En un hecho poco común, miles de cubanos marcharon ayer por las calles de La Habana y en el pequeño poblado de San Antonio de los Baños en una inédita protesta contra el gobierno impulsada por el descontento frente a la crisis económica. Con gritos de “¡Libertad!”, “¡Abajo la dictadura!” y “No tenemos miedo”, los manifestantes, en su mayoría jóvenes, marcharon en contra del desabastecimiento y el alza de precios en productos de la canasta básica, en medio de la crisis sanitaria generada por la pandemia del Covid-19.

Pasadas las dos de la tarde y bajo un fuerte sol comenzaron a llegar de todas las esquinas personas a la calle de San Lázaro en la capital cubana, que se fueron sumando a la protesta, cortaron la circulación de vehículos y se dirigieron hacia el Malecón. Varias personas salieron a sus balcones para aplaudir a los manifestantes después que el servicio de Internet fue cortado por las autoridades durante la jornada de ayer.

También se realizaron manifestaciones en otros puntos de la isla, como en San Antonio de los Baños, un pequeño pueblo rural de la provincia de Artemisa. Con alrededor de 500 mil habitantes la urbe protestó por cortes en el suministro de energía eléctrica.

El Presidente de Cuba, Miguel Díaz Canel llegó hasta el poblado acompañado de militantes del Partido Comunista (PCC) que marcharon al grito de “Viva Cuba” y “Viva Fidel. Horas más tarde, el mandatario compareció ante la televisión para hacer un llamado a los cubanos a salir a las calles para defender la revolución.

“Convocamos a todos los revolucionarios a salir a las calles a defender la revolución en todos los lugares. No vamos a entregar la soberanía de nuestra Patria. Les recuerdo que hace más de un año y medio cuando se iniciaba el segundo semestre del año 2019 tuvimos que explicar que íbamos a una coyuntura difícil”, aseguró Díaz Canel.

El mandatario cubano señaló que la crisis económica se debe al “recrudecimiento del bloqueo” de Estados Unidos “con el objetivo de asfixiar nuestra economía y que eso provocara el anhelado estallido social masivo”, pero puntualizó en las dificultades de los cubanos con el servicio eléctrico y medicamentos.

Desde que comenzó la pandemia del coronavirus, en marzo de 2020, los cubanos están obligados a hacer largas filas para abastecerse de alimentos, situación a la que se ha sumado una fuerte escasez de medicamentos, lo que ha generado un amplio malestar social.

La protesta se produce en una jornada en la que Cuba registró otra cifra récord de contagios de Covid-19, con 6.923 y 47 fallecidos en 24 horas, dejando un total de 238.491 casos y 1.537 decesos. ”Son cifras alarmantes, que se incrementan por día”, dijo este domingo el jefe de Epidemiología del Ministerio de Salud cubano, Francisco Durán, en su habitual conferencia de prensa en televisión.

La situación es especialmente tensa en la provincia turística de Matanzas, ubicada 100 kilómetros al este de La Habana, donde el alto número de contagios puede hacer colapsar los servicios de salud. Bajo las etiquetas #SOSCuba”, #SOSMatanzas” o #SalvemosCuba”, entre otras, se multiplican en las redes sociales los llamados de socorro, pero también los reclamos al gobierno para que facilite el envío de donativos desde el exterior”.

Un grupo opositor pidió establecer “un corredor humanitario”, iniciativa que el gobierno descartó. ”Los conceptos ligados a corredor humanitario y ayuda humanitaria están asociados a zonas en conflicto y no aplican a Cuba”, afirmó el director de Asuntos Consulares y Atención a Cubanos Residentes en el Exterior de la Cancillería cubana, Ernesto Soberón.

Soberón también denunció “una campaña” que busca “presentar una imagen de caos total en el país que no se corresponde con la situación actual”. No obstante, el funcionario anunció que el gobierno habilitará hoy una cuenta de correo para agilizar los donativos desde el exterior.