La circulación del Covid-19 hizo que muchos otros virus desaparecieran del mapa debido al uso de mascarillas y a otras medidas preventivas, como, por ejemplo, el aislamiento. Sin embargo, en 2022 y 2023 la circulación viral reapareció y durante los meses más fríos del año volvieron a presentarse enfermedades como la influenza y el virus sincicial.

Los casos aumentaron con tal magnitud que ya en febrero de este año las autoridades informaban que el verano 2024 había sido el periodo con mayor circulación de virus en, al menos, 13 años. Debido a la preocupación por el aumento de contagios por influenza, desde el gobierno iniciaron una campaña de vacunación contra la influenza el pasado 6 de marzo hasta el 14 de mayo o hasta que se inoculara al 85% de la población a nivel nacional. Todo, con la finalidad de frenar los contagios antes del invierno y la bajada de temperaturas.

Pero hoy la situación no parece mejorar. Según el último informe realizado por el Instituto de Salud Pública (ISP), en las 19 semanas epidemiológicas que se han analizado durante 2024 se han registrado 5.992 casos de contagio del virus influenza A, lo que configura un aumento del 75,5%, si se toman en cuenta los casos acumulados hasta la semana 19 de 2023.

Y si bien desde el Ministerio de Salud (Minsal) ya adelantaban que desde abril se observaba un aumento importante en la circulación de virus respiratorios en el país, el peak de casos de influenza A en lo que va del año se registró la semana 19 -que comprende del 5 al 11 de mayo-, donde ingresaron 1.441 contagios positivos.

Incluso, al comparar la misma semana de ambos años, la semana 19 de 2024 (1.441 casos) supera a la de 2023 (676 casos) en un 72%.

Para la doctora broncopulmonar del Hospital FACH y Clínica Dávila, Carolina Herrera, el aumento en los contagios de influenza se debe a tres razones principales. Primero, que el virus de influenza H3N2 ha sido el predominante en esta época, al igual que el virus H1N1, e influenza B. Segundo es el ambiente, pues el frío hace que se ventilen menos los lugares, por lo tanto circulan más cerca los virus en lugares cerrados. Y tercero, la salud del huésped que puede influir en el contagio.

“En Chile tenemos una salud respiratoria que está mermada por obesidad, sobrepeso en un gran porcentaje de la población, cerca del 70% en obesidad, 12% de diabetes, 10% de personas con asma, 33% de personas que fuman, o sea un porcentaje no menor de la población que está vulnerable en materia respiratoria”, explica la profesional.

La influenza no es el único virus respiratorio -el cual representa el 61,9% del total- que amenaza con afectar a la población, pues también se ha detectado la presencia importante de casos como rinovirus (24,1%), adenovirus (5%), parainfluenza (4,8%), VRS (1,5%), SARS-CoV-2 (0,6%), influenza B (0,4%), metapneumovirus (0,3%) y otros (1,4%).

El grupo de edad más afectado por el virus de influenza ha sido de 15 a 54 años. Aunque para la enfermera jefa de epidemiología del Hospital del Carmen de Maipú, Cynthia Villalobos, durante las próximas semanas “el contagio se verá aún más reflejado en los adultos mayores y menores de un año al ser grupos de riesgo”.

El pasado viernes 17 de mayo, el seremi de Salud RM, Gonzalo Soto, hizo un llamado al autocuidado de la ciudadanía en base a la situación epidemiológica de la región y la incidencia de la detección del virus de tipo influenza A.

Asimismo, informó que al 14 de mayo la cobertura de vacunación de influenza registraba 5.144.873 dosis administradas, es decir, un 54,3% de la población objetivo.

“Estamos en la mitad del otoño y tenemos todo el invierno por delante, por eso es fundamental que podamos vacunarnos contra la influenza lo antes posible, sobre todo porque la influenza al vacunarnos, las defensas van a tardar”, agregó en su momento.

Aunque para la doctora Herrera, la estimación de vacunación cerca del 52% está lejos de ser aún un porcentaje en meta que debe superar el 80%.

“Aquí hay que llamar a ciertos grupos que son las madres y los padres de niños entre 1 y 5 años, entre 1er. y 5to. básico, que son un grupo que están subvacunados. También tenemos que hacer un llamado a los adultos que cuidan lactantes menores de seis meses que no se pueden vacunar y que tienen que vacunarse en la estrategia capullo y así sucesivamente”, cerró.