En enero pasado, el Presidente Sebastián Piñera -siguiendo lo establecido en el inciso final del Artículo 133 de la Constitución Política de Chile- decidió que la Secretaría General de la República (Segpres) sería el órgano que prestará el apoyo técnico, administrativo y financiero para la instalación y funcionamiento de la convención constitucional.

Posteriormente, a través de un decreto, se establecieron cuáles serán las atribuciones que tendrá la Segpres para cumplir con ese objetivo, el que contempla la creación transitoria de la unidad de Secretaría Administrativa de la convención, el cual estipula que debe designar un secretario nombrado por el titular de la cartera, Juan José Ossa.

Para cumplir con esa disposición, Ossa oficializó ayer ese nombramiento y nominó en el cargo al cientista político y MBA en administración de empresas y negocios Francisco Encina (35), quien es militante de Evópoli desde el 2018 y, según afirman en el gobierno, tiene “más de 10 años de experiencia” en el sector público.

Encina llegó en septiembre de 2018 a la segunda administración del Mandatario a través del ministro de Justicia, Hernán Larraín, a quien conoce desde sus tiempos de senador por el Maule, pues el cientista político es de Linares. En esa cartera se desempeñó como jefe de gabinete de Ossa, quien, en ese entonces, era el subsecretario de Justicia. Posteriormente, cuando Ossa asumió como subsecretario y luego como ministro en la Segpres, continuó en el mismo cargo.

Encina, en todo caso, ya había trabajado en la primera administración de Piñera como delegado presidencial en el proceso de reconstrucción, en la erradicación de las aldeas de emergencia y solución habitacional. Posteriormente, según indican en el gobierno, fue asesor del director adjunto de la Biblioteca del Congreso Nacional.

En La Moneda afirman que se optó por un perfil “técnico” y que sepa de administración pública. Y que, hace un mes, cuando Piñera designó a la Segpres como el órgano encargado, Encina se hizo cargo de los aspectos administrativos y logísticos relacionados con la instalación de la convención. En esa línea, Ossa lo instruyó a dedicarse ciento por ciento a esa labor para que esté preparando la llegada de los constituyentes.

Consultado por sus nuevas funciones, Encina se restó a decir que “es un tremendo desafío, porque se trata un momento histórico para el país del cual seré parte. El rol que espero cumplir tendrá básicamente dos objetivos. El primero, tiene que ver con todo lo que corresponde a la instalación de la convención. Y, el segundo, con el funcionamiento de esta instancia”.

De acuerdo al decreto elaborado por el gobierno, dentro de las funciones que tendrá esta unidad de la Segpres a cargo de Encina está la ejecución de los presupuestos que disponga la respectiva ley para el funcionamiento de la convención; preocuparse de poner a disposición de la convención la infraestructura y los recursos técnicos, tecnológicos y humanos necesarios para su instalación y funcionamiento.

Asimismo, tiene la misión de gestionar las compras y la suscripción de contratos y convenios con instituciones públicas o privadas, gestionar la contratación del personal de la convención, el pago de la retribución mensual, entre otras materias.