El primer debate presidencial ya está definido. Será el 22 de septiembre y, por eso, los comandos trabajan para afinar los contenidos de sus respectivos programas. Uno de ellos es el equipo económico del candidato de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric.
En primer lugar, ya hicieron la reestructuración de quienes participarán en esta segunda etapa. Se integraron dos representantes del equipo de Daniel Jadue. Se trata de Javiera Petersen, economista y directora del Observatorio de Política Económica, y de Fernando Carmona, economista de la Universidad de Concepción, quien fuera el jefe programático del precandidato del PC. En tanto, Gonzalo Martner y Ramón López quedaron fuera de esta segunda parte del trabajo de contenido.
Del equipo original de Boric se mantienen Javiera Martínez y Diego Pardow como coordinadores. La primera es ingeniera industrial en Minas de la Universidad Católica, con un magíster en Economía Política de la University de Nueva York. Su experiencia en el Estado y su capacidad de trabajo en equipo y liderazgo la posicionan como “clave” dentro del equipo, señalan en ese entorno. Fue asesora en el gabinete del Ministerio de Educación entre 2014 y 2016, y su labor se centró en los proyectos de reforma educacional de Michelle Bachelet, calculando el impacto fiscal de algunas iniciativas de ley. En especial, trabajó en el proyecto de Nueva Educación Pública. El segundo es abogado y presidente del centro de pensamiento Espacio Público, aunque ese rol hoy en día está congelado para dedicarse a la campaña.
Si bien en el trabajo para las primarias la académica de la Universidad Mayor e investigadora del Centro de Estudios de Conflicto y Cohesión Social (Coes), Claudia Sanhueza, y el académico de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile, Nicolás Grau, participaron como asesores externos, ahora, para este nuevo ciclo, pasarán a jugar un rol más permanente. Con ambos se busca contar con mayor experiencia, ya que los dos participaron en la campaña presidencial de 2017.
Los ejes prioritarios
Con el equipo armado, se comenzó a analizar los programas con el propósito de hacer la integración de las propuestas. Quienes conocen este proceso afirman que no se redactará un programa nuevo propiamente tal, pero sí se está trabajando en los énfasis y las prioridades que tendrá la hoja de ruta en caso de ser electos y llegar a La Moneda el 11 de marzo de 2022.
La reforma tributaria es uno de los pilares de la propuesta de Boric. En su programa se señala que se elevará la carga tributaria entre 8 a 8,5 puntos del PIB en un plazo de 8 años, es decir, de dos periodos de gobierno. Jadue, en cambio, lo pretendía hacer en cuatro años. Ese es uno de “los énfasis” en discusión, pero al interior del equipo indican que ya estaría zanjado que se mantendrá la idea de avanzar en esta propuesta manteniendo el lapso de dos gobiernos (8 años).
Entre los instrumentos que se proponen está el reducir la evasión y la elusión, eliminar exenciones tributarias, cambiar la estructura del impuesto a la renta y gravar a los sectores de altos patrimonios. En el programa de Gabriel Boric se menciona que la mitad de la recaudación (entre el 4% y el 5% del PIB) proviene de “reducir la evasión, junto con eliminar exenciones tributarias injustificadas. Asimismo, se simplificará el sistema tributario a través de la desintegración, manteniendo y mejorando el régimen especial para las pymes. La otra mitad provendrá de impuestos a los altos patrimonios y el royalty minero”.
Las otras materias centrales del programa como pensiones, salud, economía verde, educación, sistema nacional de cuidados y feminismo se siguen analizando para ver cuáles serán los énfasis y prioridades que se dará en el primer año de gobierno.
Para definir esos énfasis, dicen en el comando, un insumo de primer orden por conocer es el Presupuesto de la Nación 2022, ya que eso definirá la estructura de gastos para el primer año de gobierno.