las disputas entre China y EE.UU. sobre el uso de datos son normales y cada país hace todo lo posible para proteger los datos importantes. Aisino es una empresa cuyo núcleo es la seguridad de información. Hemos gastado muchos recursos financieros en este aspecto. Al mismo tiempo, Aisino siempre se ha adherido a no tocar ningún dato del usuario. Solo brindamos servicios del sistema y todos los datos son controlados por los usuarios”, señaló, y agregó que “en la actualidad no estamos involucrados en discusiones similares en ningún país”.

¿Pero cuáles son los planes de esta gigante asiática para Chile, aparte de la posibilidad de ganarse la licitación del Registro Civil? En una entrevista anterior, su vicepresidente ya había sincerado de que ven a nuestro país como una plataforma para la región, algo que ratifica ahora. “Chile es el país más desarrollado de América del Sur. Siempre lo hemos considerado como la base para extender el negocio de Aisino en América Latina, siendo Chile el centro radiador del mercado sudamericano. Si otros países tienen necesidades similares en el futuro, participaremos activamente en los proyectos dando el apoyo. Estamos siguiendo los proyectos de informatización en Colombia, Argentina, Brasil, Perú, Uruguay y otros países”, comentó.

Con respecto a nuestro país, Ma Zhenshou aseguró que no solo abrirán oficinas en Chile, también “contrataremos empleados locales e introduciremos las empresas chinas de cadenas industriales relacionadas para que inviertan en Chile. Además, las áreas de negocio de Aisino son muy completas, incluyendo impuestos, transporte, finanzas, IoT, gestión judicial etc. También esperamos que en el futuro tengamos la oportunidad de brindarle al gobierno chileno el servicio de múltiples industrias”, apuntó el alto ejecutivo asiático.

De momento contrataron los servicios de la consultora chilena KOM, la que los representa en la licitación. Esta firma se dedica a asesorar proyectos de inversión extranjeros.

Uno de los objetivos principales del Registro Civil en esta licitación es bajar los precios de los carné y pasaporte, pero -como lo han mencionado- sin despreocupar los temas técnicos y de protección de datos.

El próximo paso es la adjudicación y el plazo para ello es el próximo 6 de octubre. Luego, el 19 de noviembre, es la fecha estimada de firma de contrato con la empresa ganadora, el cual debería comenzar a operar en diciembre de 2022.