El sorpresivo feriado que aprobó el Congreso y promulgó el gobierno generó varios efectos colaterales que, al parecer, los parlamentarios no consideraron a la hora de dar su visto bueno. Horas médicas agendadas con anterioridad, juicios pendientes o trámites notariales asoman como las situaciones afectadas de primer orden. Pero no es el único. A nivel macro, el feriado no es inocuo, sino que tiene impacto y uno importante, sobre todo en momentos en que la economía inicia una recuperación.
De acuerdo a los economistas, el impacto en la producción de un día feriado fluctúa entre US$120 millones a US$150 millones. Y el mayor o menor grado depende de cada sector en particular. “Hay actividades económicas que no se ven afectadas como la minería, servicios básicos y parte de la manufactura”, sostiene el economista de Libertad y Desarrollo, Tomás Flores.
Martina Ogaz, economista de EuroAmerica afirma que hay distintos estudios que muestran que el costo que tiene un feriado en la actividad dependerá de qué día de la semana se ubique este feriado. “Muy probablemente los feriados de días lunes tengan un costo mayor sobre la actividad frente a otros días de la semana relacionados principalmente a la productividad”. Además, explica que “hay que considerar los efectos a nivel de industria que implica un feriado, como es el caso de la industria manufacturera que se puede ver perjudicada por un feriado frente al comercio o el sector servicios los cuales durante la pandemia se han adaptado a formar remotas de trabajo y funcionamiento frente a otros sectores que funcionan con trabajo presencial”.
Marco Correa, economista de Bice comenta que “estos feriados tendrían un impacto negativo para la actividad del mes, ya que la actividad manufacturera o algunos servicios dejan de operar. En condiciones normales, estos efectos son atenuados por el comercio, lo que producto de la cuarentena podrían ser menor”.
¿Y qué impacto tendrá en el Imacec?
De acuerdo a los economistas, el impacto en el Índice de Actividad Económica Mensual (Imacec) de junio será de entre 0,2 punto y hasta 1 punto. De esta manera, las proyecciones si bien siguen siendo altas debido a la baja base de comparación, ya que en junio del año pasado la actividad se contrajo 13,6%, se ajustaron a la baja, y ahora se espera las perspectivas fluctúan entre un alza de 11% y 15%. Antes el rango estaba entre 12% y 15,5%.
Valentina Cortés, investigadora de Clapes UC, añade que “normalmente esto le restaría en torno a 0,5 puntos porcentuales a la variación interanual del Imacec, pero ahora el impacto de un feriado se ve reducido con las cuarentenas, sobre todo si consideramos que un 40% de la población y casi el 60% del PIB está en cuarentena”. Para el Imacec espera esté en torno al 15% en el mes de junio.
Sergio Lehmann, economista jefe de Bci, sostiene que “entendiendo que la economía está en una fase de recuperación, comparándonos con una actividad en 2020 muy golpeada por la pandemia, el efecto en el crecimiento de un día feriado es mayor de lo habitual. Lo estimamos en torno a 1%”. Y por ello, espera que el Imacec se ubique en torno a 14,5%.
Samuel Carrasco, economista senior en Credicorp Capital, subraya que “considerando que no estamos en condiciones normales, y que casi un 60% de la población nacional está en cuarentena estimamos que el efecto estaría en torno a -0,2 puntos porcentuales del Imacec total”. Así, su proyección se sitúa en 14%.
En la parte baja de las expectativas se sitúa Martina Ogaz. La economista sostiene que estos feriados sumados a los efectos de la cuarentena en la Región Metropolitana impactarán principalmente en la medición mes contra mes, que se contraería 1,8%, mientras que en doce meses un alza de 11%.
Gremios en contra
Desde los gremios empresariales, si bien destacaron la importancia de los pueblos originarios, cuestionaron que no se haya generado un debate más amplio antes de agregar otro día libre al calendario.
“En un debate de esta naturaleza habría sido pertinente pedir la opinión de los distintos sectores antes de haber aprobado esta ley. No resulta oportuno legislar sobre feriados en momentos en que el país lo que necesita es mejorar sus condiciones sanitarias, reactivarse y fortalecer el empleo”, dijo Katia Trusich, presidenta de la Cámara de Centros Comerciales.
Algo similar opinan en la Cámara de Comercio de Santiago, (CCS), donde indicaron que es un mal momento cambiar el calendario con pocos días de anticipación, debido a la situación en que está el sector fuertemente afectado por la pandemia. Desde la Cámara Nacional de Comercio (CNC), si bien destacaron que en una época normal, un feriado no irrenunciable es una buena noticia para el sector, en pandemia la gente no puede usar este feriado para salir, y la mayoría del comercio tampoco puede abrir.
Entre las pequeñas y medianas empresas la noticia tampoco fue bien recibida. “Es importante mirar el minuto que estamos viviendo, estamos muy deteriorados producto de la crisis sanitaria”, señaló Héctor Sandoval, presidente de la Confederación Nacional de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa de Chile (Conapyme).
“Cuesta entender que, con la pandemia que ha afectado la economía nacional de todos los sectores, se decrete otro feriado”, dijo el presidente como la Confederación del Comercio detallista y Turismo de Chile, Rafael Cumsille.